Brasil | Tainá de Paula, Concejala y Secretaria de Medio Ambiente de Río de Janeiro: “las mujeres ganamos menos, trabajamos más y acumulamos múltiples responsabilidades”

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Tainá de Paula, Concejala y Secretaria de Medio Ambiente de Río de Janeiro: “las mujeres ganamos menos, trabajamos más y acumulamos múltiples responsabilidades”

Tainá de Paula es actualmente la concejala más votada por el PT en Río de Janeiro, en la misma casa legislativa de Marielle Franco, y secretaria de Medio Ambiente y Clima de la ciudad. Además es arquitecta y gestora pública, Especialista en Patrimonio Cultural y Máster en Urbanismo. En su trayectoria como activista de luchas urbanas trabajó en diversos proyectos de urbanización y vivienda popular, brindando asistencia técnica a movimientos como la Unión de Vivienda Popular y el Movimiento de los Trabajadores Sin Techo (MST)

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¿Cuál es la situación de las mujeres y diversidades trabajadoras en Brasil?

Sabemos que las mujeres aún ganan, en promedio, entre un 20% y un 30% menos que los hombres en Brasil, incluso ocupando los mismos cargos. Además, otro desafío es la dificultad que enfrentan para acceder a puestos de liderazgo. La mayoría de las veces, somos subestimadas o tenemos que demostrar nuestra capacidad constantemente, enfrentando acoso y otros tipos de violencia en nuestra trayectoria profesional.

Asimismo, para las mujeres negras, el camino es aún más difícil. Según los datos de la Relación Anual de Información Social (RAIS) del segundo trimestre de 2024, del Ministerio de Trabajo y Empleo, las mujeres negras son las más perjudicadas en el mercado laboral, ya que tienen el doble de desempleo que los hombres no negros.

De acuerdo con la misma investigación, en el segundo trimestre de 2024 había 7,5 millones de personas desempleadas y la tasa de desempleo promedio era del 6,9%. Para los hombres no negros, la tasa era del 4,6%, mientras que para las mujeres negras ascendía al 10,1%.

Son ellas quienes se concentran en los empleos en la base de la pirámide, especialmente en el trabajo doméstico, la limpieza y la alimentación. Además, ocupan los puestos con los salarios más bajos. Esta es la realidad que necesitamos enfrentar.

¿Cuáles son las principales iniciativas y qué debates están atravesando en términos organizativos?

La reducción de la desigualdad salarial es lo más urgente, además de la construcción de un entorno laboral libre de acoso moral o sexual, con una cultura de trabajo que reconozca que las mujeres no son menos aptas para ocupar cargos de liderazgo que los hombres, especialmente por el hecho de ser madres.

Además de la Ley de Igualdad Salarial, sancionada por el presidente Lula en 2023, el impulso a la creación de programas de capacitación y formación de liderazgo femenino, como Guardiãs das Matas, son iniciativas clave para que las mujeres puedan construir una trayectoria profesional digna.

Los programas de mentoría y apoyo a la parentalidad son algunas de las estrategias que pueden contribuir a reducir las desigualdades y brindar más oportunidades a las mujeres en su desarrollo profesional.

La flexibilización de las jornadas laborales y la garantía de la licencia de paternidad también son medidas fundamentales, ya que, cuando deciden ser madres, muchas mujeres son despedidas al regresar de la licencia de maternidad, mientras que los hombres ni siquiera se ausentan del trabajo cuando nacen sus hijos.

¿Cuáles son los principales desafíos en el contexto geopolítico actual para las mujeres y diversidades organizades?

Tuvimos acceso al trabajo y a la educación formal mucho después que los hombres. Aún hoy, somos nosotras, las mujeres, quienes más nos dedicamos al trabajo doméstico, una carga de tareas que se suma a nuestro trabajo fuera del hogar, lo que nos lleva a enfrentar dobles o incluso triples jornadas diarias. Hace solo 93 años que el derecho al voto femenino fue conquistado en este país. Ganamos menos, trabajamos más y acumulamos múltiples responsabilidades. Son muchos los desafíos.

Es necesario replantear las estructuras que imponen y refuerzan las diferencias de género a través de la educación, la cultura e incluso el deporte. Por ejemplo, es fundamental incentivar que niños y niñas jueguen a los mismos juegos, incluidos aquellos que implican el desarrollo de la fuerza física. Las guarderías son espacios clave para reducir esta desigualdad en un nivel micro, pero por sí solas no resuelven todas las demás cargas que las mujeres deben asumir, como el trabajo de cuidados invisibles, el mantenimiento del hogar y el cuidado de la familia.

Tenemos la tarea de promover un cambio cultural en la sociedad, especialmente en la mentalidad de los hombres, quienes deben compartir de manera equitativa todas estas responsabilidades. Además, deben comprender que ya no es aceptable contratar mujeres con salarios más bajos. En este sentido, como mencioné anteriormente, en 2023 el presidente Lula sancionó la Ley 14.611, que establece la igualdad salarial y de criterios de remuneración entre mujeres y hombres. Así es cómo podemos impulsar a la sociedad a reflexionar y transformar estos desafíos, que también están presentes en muchos otros países.


