Argentina: la presidenta analizó junto a familiares de AMIA cómo profundizar la causa
Un día después de haber anunciado la disolución de la ex SIDE y la creación de una Agencia Federal de Inteligencia, en un contexto político marcado por la investigación de la muerte del fiscal Alberto Nisman, la presidenta Cristina Fernández recibió ayer en Olivos a integrantes de Memoria Activa y a miembros de la Asociación 18J, Familiares, Sobrevivientes y Amigos de las Víctimas del Atentado a la AMIA.
Las reuniones, realizadas por separado, coincidieron con dos cuestiones puntuales: ayer se conmemoró el Día del Holocausto y, además, se cumplió el segundo aniversario de la firma del Memorándum de Entendimiento con Irán, aquel intento de mediación política que votó el Congreso ante la falta de respuestas efectivas en el Poder Judicial, durante casi 20 años, para dar con los autores intelectuales y materiales del ataque a la AMIA. Se trata de la iniciativa que sigue frenada en la Sala I de la Cámara Federal, luego de que la AMIA y la DAIA pidieran su inconstitucionalidad.
Pasadas las 16, la presidenta recibió a un grupo de trece integrantes de la Asociación 18J, Familiares, Sobrevivientes y Amigos de las Víctimas del Atentado a la AMIA, que encabeza Sergio Burstein. Se sentaron alrededor de una enorme mesa en uno de los salones de la Residencia de Olivos. La mandataria estuvo acompañada por el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich; el ministro de Justicia, Julio Alak; y el secretario general de la Presidencia, Aníbal Fernández. En agradecimiento, los representantes de la Asociación 18J le obsequiaron a Cristina un cuadro y, después, juntos recordaron la Shoá durante algunos minutos, como suelen hacerlo todos los años cuando los convoca el Poder Ejecutivo para el aniversario. En el encuentro, que duró más de una hora, los miembros de la Asociación le plantearon a la mandataria la necesidad de que se llegue a la verdad en la investigación por la muerte de Nisman, para no complicar aún más la causa AMIA. Además, adelantaron que hoy le pedirán a la Procuradora General Alejandra Gils Carbó que los nuevos fiscales de la causa pertenezcan al equipo de Nisman, aunque evitaron entrar en detalles sobre el tema. Sí conversaron sobre el proyecto que el gobierno enviará al Parlamento para crear una nueva Agencia Federal de Inteligencia.
«Pedimos que quienes estén a cargo de la fiscalía sean uno, dos o tres fiscales encargados de la causa madre. Nos dio esperanza el compromiso que tiene gobierno nacional de agotar todas las instancias posibles para llegar a la justicia», definió Burstein al término de la reunión celebrada en Olivos.
Por otro lado, en relación al anuncio que se espera de Gils Carbó sobre cómo reemplazará a Nisman, Burstein le comentó a la presidenta que no harán público, por el momento, lo que piensan proponerle a la procuradora en la reunión de mañana, a lo que ella contestó que le parecía «bien y correcto».
Consultado sobre qué sintió cuando se enteró de la muerte del fiscal encargado de investigar el atentado a la AMIA, Burstein sostuvo: «Me destruyó, no lo podía creer. Siempre fui optimista con el futuro de la causa, pero con la muerte de Alberto perdí un poco esa sensación.» Sobre la decisión del gobierno de disolver la ex SIDE, consideró que fue «un acto de valentía tremendo» y se mostró optimista sobre la nueva Agencia.
En diálogo con Tiempo, otro de los participantes, Gerardo Beer, definió al encuentro como «afable y cariñoso, como siempre». «Le dijimos –agregó– que lamentábamos mucho la muerte de Nisman porque fueron muchos años, más de diez, de coincidencias y de disidencias pero de trabajo conjunto. Y nadie mejor que nosotros sabe cómo duele la muerte.» Beer contó que volvieron a renovar el pedido para que el Estado se comprometa hasta las últimas consecuencias con la búsqueda de justicia. «Somos la única megacausa por terrorismo internacional que no tiene ni un preso», subrayó. Sin embargo, insistió en remarcar que el encuentro fue «cálido» y subrayó: «Nosotros no nos vamos a olvidar nunca que los Kirchner llevaron la causa AMIA a los foros internacionales y que mencionaron a Irán en la ONU cada vez que fue posible, cuando eso no estaba de moda».
