Cuba celebra 20 años de nexos con San Cristóbal y Nieves

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Cuando Kenneth Douglas se graduó en el 2007 de Cultura Física regresó a su natal San Cristóbal y Nieves, pero con el sueño de volver algún día a Cuba como embajador de su país. Y este 2015, año en el que ambas naciones cumplen dos décadas de relaciones, el sueño se le cumplió.

En entrevista concedida a la AIN, el instructor de deportes devenido diplomático recordó que, a pesar de la existencia de vínculos entre los países desde 1995, hasta el 2014 no se habían hecho gestiones para inaugurar una embajada en La Habana.

El Gobierno cubano nos ofrecía becas universitarias y nos enviaba personal médico, explicó, pero faltaba tener una embajada o sitio oficial. Esa carencia la sentí cuando estudié aquí. Por eso, al regresar a mi tierra le dije al entonces primer ministro que si algún día se abría una sede diplomática, yo quería ser el embajador.

Final­mente, el año pasado eso se concretó y me sentí muy honrado cuando supe que mi nombre lo habían tenido en cuenta. Fue muy intenso para mí el trabajo de organización de la embajada, pero ya en enero del 2015 pudimos iniciar nuestras funciones, relató el señor Douglas.

Una de las cosas que me hizo pensar en la necesidad de abrir una sede era que los estudiantes, como yo lo experimenté antes, no tenían ni tienen un vuelo directo a casa, lo cual alarga y encarece los viajes. Y esto aún sigue ocurriendo, subrayó.

Hace po­cos días estuve en conversaciones con el ministro cubano de Trans­porte, exploratorias de la posibilidad de iniciar un vuelo directo entre mi capital, Basseterre, y La Habana. Ade­más pien­so que trayectos similares deben existir para enlazar otras ciudades caribeñas, apuntó el diplomático.

Creo que en los próximos años mejorar la interconexión territorial entre nuestros países será clave, opinó, ya sea por las vías aérea o marítima. En ese sentido se ha dado un paso de avance con la creación de la Zona Especial de Desarrollo Mariel, dijo.

Respecto a las inversiones desarrolladas durante los últimos años por el Gobierno de la mayor de las Antillas, el embajador Douglas comentó que su país tuvo una evolución económica similar. Primero fue exportador de azúcar, luego se concentró en el fo­mento del turismo y actualmente tran­sita hacia la inversión extranjera como fuente de financiamiento.

Cuba puede hacer un buen aprovechamiento del financiamiento ex­­te­rior. Mi país se enfocó en emplearlo para invertir en la fabricación de componentes electrónicos y hoy somos los primeros exportadores de ese ru­bro en el Caribe, acotó.

Con la estrategia adecuada, ser una tierra pequeña y con poca población no tiene que frenar el desarrollo, puntualizó. En este sentido, Cuba podría ser un destino turístico que des­place a otros en la región de las Antillas, afirmó, porque tiene ecosistemas preservados y mucha tranquilidad ciudadana, la gente es amable y no hay violencia callejera que afecta a otras naciones caribeñas.

El embajador del Estado de soberanía más reciente en el área de las Américas —19 de septiembre de 1983— hizo algunas proyecciones acerca de cuáles podrían ser los puntos más sólidos en la cooperación de su nación con la Isla y con el Caribe en general. Sería bueno que no solo se sigan formando jóvenes de mi país como médicos aquí, sino que más profesionales cubanos de la salud vayan a nuestras tierras y sirvan de conferencistas para que compartan con nosotros las experiencias obtenidas en sus misiones alrededor del mundo, resaltó el entrevistado.

Salud se mezcla con un tema que me toca de cerca: el deporte. Ustedes tienen especialidades que sirven de apoyo a la actividad deportiva como la Fisioterapia, la Rehabilitación Fí­si­ca o la Biomecánica, conocimientos que nos serían muy valiosos en San Cristóbal y Nieves, des­ta­có.

Nuestros entrenadores deben com­­partir con co­legas antillanos, latinos: ¿por qué invitar siempre a un coach europeo que viene a imponernos solo el fútbol y el rugby, cuando podemos diversificarnos hacia el atletismo o el béisbol con la ayuda cubana o de otros gobiernos de la región?, preguntó.

Un tema de cooperación en el que estamos progresando es el de gestión de riesgos y el enfrentamiento al cam­­bio climático, puntualizó. Dou­glas re­cordó que en breve comenzará una nueva temporada ciclónica y hay que aumentar la protección ante un huracán u otras tormentas tropicales, no solo para evitar pérdidas humanas, sino a fin de preservar las costas y playas, que son la base del turismo, una actividad económica esencial para nuestra área.

San Cristóbal y Nieves y Cuba iniciaron sus relaciones bilaterales el 10 de mayo de 1995, y con la apertura en el 2014 de la embajada de esa nación, se completaron las representaciones diplomáticas en La Habana de los 14 países integrantes de la Co­munidad de Estados del Caribe (Caricom).

Agencia Cubana de Noticias

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