Transportistas culminan segundo día de paro para exigir la regulación del precio del combustible
Por segundo día consecutivo los transportistas de la provincia de Panamá Oeste mantuvieron un paro de servicio que hoy incorporó el cierre de vías y causó la consiguiente congestión del tráfico vehicular.
Los conductores de esa demarcación, a quienes la víspera se sumaron los pares de los territorios de Chiriquí, Darién y la caribeña Colón, demandan al Gobierno que congele los altos precios del combustible y revise la tarifa de los pasajes, vigente hace 11 años.
También pidieron que el viceministro de Comercio Interior, Omar Montilla, acuda a la zona a negociar con ellos.
La protesta ocasionó el atasco de los vehículos y el disgusto de los usuarios, quienes expresaron su frustración en los medios de comunicación, constató Prensa Latina.
Se han cerrado varias calles en el sector oeste, incluyendo la vía Interamericana en el área de Loma Cová, precisaron los organizadores del paro, mientras otro grupo efectúa una caminata por la Carretera Interamericana hacia el sector de Arraiján cabecera.
La principal petición de los manifestantes es que el presidente de la República, Laurentino Cortizo, los reciba porque quieren negociar con él la regulación del precio del diésel y la gasolina.
Hace 15 días los conductores efectuaron un paro de labores, pero fue solo de 24 horas y afectó también la movilización en las provincias de Panamá y Panamá Oeste.
Ante esa situación, más compleja en los distritos de Arraiján y La Chorrera, aledaños a la capital del istmo, para el traslado a sus centros de trabajo o a consultas médicas, el Ejecutivo se vio obligado a usar autobuses de la Fuerza Pública y de la empresa MiBus para movilizar a miles de personas abarrotadas en las paradas.
Los transportistas insisten en que se congelen las altas cotizaciones del combustible, disparadas desde febrero último; y que se evalúela actual tarifa del pasaje- unos 30 centavos de dólar.
Mientras, la Autoridad de Tránsito y Transporte Terrestre (ATTT), indicó que han mantenido la mesa de diálogo abierta y que no se puede hablar en estos momentos de subir el pasaje.
Hace dos semanas, los integrantes de ese grupo adelantaron que retomarían la huelga de brazos caídos si no atienden sus reclamos, luego que sus representantes en una mesa de diálogo fueran desconocidos por el Ejecutivo.
Los protestantes hicieron responsable entonces a Carlos Ordoñez, titular de la Autoridad de Tránsito y Transporte Terrestre (ATTT), quien organizó las pláticas, por no escuchar sus demandas.
También señalaron su desacuerdo con el subsidio de ocho millones de dólares aprobado por el Gobierno el pasado 30 de marzo para la compra de combustibles, y alegaron que eso no resuelve el problema e implica una excesiva burocracia.
Panamá, país importador neto de combustibles, vive la mayor alza de la gasolina en los últimos ocho años, y con la perspectiva de que seguirán subiendo en los próximos meses. a juicio de expertos.