Comisionada de la ONU denunció la «presión sin precedentes» que enfrentan las y los migrantes latinoamericanos
Urge una respuesta que reparta las responsabilidades regionales para los desplazamientos de Centroamérica y México
La alta comisionada adjunta sobre protección de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) denunció este jueves la «presión sin precedentes» a la que se enfrentan las personas desplazadas en Centroamérica y México y exigió un reparto urgente de las «responsabilidades regionales».
Tras finalizar una misión de dos semanas en la región, Gillian Triggs, señaló que esta tensión se debe al aumento del número de personas que solicitan protección internacional en un momento en el que se limita el acceso al asilo y al territorio debido a “preocupantes restricciones fronterizas”.
«En México, Guatemala y El Salvador, he visto la tremenda tensión a la que está sometida la región debido a los crecientes flujos de refugiados y migrantes. Los gobiernos y la sociedad civil están haciendo esfuerzos extraordinarios para hacer frente a estos desafíos», dijo Triggs.
La alta comisionada adjunta destacó la necesidad de que los Estados no sólo proporcionen protección a los refugiados, sino de que también ofrezcan otras salidas a los migrantes a través de la educación, la movilidad laboral, la reunificación familiar y otros procesos de inmigración. «Las diferentes necesidades requieren de diferentes respuestas», destacó.
Al mismo tiempo, expresó su profunda preocupación por las recientes “prácticas fronterizas restrictivas en la región”, por las que las personas y las familias con necesidades urgentes de protección corren el riesgo de ser devueltas a los mismos peligros de los que huyeron en sus países de origen en Centroamérica, y sin posibilidad alguna de que se atiendan o evalúen sus necesidades.
ACNUR llamó recientemente al gobierno de Estados Unidos a finalizar las restricciones de asilo relacionadas con la orden de salud pública relativa a la COVID-19 y conocida como Título 42, bajo la cual se producen estas expulsiones, y a restablecer el derecho a la solicitud de asilo en Estados Unidos.
«Todos los países han acordado compartir la responsabilidad de proporcionar protección a quienes huyen del peligro y la persecución, en lugar de transferir ese deber», apuntó Triggs.
Seis países centroamericanos y México trabajan codo a codo con el sector privado y la sociedad civil, con el apoyo de los países donantes, bajo el Marco Regional de Protección y Soluciones (conocido como MIRPS) con el objetivo de compartir este cometido. El Marco pretende abordar las causas y consecuencias del desplazamiento forzado en la región y actualmente está liderado por Guatemala.
Viaje a Guatemala y El Salvador
En Guatemala, Triggs colaboró en el lanzamiento de un programa codirigido por ACNUR y la Secretaría del Gobierno guatemalteco sobre violencia sexual, explotación y tráfico de personas.
El objetivo del proyecto es prevenir este tipo de delitos en zonas remotas del país mediante el uso de unidades móviles que llevarán información sobre derechos y servicios a donde la gente más los necesita.
En El Salvador, la alta funcionaria se interesó por los innovadores enfoques comunitarios dirigidos por el gobierno para prevenir la violencia y empoderar a los jóvenes de las comunidades en riesgo.
«Crear las condiciones para que la gente se sienta segura y protegida en sus hogares es un paso esencial para abordar las causas fundamentales que impulsan a la gente a huir en esta región», afirmó.
También celebró el compromiso de la nación centroamericana de actualizar el perfil de la población desplazada con el fin de impedir los desplazamientos e informar de las respuestas a nivel comunitario.
México se enfrenta actualmente a una cifra récord de nuevas solicitudes de asilo que este año podría superar las 100.000.
A medida que aumenta el número de refugiados, desplazados internos y retornados con necesidades de protección, ACNUR continúa apoyando a los gobiernos para reforzar los sistemas de asilo y protección.
La Agencia de la ONU también colabora en la integración de las personas en sus países de asilo por medio de empleo, educación y ayuda psicosocial, con la participación de la sociedad civil. Por ejemplo, en México se han beneficiado de estas iniciativas de integración local más de 12.000 personas.
Desarticulan tercera caravana migrante en Chiapas
Elementos de la Guardia Nacional (GN) y del Instituto Nacional de Migración (INM) desarticularon la caravana de unos 300 haitianos y centroamericanos que la mañana de este jueves salió del municipio de Huixtla en su ruta al norte de país. En el despliegue los oficiales detuvieron a un número no precisado de migrantes.
