Nicolás Maduro, presidente de Venezuela: “Si tocan a Dilma, si tocan a Lula, el pueblo los va a defender y van a triunfar”
Por Darío Pignotti
El presidente venezolano se refiere a la amenaza que viven los procesos progresistas de la región. “Los hijos del Plan Cóndor de hace cuarenta años son ahora los del Plan Buitre, que quieren venir por la cabeza de todos nosotros.”
Sin protocolo. Mientras Nicolás Maduro camina hacia el portal vidriado del Palacio Itamaraty los Dragones de la Independencia, la guardia de honor brasileña ataviada con cascos dorados y uniformes del siglo XIX se cuadran para despedir al visitante erigiendo sus armas. De buen talante, el mandatario venezolano se detiene al escuchar la solicitud de entrevista de este diario y responde: “¿Eres de Página/12? Buenísimo. Deberían editar en Venezuela también”.
Acaba de concluir su participación en la cumbre presidencial del Mercosur con un discurso en el que subrayó su repudio a la desestabilización de nuevo tipo que se ensaya en Brasil, Argentina y Venezuela. Las presidentas Dilma Rousseff y Cristina Fernández de Kirchner tuvieron intervenciones en esa cumbre que Maduro destaca como “importantes, ¡qué bien!”.
Antes de comenzar la grabación, Maduro elogió a sus colegas con el tono de voz in crescendo como si comenzara a hablar desde el balcón del caraqueño Palacio de Miraflores. “Valientes. Ellas se manifestaron de manera directa, correcta, contra aquellos que quieren avasallar a nuestros pueblos. Dignas. Vaya mi saludo respetuoso, afectuoso para ellas. Luchadoras contra las conspiraciones, las campañas mediáticas.”
Sin dudas, la 48ª Cumbre del Mercosur del viernes pasado estuvo dominada por el alerta frente a la avanzada destituyente.
No porque sea inédita en un subcontinente donde hubo asonadas como las de Venezuela en 2002 y Paraguay en 2012, además de los conatos en Bolivia (2008) y Ecuador (2010), sino porque es la primera vez que el espectro merodea al gigante Brasil, necesitado de un cinturón de solidaridad continental.
Maduro conversa en la puerta de la Cancillería a unos 300 metros del Congreso y 1500 del Planalto donde los teléfonos no paran de sonar.
Ocurre que mientras Dilma recibía a sus pares sudamericanos, el jefe de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, anunciaba su ruptura con el gobierno y desarchivaba un pedido de impeachment presentado por el militar retirado Jair Bolsonaro, reelecto el año pasado a fuerza de reivindicar la tortura policial y la dictadura “que nos salvó de ser una Cuba totalitaria como la que querían los terroristas que están ahora en el Planalto”.
–¿Hay cada vez más fantasmas ?
–Hay fantasmas, claro. Porque los hijos del Plan Cóndor de hace cuarenta años son ahora los del Plan Buitre, que quieren venir por la cabeza de todos nosotros. Quieren desaparecernos. Quieren acabar con los procesos progresistas, los procesos de cambio, con estos procesos populares que hay en nuestra América latina. Nosotros en Venezuela tenemos ya dieciséis años derrotando a estos golpes de Estado, estos contragolpes, derrotando las guerras económicas, las guerras psicológicas. ¿Y qué pasó en todo este tiempo? De 19 elecciones les hemos ganado a la derecha 18 y este año les vamos a ganar la elección (legislativa de diciembre) número 19. A ellos, a los golpistas, eso no les importa y siguen en lo mismo.
–Hace un mes, senadores golpistas brasileños fueron a saludar a sus correligionarios en Caracas.
–Bueno, eso que pasó fue para saludar a la derecha envalentonada de Venezuela que cree que puede gobernar. Ellos de verdad creen que pueden gobernar a todos nuestros países porque lo hicieron en el pasado. Ellos nos pusieron sus gobiernos durante cien años en nuestro continente y siguen teniendo la misma mentalidad autoritaria, intervencionista, esa mentalidad pro imperialista. Pero bueno aquí estamos nosotros para seguir derrotándolos, y los vamos a seguir derrotando.
–¿Observa inestabilidad en Brasil?
–Vemos una gran fuerza popular en Brasil que si es retada, si es desafiada reaccionará. Nosotros decimos que si tocan a Dilma, si tocan a Lula, el pueblo los va a defender y van a triunfar.
Cuba
El automóvil oficial aguarda al presidente en la Explanada de los Ministerios, la ancha avenida del centro brasiliense, y Maduro comienza a recorrer la alfombra roja ladeada de los Dragones de la Independencia presuntamente sofocados bajo sus aparatosos sombreros metálicos dorados.
–Permítame algunas preguntas más, por ejemplo su opinión sobre el deshielo entre Cuba y Estados Unidos.
–Muy bien, excelente. Un gran logro, una gran victoria de la Cuba revolucionaria de Fidel. De pie, al final del camino tuvo que reconocerse el fracaso histórico el imperialismo.
–¿Esto contribuye a la estabilidad en Venezuela?
–La estabilidad en Venezuela la tenemos que sustentar sobre la base de nuestras propias fuerzas porque el imperio nos quiere destruir. Bueno ya está bien …
–Presidente, aguarde, ¿qué le dijo a Obama en la Cumbre de las Américas?
–(Yéndose.) Pues que él (Obama) debería ser realista frente a Venezuela, nosotros somos una realidad, no nos van a borrar, somos una realidad, un proyecto de inclusión que está muy vivo.