En aniversario de la Independencia de Bolivia, Morales reivindicó logros y pidió corregir errores

 

“Vamos bien, superando dificultades, corrigiendo errores, que son las mejores lecciones para seguir aprendiendo”,  enfatizó ayer el presidente Evo Morales en su mensaje por el aniversario patrio, luego de hacer un recuento de los principales logros económicos, sociales y políticos de sus siete años de Gobierno.

 

 

 

 

 

En su mensaje de poco más de una hora, durante la sesión de honor de la Asamblea Legislativa que por primera vez que realizó en Cochabamba, el mandatario expuso una serie de cifras e indicadores económicos. Incluyó ataques a los Gobiernos pasados, a Estados Unidos y líderes opositores, además de una breve referencia al Censo, a la lucha contra el narcotráfico y la política internacional, en especial al diferendo marítimo contra Chile presentado este año ante el Tribunal de La Haya.

 

 

 

 

 

“Quiero que sepan: Evo no está preocupado por las próximas elecciones, (más bien) estamos preocupados, junto al Vicepresidente y el gabinete de ministros, por las próximas generaciones” de bolivianos, señaló.

 

 

 

 

 

Previamente, el vicepresidente Álvaro García Linera se refirió al Censo y dijo que el mestizaje no es una identidad.

 

 

 

 

 

Para algunos líderes opositores, el mensaje de Morales tuvo en esta oportunidad una clara proyección electoral, “más conciliador e incluyente”.  Según algunos analistas económicos, nuevamente el mensaje se quedó en datos macroeconómicos.

 

 

 

 

 

Por «primera vez Bolivia es una referencia internacional, no por Evo Morales, no por el secuestro del avión (impedido de volar por algunos países europeos en julio), no porque un indígena gana las elecciones, sino por nuestras políticas y por nuestros programas», señaló el mandatario.

 

 

 

 

 

Según Morales Bolivia salió del anonimato en el mundo gracias a las políticas que impulsa su Gobierno, porque su economía sigue creciendo y la pobreza se reduce, aunque reconoció que no al ritmo que quisiera.

 

 

 

 

 

Morales emitió su mensaje anual desde Cochabamba y ante una asistencia de aproximadamente unas 400 personas. El mismo fue retransmitido de modo obligatorio por televisoras y radios privadas y públicas, de acuerdo al código de telecomunicaciones de todo el país.

 

 

 

 

 

Paralelamente al acto en Cochabamba en el resto del país se desarrollaron desfiles y la Iglesia Católica celebró el tradicional Tedeum en las catedrales de las capitales con la presencia de las autoridades regionales.

 

 

 

 

 

El mandatario para enfatizar que Bolivia «va bien» y le espera un futuro prometedor evocó la frase pronunciada hace 28 años por el entonces presidente Víctor Paz, de que «Bolivia se nos muere» para justificar el viraje hacia el modelo neoliberal.

 

 

 

 

 

Enfatizó que «Bolivia no se muere y es una referencia internacional ahora», con su política social y de nacionalizaciones desde 2006.
Además del recuento de los logros de su Gobierno en diferentes ámbitos, sostuvo que con el enfriamiento de relaciones luego de la expulsión recíproca de embajadores en 2008 «políticamente nos hemos liberado de los Estados Unidos».

 

 

 

 

 

«Ahora tenemos patria, ahora la patria es nuestra, ahora es la patria de los bolivianos, hemos recuperado la patria», enfatizó
Morales también expulsó a la agencia antidroga estadounidense DEA en 2008 y en 2013 a la agencia de cooperación internacional de Estados Unidos, Usaid, aunque la salida de ésta sigue en proceso. Amenazó en varias oportunidades con echar además a su Embajada.

 

 

 

 

 

También aludió a los incidentes del pasado 2 de julio, cuando afrontó problemas para transitar por Europa a su retorno de Moscú a La Paz, debido a la sospecha de varios países de que a bordo de su aeronave iba el exanalista Edward Snowden.

 

 

 

 

 

Morales dijo que no sabe si los Gobiernos europeos que pusieron trabas a su vuelo y Estados Unidos se equivocaron o tenían la intención de amedrentarlo o si «intentaron acabar» con su vida, pero aseguró que defendió la dignidad del país y «de todos los pueblos del mundo».

 

 

 

 

 

Asimismo, el presidente celebró que la política económica nacional esté diseñada al margen del FMI, que hasta 2006 impuso a los sucesivos Gobiernos privatizaciones.

 

 

 

 

 

Sostuvo que el país está mejor económicamente que cuando estuvo «sometido» al FMI.

 

 

 

 

 

Dijo que por iniciativa suya, la organización de las Naciones Unidas declaró el acceso al agua como un derecho humano básico en el mundo y fijó un día del año para recordar a la Madre Tierra.

 

 

 

 

 

Según su informe, Bolivia ocupa tercer lugar en Latinoamérica con una tasa de crecimiento del 6,5 por ciento hasta julio de este año y hasta junio las reservas internacionales llegaron al 52 por ciento del PIB global estimado en 27.000 millones de dólares lo que ubica al país en primer lugar en el continente en la relación entre reservas y PIB.