Además de la Constituyente, Chile elige por primera vez gobernadores regionales

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Chilenos eligen por primera vez a gobernadores regionales

Durante el megaproceso eleccionario del próximo domingo, los chilenos elegirán, por primera vez, en las urnas a los gobernadores regionales de todo el país, un nuevo cargo que reemplaza a los intendentes, quienes, hasta ahora eran nombrados por el presidente de la República.

De esta manera, los chilenos suman ahora la responsabilidad de escoger a los 16 gobernadores regionales en una elección que, además, lleva la carga de haberse desdoblado en dos días para promover la votación masiva y para evitar las aglomeraciones en los centros de votación por la pandemia de la Covid-19 que vive el país.

Esta nueva figura de gobernador regional será la principal autoridad de cada una de las 16 regiones del país y quienes sean electos tendrán un período de cuatro años, pudiendo ser reelegidos solo una vez. Este fin de semana será la primera vuelta y, en caso de tener que ir a un balotaje, sería el 13 de junio del 2021.

Egon Montecinos, director del Centro de Estudios Regionales y del Desarrollo Territorial de la Universidad Austral dice que «votar a los gobernadores es un avance importante para cambiar (el centralismo político)», pero sustituir al intendente dejó al país frente a una hidra de Lerna: de esa autoridad que dejará de existir, aparecieron otras dos, una electa y otra designada», pues además del gobernador habrá un delegado del gobierno.

«Chile va a entrar al conjunto de países donde uno pudiera decir que existen anomalías en el poder territorial» en tanto el delegado regional, designado por el primer mandatario, «tendrá atribución de gestión y coordinación. Esa es la anomalía», explicó Montecinos.

En estas primeras elecciones regionales hay 90 candidatos de todos los sectores y se destacan dos grandes bloques: «Unidad Constituyente», que aglutina a la mayoría de los partidos políticos opositores, y «Chile Vamos», un conglomerado de partidos oficialistas.

Según las encuestas, dentro de Unidad Constituyente, el partido que saldría mejor parado de esta jornada electoral sería la Democracia Cristiana (DC), organización que calcula ganar entre cinco a siete gobernaciones. El principal triunfo esperan que sea el de Claudio Orrego en la Región Metropolitana, la región más disputada y la más importante políticamente ya que incluye la capital, Santiago.

Fuad Chahín, presidente de la DC dijo al respecto: «Seríamos el partido con más ‘población gobernada’ del país». Dentro del bloque opositor están confiados de que pueden conseguir entre 10 a 12 gobernaciones de las 16 que se disputan.

Desde el oficialista Chile Vamos, en cambio, domina un escenario pesimista, en el que incluso algunos creen que es posible no ganar ninguna gobernación.

teleSUR


Radiografía de candidatos a Gobernador: mayoría son hombres, abogados y sobre 50 años

Por Martín Cifuentes Fuentes

Las elecciones de este 15 y 16 de mayo marcarán un antes y un después en la política nacional y regional. No solo por los convencionales constituyentes, alcaldes y concejales que saldrán electos, sino también por la irrupción de los gobernadores regionales. El cargo, que nunca había sido elegido popularmente y que remueve a la figura de los intendentes, deberá encargarse de fomentar el desarrollo de cada región que representarán y potenciar la descentralización del poder político. En ese contexto, el Centro de Políticas Públicas de la Universidad Andrés Bello (UNAB) realizó el estudio “Radiografía: perfil de los candidatos a Gobernador Regional”, que arrojó cifras reveladoras de los 90 candidatos inscritos en el Servel, en las 16 regiones del país.

Un dato relevante fue que un 75% de los candidatos no incluye dentro de sus propuestas un plan de Desarrollo Regional, una de las principales funciones del nuevo Gobernador Regional, y solo el 25% lo menciona en su programa de gobierno. Respecto a las funciones principales que tendrán los que ostenten el cargo, un 60% habla sobre Ordenamiento Regional en su programa y un 40% de los candidatos no hace propuestas en este aspecto; un 80% se refiere al Fomento Productivo en su programa y un 20% no hace mención sobre el tema; y un 77% habla sobre Desarrollo Social en su programa de gobierno y un 23% no.

