Un patriarca que cumplió 70 años – Por Adolfo Giménez, especial para Nodal
Los conceptos vertidos en esta sección no reflejan necesariamente la línea editorial de NODAL. Consideramos importante que se conozcan porque contribuyen a tener una visión integral de la región.
Por Adolfo Giménez, especial para Nodal*
En un hecho que no es muy habitual ni frecuente, la oposición política con sus diversas variantes decidió conformar una Concertación Nacional (1) con el objetivo de enfrentar en abril de 2023 al gobierno de Mario Abdo Benítez, del Partido Colorado, agrupación en el poder desde 1947, interrumpido solo durante cuatro años por el gobierno de Fernando Lugo (2008-2012), derrocado por un golpe de Estado parlamentario.
Esta unidad amplísima demuestra que el viejo partido gobernante perdió legitimidad y el apoyo de sectores del bloque dominante. Un desgaste que lleva décadas y que se aceleró con la pandemia y post pandemia.
Para el poder no es suficiente sostener un inmenso aparato partidario, aceitándolo con dinero y prebendas. Es inevitable a lo largo del tiempo el efecto de un modelo económico que concentra la riqueza, genera exclusión y pobreza, al igual que un régimen fiscal basado en el IVA que hace que la mayoría pague por la minoría, junto a una corrupción generalizada, una alta inflación incontrolable y disputas violentas entre fracciones del gubernamental Partido Colorado (2).
En marzo del 2021 miles de jóvenes salieron a las calles a protestar en forma espontánea en la capital y otras ciudades señalando un malestar que había explotado. El desempleo y la precarización afectan principalmente a los jóvenes. El 35 por ciento de los trabajadores y trabajadoras recibe menos del salario mínimo. El trabajo informal alcanzó este año una cifra record en toda la historia: 61 por ciento en las ciudades y 75 en área rural.
En consecuencia, crece la migración. A España la emigración aumentó 35 veces en relación a dos decádas atrás, compuesta por mujeres y jóvenes de acuerdo al informe del Instituto Nacional de Estadísticas (INE). Argentina sigue siendo cada año un refugio para otros miles.
De la nueva Concertación no puede afirmarse por su composición que sea una copia de las nuevas alternativas surgidas recién en Chile o Colombia, es algo diferente. Es un bloque en el que se mezclan liberales, conservadores, sectores empresariales, profesionales, neoliberales, progresistas, feministas.
Luego de la integración de la Concertación, ahora sus miembros tendrán que elaborar el programa que deberá cumplir en caso de llegar al gobierno. Surgirán fuertes disputas, como también algunas fracturas antes de las elecciones internas que deben realizarse en diciembre de este año para elegir el candidato o candidata presidencial de bloque (3).
El programa de gobierno y la dupla presidencial definirán la tendencia final, aunque las divergencias se mantendrán durante el periodo que durará cinco años y la gobernabilidad saltará al escenario como parte de un guión con un fantasma: Fernando Lugo había sido desplazado por la traición de sus aliados.
La articulación de esta Concertación deja vacío el campo de la histórica izquierda socialista, aquella que comenzó a fines del siglo XÏX con la llegada de inmigrantes italianos, españoles y argentinos, anarquistas fervorosos que fundaron los primeros sindicatos y lucharon en las huelgas obreras y después fundaron el primer partido socialista en 1913.
El legado de estos luchadores no está, desapareció. Sus banderas hoy tienen expresiones muy débiles, como parte de una crisis de las organizaciones socialistas en Paraguay, de sus diferentes variantes.
HEGEMONÍA HISTÓRICA
Cumplir 70 años en el poder no lo cumple cualquiera. De estos 70 años, 35 correspondieron a la dictadura de Alfredo Stroessner (1954-1989) que se consolidó con la Guerra Fría y el anticomunismo como política represiva activa.
El Partido Colorado siempre fue representante de la hegemonía oligárquica en Paraguay a partir de 1870 junto al Partido Liberal. De amplia clientela y rasgos populistas se encargó de administrar los conflictos sociales combinando la represión con la negociación, la cooptación y los planes sociales, además de cumplir con los ajustes del Fondo Monetario Internacional (FMI) y pagar la deuda externa con nuevas deudas.
Pero a lo largo de las décadas construyó su desgaste. La corrupción es imparable, las mafias avanzaron y es evidente el poder que hoy representan, aumentó la delincuencia y la inseguridad, el costo de vida, la explotación laboral, la falta de seguro social. Esta situación generó un rechazo hacia todo lo que sea política, todo lo que sea Estado, el Parlamento, los políticos. De manera que la tarea de la Concertación sería canalizar el descontento hacia un nuevo gobierno que genere alguna esperanza y que el cambio pueda sentirse en todo lo cotidiano
Que no se repitan los criminales desalojos de pueblos originarios y comunidades campesinas que son arrojadas a la intemperie, cuyas pobres viviendas son quemadas y arrasadas. Que las ollas populares no sean la única posibilidad de acceder a los alimentos en los asentamientos de los miles de Sinviviendas y de Sintrabajos, de las familias que siempre fueron ignoradas y marginadas.
Son muchas las tareas para construir las bases de un futuro mejor después de 70 años de patriarcado colorado. Como se sabe, una cosa es el programa político, otra cosa es cumplirlo.
*Periodista paraguayo.
(1) La Concertación Nacional es un amplio abanico de organizaciones que van de la derecha neoliberal a la centroizquierda representada por el Frente Guasu (FG), liderado por el expresidente Fernando Lugo (2008-2012) y la articulaciòn Ñemongeta. El principal partido es el Liberal Radical Auténtico (PLRA) que constituye el histórico Partido Liberal de Paraguay. Otras organizaciones integrantes son Patria Querida, Encuentro Nacional, Revolucionario Febrerista, Partido Hagamos, Causa Nacional, Movimiento Despertar, Republicanos Libres, disidencia del Partido Colorado, ente otros.
(2) La disputa interna por imponer su candidato se da entre el Movimiento Añetete liderado por el actual presidente Mario Abdo y el Movimiento Honor Colorado, del expresidente Horacio Cartes. El primero representa el caudillismo tradicional populista y el segundo a una conducción más centralizada, con un mensaje de manejo tecnocrático del espacio estatal.
(3) Los principales candidatos de la Concertación son Efraín Alegre del PLRA, Esperanza Martínez, del Frente Guasu y Ñemongeta, Soledad Nuñez, del Movimiento Despertar y Katya González del Partido Encuentro Nacional. La interna será el 18 de diciembre próximo.