Tainá de Paula, Vereadora e Secretária de Meio Ambiente do Rio de Janeiro: “as mulheres ganham menos, trabalham mais e acumulam múltiplas

Tainá de Paula é atualmente a vereadora mais votada pelo PT no Rio de Janeiro, na mesma casa legislativa de Marielle Franco, e secretária de Meio Ambiente e Clima da cidade. Además, es arquitecta y gestora pública, especialista en Patrimonio Cultural y maestro en Urbanismo. En su trayectoria como ativista das lutas urbanas, trabaja en diversos proyectos de urbanización y habitación popular, prestando asistencia técnica a movimientos como la União de Moradia Popular y el Movimento dos Trabalhadores Sem Teto (MTST).

Qual é a situação das mulheres e diversidades trabalhadoras no Brasil?

Sabemos que as mulheres ainda ganham, em média, 20% a 30% a menos que os homens no Brasil, mesmo ocupando funções idênticas. Além disso, um outro desafio é a dificuldade das mulheres em alcançar cargos de liderança. Na grande maioria das vezes, somos subestimadas ou precisamos provar a nossa capacidade constantemente, precisando lidar com assédios e outros tipos de violência em nossa trajetória profissional.

Além disso, para as mulheres negras, há ainda uma estrada mais longa. De acordo com os dados da Relação Anual de Informações Sociais (RAIS) do 2º trimestre de 2024, do Ministério do Trabalho e Emprego, as mulheres negras são as mais prejudicadas no mercado de trabalho, pois possuem o dobro do desemprego dos homens não negros.

Conforme a mesma pesquisa, no 2º trimestre de 2024, havia 7,5 milhões de desocupados e a taxa de desemprego média é de 6,9%. Para os homens não negros, é de 4,6% e 10,1% para as mulheres negras.

São elas que estão concentradas nas ocupações na base da pirâmide, sobretudo, em serviços domésticos, de limpeza e de alimentação. Elas ainda ocupam as vagas que pagam menos de remuneração salarial. Essa é a realidade que precisamos enfrentar.

Quais são as principais iniciativas e que debates estão atravessando em termos organizativos?

A redução da desigualdade salarial é o que há de mais urgente, além da construção de um ambiente de trabalho sem assédio moral ou sexual, uma cultura trabalhista que enxergue que as mulheres não são menos aptas a cargos de lideranças que os homens, principalmente porque podem ser mães. E se, com tantas jornadas, somos tão boas e dedicadas, imagina se temos todo suporte necessário para nos desenvolvermos em nossas carreiras profissionais?

Além da Lei da Igualdade Salarial, sancionada pelo presidente Lula, em 2023, o incentivo à construção de programas de capacitação e formação de lideranças femininas como o Guardiãs das Matas, por exemplo, são iniciativas importantes para possibilitar que mulheres trilhem um caminho profissional digno. Programas de mentoria e apoio à parentalidade são algumas das iniciativas que podem contribuir para reduzir as desigualdades e proporcionar às mulheres mais oportunidades de trilhar um caminho profissional. A flexibilização de jornadas de trabalho e a garantia de licença-paternidade também são iniciativas fundamentais, uma vez que, quando decidem ser mães, as mulheres acabam sendo demitidas quando voltam da licença-maternidade enquanto os homens sequer se ausentam do trabalho quando nascem seus filhos.

Quais são os principais desafios no contexto geopolítico atual para as mulheres e diversidades organizadas?

Nós tivemos acesso ao trabalho e à educação formal muito depois dos homens. Ainda somos nós, mulheres, as que mais nos dedicamos ao trabalho doméstico, uma carga de atividades que se soma ao trabalho que temos fora de casa, caracterizando dupla ou até tripla jornada diariamente. Tem apenas 93 anos que o direito ao voto feminino foi conquistado nesse país. Ganhamos menos, trabalhamos mais, acumulamos muitas jornadas… São muitas questões.

É preciso repensar as estruturas que impõem e solidificam as diferenças de gênero a partir da educação, da cultura e até mesmo dos esportes, ou seja, incentivando meninos e meninas a brincarem das mesmas brincadeiras, inclusive aquelas em que há construção de força física. As creches, por exemplo, são importantes espaços para diminuir essa desigualdade num plano micro, mas elas, sozinhas, não dão conta das outras jornadas que as mulheres precisam exercer, como o trabalho de cuidado invisível, os cuidados com a casa, a família.

Temos a tarefa de promover uma mudança cultural da sociedade, sobretudo no pensamento dos homens, que precisam dividir de forma igualitária todos esses cuidados e entender que não é mais tempo de empregar mulheres com salários mais baixos e, nesse sentido, em 2023, como já trouxe aqui antes, o presidente Lula fez a importante sanção da Lei 14.611, que dispõe sobre a igualdade salarial e de critérios remuneratórios entre mulheres e homens. É assim que se provoca a sociedade a refletir e mudar esses desafios, que estão também em vários outros países.

 

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