Respecto a estas cifras, Claudio Fuentes, doctor en Ciencias Políticas de la Universidad de Carolina del Norte (Chapel Hill), apunta que los candidatos probablemente tienen claras las atribuciones del cargo al que postulan, “pero están en campaña y tienen que realizar promesas. Sobre seguridad ciudadana prometen acabar con la delincuencia, y más de una candidata ha planteado eso, pero no tienen un ápice que tocar respecto al despliegue de la policía”. Eso sí, existe la posibilidad de que los proyectos impulsados por un Gobernador en su plan de Desarrollo tenga un impacto indirecto en la seguridad ciudadana, como aquellos vinculados a la forestación, parques o cuidado de infraestructura. “Pero vemos una inflación de promesas y no es que sean ignorante, solo quieren ganar”, comenta el cientista político.

El equipo del Centro de Políticas Públicas de la UNAB trabajó durante un mes y medio recabando la información de las distintas propuestas presentadas al Servicio Electoral. Florencia Serra, de Investigación y Coordinación del Centro, comenta que hay programas de candidatos con 30 páginas y otros con solo 1 página, y que se levantó la data desde formación académica y edades hasta género, además de los programas, donde se encontraron que varios no mencionaban los tres pilares de las atribuciones de los gobernadores regionales: Fomento Productivo, Desarrollo Social y Ordenamiento Territorial. “Y llama la atención, porque si son tus tres grandes atribuciones, ¿cómo no vas a prometer nada o no vas tener ninguna propuesta en estos aspectos?”, plantea la investigadora.

“Si bien no es un tema muy candente, hemos puesto foco en este tipo de información, porque nuestra idea es que la ciudadanía pueda votar informada y que no les estén prometiendo cosas que no se podrán cumplir”, dice Florencia Serra, quien señala que en la universidad se realizaron dos debates -uno en la región de Valparaíso y otro en la de Biobío-, que tenían preguntas del público en formato de encuesta hacia los candidatos. La experiencia, dice, acusó una falta de conocimiento respecto al cargo, lo que motivó la realización del estudio.

De los 90 candidatos a Gobernador Regional, un 16% son abogados, seguidos por ingenieros (13%) e ingenieros comerciales (11%). Por profesiones, les siguen titulados en Pedagogía (10%), Periodismo (6%) y Medicina (4%). En tanto, un 62% tienen sobre 50 años y un 48% menos de 49 años. La edad promedio es de 50,9 años.

En aspectos más específicos, las regiones de La Araucanía, Biobío y Metropolitana son las que tienen un mayor número de candidatos: ocho en cada una. En la contraparte, la región de Aysén tiene solo tres candidatos. Otro apartado interesante es que un 52% de los candidatos a gobernador no han tenido previamente cargos público (Alcalde, Concejal, Gobernador, Intendente, Diputado, Senador o Ministro) y un 48% sí.

La mirada de muchos está en la elección de Gobernador en la región Metropolitana, que representa aproximadamente al 40% del electorado del país. Es la única región con exministros postulando, además de un exdiputado. Florencia Serra lo resume así: “El Gobernador más poderoso será el de Santiago y tendrá el mayor peso electoral después del Presidente: tenemos regiones con 100 mil habitantes, mientras que solo Puente Alto tiene 500 mil”.

Infografía: Verónica Calderón.

Un cargo público por conocer

Los Gobiernos Regionales (GORE) partieron en 1993, compuestos principalmente por el Consejo Regional y encabezados por el Intendente, designado directamente por el Presidente de la República. Una figura que comenzó a cambiar en 2013, cuando se realizó la primera elección popular del Consejo Regional (CORE), que hasta entonces eran elegidos por los concejales. Cuatro años después se definió la elección de gobernadores regionales, que compartirían poder en el GORE con un delegado presidencial y se eliminaría la antigua figura del Intendente.

¿Qué facultades tiene un Gobernador? Formular políticas de desarrollo de la región, considerando la específicas de cada uno de los municipios; someter ante el CORE las políticas, estrategias y proyectos de planes regionales de desarrollo y sus modificaciones; presentar al Consejo Regional el proyecto de presupuesto del GORE y velar por el cumplimiento de las normas de probidad administrativa. Además, se establece la figura de un delegado presidencial que va a existir en la región para asumir el vínculo entre el ejecutivo y algunas funciones regionales.

El cientista político Claudio Fuentes dice que además de las funciones específicas de un Gobernador, es relevante el significado histórico de la elección. “No tienen ni funciones directas asociadas a la seguridad ciudadana o a la inversión pública de los espacios, salvo aquellos que estén contemplados en los planes de desarrollo, pero significará una negociación con los gobiernos centrales respecto al costo de estos planes”, dice, añadiendo que se armará un plan de desarrollo y el Gobernador será el “broker” entre el gobierno central y lo que suceda con esos planes. “Siempre, desde la Constitución del 33, se pensó el Estado con una centralización fuerte y con control político en cada una de las regiones. Eso, por primera vez, se va a quebrar. Este es el inicio de un proceso de descentralización política de la República. Es algo inédito”, plantea Fuentes.

