Cuba: comienza Festival del Habano con destaque de arte
El inicio hoy en esta capital del XVII Festival del Habano, además de significar todo un suceso comercial, también destaca desde el punto de vista artístico.
La presencia de más de mil visitantes de unos 80 países está motivada además en un marcado interés en elementos distintivos de los puros cubanos, considerados los mejores tipo Premium del mundo, como son las ilustraciones que les acompañan.
Los habanos son arte por muchos motivos, entre estos su ropaje; las habilitaciones de los cajones, sus anillas, aquello que mueve incluso a muchos no fumadores a guardar recuerdos en una de esas cajas vacías.
En tan lejana fecha como 1822 el arte litográfico acompañó al tabaco cubano en un engarce que seguiría hasta el presente.
El francés Santiago Lessieur inauguró en La Habana un pequeño taller que daría origen a esas decoraciones, una especie de sastre para los puros de la Isla.
Sin embargo, el desarrollo verdadero de la litografía tabacalera apareció en 1840 con dos talleres europeos simultáneos, equipados de la mejor manera posible.
Quedaron para la historia como las imprentas La de los españoles y La de los franceses, comentó oportunamente la investigadora cubana Zoila Lapique.
Las habilitaciones constituyen el conjunto de etiquetas de distintas formas, tamaños y usos para decorar los envases de tabaco, y su gran impacto de color provendría de los años 80 del siglo XIX.
De hecho, los estilos de presentación de los habanos consideran seis formas fundamentales: con anilla, sin anilla, envuelto en cedro, tubo de aluminio, envuelto en papel Tisú y envuelto en Celofán.
A ello se suman distintos tipos de envases como caja habilitada, Semi boite nature o SBN, Caja de corredera o SLB, Cabinet boite nature, tipo 8-9-8, mazos, envases pequeños y especialidades.
Y todo ese engalanado se sintetiza, en algunos pasos de suma relevancia como la Cubierta, o la imagen que aparece sobre la parte superior de la caja, o el Tapaclavo, que como su nombre lo indica sobre el clavo de tapa.
Completan la lista el muy conocido Filete, franja decorativa que sella las uniones, el Costero, La Papeleta (sello rectangular), La Vista y el Bofetón, el primero celebra la marca y va en el interior, el segundo es una fina hoja de papel para proteger el tabaco.
Entonces sobresale la anilla, expresión decorativa por antonomasia, identificativa de la vitola (anilla) de ahí que este tipo de coleccionismo se conozca como Vitolfilia.