Los migrantes descansaban bajo los árboles en el poblado San Felipe Tizapa, Escuintla, cuando fueron sorprendidos por los agentes. Pobladores de la zona contaron que los extranjeros lanzaron piedras y palos a los uniformados, que utilizaron sus escudos para protegerse.
Los hombres y mujeres huyeron entre terrenos de potreros y cultivos, perseguidos por los elementos de la GN y del INM que detuvieron a varios y los subieron a los vehículos de las corporaciones.
La caravana partió de Huixtla, donde pernoctaron. Minutos después de las 03:00 horas de este jueves se dirigieron a Escuintla; debido al intenso calor, hicieron una parada en San Felipe Tizapa, entre Villa Comaltitlán y Escuintla.
Cuando descansaban bajo las frondas de los árboles fueron sorprendidos por el operativo oficial. Cómo ocurrió en los pasados despliegues con las dos caravanas disueltas el martes y miércoles en Mapastepec, los migrantes arrojaron piedras y palos para tratar de abrirse paso.
La desarticulada caravana de este jueves es la tercera que las fuerzas federales de seguridad disuelven durante la semana. El itinerario de los migrantes, desde su arranque en Tapachula, no consiguió avanzar los cien kilómetros.
El contingente, de unos mil haitianos y centroamericanos agrupados en tres caravanas, argumentó que dejaba Tapachula para dirigirse al norte de México por la falta de solución a sus requerimientos de permanencia legal migratoria y de oportunidades laborales para sobrevivir.
Migrantes guatemaltecos deportados desde Estados Unidos ya no ingresarán por el puesto fronterizo El Ceibo, Petén
Por Julio Román Y Carlos Raúl Kestler
El Ministerio de Relaciones Exteriores (Minex), informó que como resultado de las coordinaciones sobre la atención a migrantes retornados con autoridades de México, se logró que los guatemaltecos que llegan deportados de Estados Unidos ya no sean enviados al puesto fronterizo El Ceibo, Petén.
Desde hace varias semanas, migrantes guatemaltecos y de otras nacionalidades estaban siendo deportados a El Ceibo, después de haber sido enviados a México desde el sur de EE. UU. a donde los indocumentados habían llegado.
Diariamente ingresaban unos 400 deportados a El Ceibo, un puesto fronterizo que está muy lejos de las áreas urbanas y que no contaba con la infraestructura necesaria para recibir a los migrantes, lo que generó una crisis en el área.
Según el Minex, luego de las coordinaciones correspondientes sobre la problemática registrada en El Ceibo, esa cartera ha notificado al Instituto Guatemalteco de Migración que se llegaron acuerdos con México, para que los guatemaltecos que sean deportados ya no serán enviados a El Ceibo, sino al Centro de Recepción de Retornados de Tecún Umán, San Marcos y la Fuerza Aérea Guatemalteca.
Las personas hondureñas, salvadoreñas o de otros países que sean retornadas de Estados Unidos, seguirán ingresando a Guatemala por El Ceibo, Petén, pero los buses en donde los transporta el Gobierno de México los trasladará hasta el puesto fronterizo de El Corinto, frontera con Honduras.
Señalan que en estos espacios se cuenta con las capacidades instaladas para brindar una atención digna a la población migrante retornada.
Estadística de deportados por El Ceibo
Según autoridades de migración, del 22 de agosto al 1 de septiembre de 2021, ingresaron 3 mil 040 migrantes por la frontera de El Ceibo, Petén, entre guatemaltecos, salvadoreños, hondureños, suramericanos, caribeños y africanos.
De ese total, 1 mil 314 eran hombres, 918 mujeres, 413 niños y 395 niñas.
Llega vuelo con migrantes
A las 11:05 de este jueves 2 de septiembre arribó a Guatemala un vuelo con 132 guatemaltecos retornados desde McAllen, Texas, Estados Unidos.
Los connacionales llegaron al Centro de Recepción de Retornados, ubicado en la Fuerza Aérea Guatemalteca en donde fueron recibidos por el canciller Pedro Brolo y Stuard Rodríguez, director general de Migración.
Este sería el primer vuelo que llega en el marco de las coordinaciones que realizó el Minex sobre la situación que se registraba en El Ceibo, Petén.