Felipe Vergara, experto en Marketing Político de la Universidad Andrés Bello, dice que al no existir claridad en la gente respecto del cargo de Gobernador, “los candidatos han propuesto cualquier cosa en sus programas, y eso demuestra que estos van más ligados a una estrategia de marketing que a un real convencimiento de las funciones que ellos debieran desempeñar en sus gobernaciones”.

En tanto, la investigadora de UNAB, Florencia Serra, cuenta que en los dos debates que realizaron en Valparaíso y Biobío, “dado que los candidatos están haciendo propuestas en las que no tienen atribuciones, desde la universidad realizamos estos debates con temas acotados a sus atribuciones”. Serra plantea que, en términos generales, “la ciudadanía está desinformada y la clase política se aprovecha”.

Muy lejos de la paridad

“Lo primero que se puede constatar es que, cuando no rige la ley de cuotas, los partidos no eligen un número equitativo de mujeres para competir por un cargo de representación popular”, plantea Stéphanie Alenda, Directora de Investigación de la Facultad de Educación y Ciencias Sociales de la UNAB. Lo dice por una cifra inequívoca en el estudio “Radiografía: perfil de los candidatos a Gobernador Regional”: de los 90 candidatos a Gobernador en todo el país, solo 14 son mujeres.

La socióloga señala que la paridad se puede fomentar de distintas maneras. Primero, plantea, “existe un modelo horizontal, en el que se pone énfasis en la equidad de representación a nivel territorial, municipal, distrital y regional. A esta se suma una implementación vertical, que es cuando se obliga a los partidos a incluir mujeres a la mitad de sus planillas para los diferentes cargos de lección popular, como diputaciones o senadurías”.

Alenda cuenta que integrantes de la Red de Politólogas y de la Corporación Humanas tuvieron reuniones con algunas senadoras para presentar un proyecto de paridad para todas las elecciones, cargos plurinominales, del Congreso, CORE, Consejos Municipales y de modelo horizontal para Alcaldías y GORE, pero que “se dejó para el debate, en el marco de la Convención Constituyente”. Por ello, en esta elección corren con ventaja 76 hombres para quedarse con el cupo de gobernación en las regiones del país.

“Acá primó la historia política chilena, ganó la figura del hombre como protagonista y es algo muy lamentable, sobre todo para los desafíos que la sociedad se ha impuesto”, define Felipe Vergara, experto en Marketing Político. La deuda, dice, debe saldarse “estimulando la participación”. En una primera etapa, plantea, deben existir leyes que exijan paridad de género en todo término. “Debería ser transitorio y así hasta que se vuelva habitual, porque si no se presiona, nunca será costumbre”, define.

La Tercera


Todo lo que debes saber para la elección de quienes integrarán la Convención Constitucional

Este fin de semana se vivirá una jornada histórica en nuestro país, ya que la ciudadanía tendrá la oportunidad de elegir no solo a los alcaldes, concejales y gobernadores del país, sino además a los 155 integrantes de la futura Convención Constitucional, organismo que de forma inédita en Chile redactará de manera democrática la nueva Carta Fundamental que reemplazará al texto de 1980.

Sin duda, el número de candidaturas que se encuentran en competencia marcan un récord: son 1.275 personas para un total de 155 cupos, que se dividen entre 138 para el conjunto de la ciudadanía, y 17 escaños reservados para los pueblos indígenas. De este universo, además, 754 son candidatos independientes y 521 son afiliados a algún partido. La elección se complejiza además porque las candidaturas están organizadas en 71 pactos, algunos a nivel nacional y otros locales, contando con 31 partidos políticos participando.

Cupos indígenas

Estos cupos reservados para los pueblos originarios se distribuyen nacionalmente en nueve regiones: Antofagasta (1 escaño en el distrito 3), Atacama (1 escaño del distrito 4), Coquimbo (1 escaño del distrito 5), Valparaíso (1 escaño del distrito 7), Metropolitana (6 escaños de los distritos 8, 9, 10, 12, 13 y 14), Biobío (2 escaños de los distritos 20 y 21), La Araucanía (2 cupos de los distritos 22 y 23), Los Lagos (dos escaños de los distritos 25 y 26) y Los Ríos (1 escaño del distrito 24).