Pasadas las 20, Cristina recibió a miembros de Memoria Activa, la asociación civil creada con el fin de esclarecer las responsabilidades de los atentados a la Embajada de Israel y el de la AMIA. Esta vez, la acompañaba sólo Aníbal Fernández. Juntos dialogaron con Adriana Reisfeld, Mónica Klajnberg, Rodrigo Borda y Paula Litvachky.
Memoria Activa mantuvo una postura crítica respeto a la forma en la que Nisman llevaba la investigación. Y, tras conocerse la denuncia en contra de la presidenta y funcionarios del gobierno a mediados de enero, los familiares nucleados en esta entidad criticaron al fiscal y se preguntaron cómo era posible que desviara la causa de esa forma. «No aportó nada en los últimos años y escribió 300 fojas para este tema», destacaron.
Los gobernadores van a La Rosada
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner retomará mañana la agenda política en la Casa Rosada al encabezar un acto en el Salón de las Mujeres del Bicentenario y se mostrará rodeada por gobernadores de distintas provincias con quienes firmará una nueva prórroga de sus deudas con el Estado Nacional.
Ayer a última hora, los organizadores del acto cursaban las invitaciones para los mandatarios provinciales.
La foto mostrará a la presidenta de regreso en la Casa Rosada, tras haber pasado un mes recuperándose en Olivos, rodeada por los gobernadores, en un contexto político marcado por la investigación de la muerte del fiscal Alberto Nisman.
Más allá de que desde algunos sectores del peronismo se difundió en las últimas horas que los mandatarios provinciales están en una posición «casi rupturista» con el gobierno nacional, la presencia de la mayoría de ellos y la expectativa por los anuncios señala que las tensiones no son mayores a la que ha habido a lo largo de esta última década.
«Una injusticia total»
El gobernador Daniel Scioli, consideró «una injusticia total» el intento de involucrar a la presidenta «apañando el atentado de la AMIA», y recordó que el gobierno «ha hecho de los Derechos Humanos una política de Estado reconocida internacionalmente».
Los dichos de Scioli se produjeron un día después de que Cristina anunciara un proyecto de ley para disolver la Secretaría de Inteligencia y crear una Agencia Federal de Inteligencia.»De ninguna manera –dijo el gobernador– se puede aceptar que se la pretenda asociar (a la presidenta) con pactos con terroristas que cometieron crímenes de lesa humanidad, cuando ha hecho de los Derechos Humanos una política de Estado reconocida internacionalmente», aseguró durante la inauguración de obras en Plomer, localidad de General Las Heras.
Haaretz y las «fuerzas oscuras»
.El diario israelí Haaretz, el mismo donde suele colaborar Damián Pachter, publicó ayer una columna de opinión firmada por el coordinador de la mesa de América Latina en el Foro de Organizaciones de Paz y director del Centro para el Avance de Iniciativas por la Paz, Meir Margalit, en la que atribuye la muerte de Nisman a una venganza de las «fuerzas oscuras» contra el kirchnerismo por impulsar juicios por delitos de lesa humanidad.
“Las fuerzas oscuras del pasado regresan, deseosas de cosechar venganza sobre la familia Kirchner», señaló Margalit, quien en una nota anterior ya había afirmado que la muerte del fiscal de la causa AMIA «apestaba a una conspiración derechista oportuna, en connivencia con los ex policías y oficiales del Ejército, para derrocar al gobierno y destruir la democracia en Argentina, aún débil después de 30 años». Y sostuvo que «la comunidad (judía) no se da cuenta de que la extrema derecha se prende en la protesta legítima y construye los cimientos de la revolución sobre la base de su crítica».