Ecuador supera los 2 300 homicidios en primer trimestre de 2025, un 65 % más que en 2024
Ecuador alcanzó los 2 361 homicidios en el primer trimestre de 2025 al contabilizar 831 asesinatos en marzo, según datos publicados este lunes 21 de abril de 2025 por el Ministerio del Interior, cifra que se sumó a los 1.530 que ya se habían registrado en enero y febrero y que representan el inicio de año más violento en la historia del país.
🗣️ Mediante un comunicado, la comisión de la Asamblea encargada de las reformas constitucionales señaló que el tratamiento de las bases extranjeras será continuado por el siguiente periodo. 📲 https://t.co/oVcFKtZh6H pic.twitter.com/SjJwfJwAob
— Ecuavisa Noticias (@EcuavisaInforma) April 21, 2025
Los datos trimestrales de 2025, que promedian un asesinato por hora, superan en un 65 % los 1 428 homicidios que se reportaron en el mismo periodo de 2024 y en 39 % los 1 698 registrados entre enero y marzo de 2023, año en el que el país se ubicó como el más violento de Latinoamérica.
El nivel de violencia que soportaron los ecuatorianos en estos tres meses solo es comparable con lo que sucedió entre octubre y diciembre de 2023, cuando se reportaron 2.355 homicidios, lo que llevó también al presidente, Daniel Noboa, posesionado a finales de noviembre de ese año, a declarar al país bajo «conflicto armado interno», aún vigente, para enfrentar a las bandas de crimen organizado, a quienes pasó a denominar como «terroristas».
⭕️ #ATENCIÓN | La noche de este 17 de abril de 2025, 11 personas fueron as3sin4d4s, tras un viol3nt0 ataque arm4d0 dentro de la gallera de la vía Puerto Limón, El Carmen, en #Manabí. Autoridades informan que nueve personas están h3rid4s de gravedad. pic.twitter.com/zr9PCNA04u
— Radio Pichincha (@radio_pichincha) April 18, 2025
La provincia más golpeada ha sido la costera Guayas, que en estos tres meses registró 1.208 asesinatos, 741 de ellos solo en su capital, Guayaquil. Le siguen muy de lejos las también costeras provincias de Los Ríos, con 291 asesinatos, y Manabí, con 272 crímenes.
Precisamente, en Guayaquil ocurrió el día 6 de marzo el caso más violento que se registró en ese mes, cuando supuestos miembros de la banda criminal Los Tiguerones perpetraron un ataque armado en el barrio Socio Vivienda, del distrito Nueva Prosperina, y asesinaron a 22 personas.
La Policía señaló en ese entonces que la masacre se había producido por una disputa de territorio entre dos facciones de esa organización delictiva, dedicada principalmente al narcotráfico y a la extorsión, y días después detuvo a una treintena de personas quienes presuntamente estaban vinculadas al ataque.
Y aunque las cifras de abril aún no están disponibles, un reciente ataque armado registrado la noche del jueves en un lugar en el que se realizaban peleas de gallos, en Manabí, que dejó a 12 personas asesinadas, evidencia que el nivel de violencia permanece en el país.
Respuesta de las autoridades a la violencia
Las autoridades, por su parte, siguen asegurando que el alza de los crímenes obedece a la «época electoral», por las elecciones presidenciales del pasado 13 de abril, en las que Noboa fue reelegido para el periodo 2025-2029 frente a la correísta Luisa González, y al trabajo que aseguran estar realizando para «debilitar las estructuras económicas» de las bandas delictivas.
«Debilitando las estructuras económicas, los ingresos de estas mafias se disminuyen y es cuando vienen aumentando estas muertes, porque vamos a achicando los lugares donde ellos pueden operar», dijo este lunes el ministro del Interior, John Reimberg, en una entrevista.
El ministro también aseguró que la próxima semana empezarían las capacitaciones y asesorías que el Gobierno anunció que daría a las Fuerzas Armadas y a la Policía Erik Prince, fundador de la firma de seguridad privada Blackwater (ahora llamada Academi), quien participó en algunos operativos de seguridad a inicios de este mes.
Y anunció que la próxima semana también firmará dos acuerdos con «dos agencias muy importantes de Estados Unidos» para el control del narcotráfico en puertos y aeropuertos y para implementar un nuevo sistema en las fronteras.