Consultada sobre el funcionamiento de estos cupos en específico, la profesora Claudia Heiss, académica del Instituto de Asuntos Públicos (INAP) de la Universidad de Chile, explicó que debido a que los parlamentarios oficialistas se negaron a que fueran cupos supernumerarios, o sea que se agregaran a los 155 nacionales, se los debió restar a distritos específicos del país.

«Por esto tenemos un sistema un poco curioso. Hay una sola lista nacional por cada pueblo originario, que se vota nacionalmente, pero cuya representación será territorial, porque después estarán relacionados con un cupo específico, y además serán con corrección por paridad de género, aprovechando que cada candidatura va en dupla con un hombre y una mujer, o sea cuando se corrige ingresa el par que corresponde», remarcó la académica.

Corrección de género

Una de las disputas más importantes que se dio en los momentos previos al inicio del proceso constitucional fue la necesidad de que el organismo redactor fuera paritario. Sin embargo, muchas personas han expresado dudas respecto a la forma como funcionará este mecanismo.

De acuerdo a la profesora Heiss, hay que tener en cuenta que la norma explica que en los distritos no puede haber una diferencia mayor a uno en los distritos impares en beneficio de uno u otro género, de manera que en un distrito con cinco cupos, pueden ser electos dos hombres y tres mujeres, pero no cuatro hombres y una mujer.

«Cuando haya una mayor diferencia a la establecida, el integrante del género sobrerrepresentado que tenga menos votos debe cederle el cupo a la persona del otro género en la misma lista con más votos. O sea, si en un distrito salen 5 y hay 4 hombres y 1 mujer, el hombre con menos votos le cede el cupo a la mujer más votada de la misma lista», o viceversa.

¿Integración con «arrastre»?

La profesora Heiss afirmó que lamenta que el «arrastre» como concepto se encuentre tan desprestigiado, ya que «creo que hay sobre todo un malentendido. El arrastre es algo indispensable si queremos un sistema que sea realmente proporcional, porque si hay un candidato que recibe el 80 por ciento de los votos en un distrito con 4 cupos, y obtiene sólo un escaño, las ideas que representa y que recibieron un apoyo contundente de la ciudadanía, quedan subrepresentadas. Es por es que «arrastra» a sus compañeros de pacto, repartiéndose los votos en la lista que comparte un programa».

En este sentido, Heiss insistió en que sin arrastre no es posible que exista proporcionalidad en el sistema, y que «es importante entender que no se vota sólo por un candidato sino también por una lista, y por un programa. Cuando las personas ejerzan su derecho tienen que fijarse en eso también, no podemos reducir la política sólo a las candidaturas individuales».

¿Efecto negativo tras suspensión de las campañas?

Respecto a los posibles efectos de la suspensión de las campañas por la pandemia, la académica aseguró que si bien desconoce un análisis caso a caso, «lo que sí es posible ver es que la disparidad en la capacidad de financiamiento tiene un efecto claro. Quienes tenían acceso a mayores recursos han podido llegar mejor hasta el final, y es ahí, en el tramo final, donde se notó más esa diferencia, porque las candidaturas más pequeñas llegaron apenas, sobre todo con el alargue. Creo que ahí el problema de fondo es ver cómo reducir la influencia del dinero en la política y regular mejor el financiamiento de campaña».

Otra arista tiene que ver con la coincidencia entre tantas elecciones debido a los diferentes cambios en el calendario electoral. Al respecto, la profesora Heiss aseguró que «es desafortunado que hayan coincidido tantas elecciones en una jornada. También es cierto que haber tenido tres elecciones separadas en tan poco tiempo en las condiciones actuales sería algo insostenible, pero que las personas tengan que votar tantos cargos y con votos tan grandes en algunos casos, enreda las cosas».

A ello se suma la cercanía con la elección presidencial de fin año, que ha hecho que los debates se entremezclen. Esto «dificulta el debate tema a tema. Eso ha hecho, por ejemplo, que las campañas a la Convención Constitucional no se hayan centrado tanto en los temas constitucionales, sino que incorporan también otras materias que están en agenda como la crisis económica, los ingresos de emergencia, y las futuras elecciones a senadores, diputados CORE y presidenciales. Entonces, como estamos en medio de una crisis enorme, con muchos temas políticos, se hace difícil pensar una Constitución, que es un documento de largo plazo, y que incorpora normas que deben regular la vida política más allá de lo contingente».

Universidad de Chile


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