Por las masivas protestas, el presidente Alvarado cancela el acuerdo con el FMI

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Presidente Alvarado retira la propuesta inicial de negociación con FMI y anuncia diálogo nacional

“Entendiendo el sentimiento que existe pero además la necesidad de tomar acciones viables, el gobierno no seguirá adelante con su propuesta inicial. Esto con el fin de dialogar y balancear las propuestas que necesita el país para resolver la situación”, con esta frase, el presidente Carlos Alvarado anunció el retiro de la propuesta presentada al Fondo Monetario Internacional (FMI) y la apertura de un proceso de discusión de soluciones para la crisis fiscal del país.

Mediante una cadena nacional de televisión este 4 de octubre, Alvarado aseguró que aún hay tiempo para encontrar otras salidas. “Pero ese tiempo no es ilimitado. Lo peor sería no hacer nada y que solo esperemos a que una crisis más grave nos golpee”, advirtió el mandatario, y recordó que la venta de activos claves, como el Instituto Nacional de Seguros (INS) o el Banco Nacional (BNCR) no está en la propuesta.

También hizo un llamado a levantar los bloqueos y actos de violencia y vandalismo que se han presentado en las manifestaciones convocadas durante esta semana.

“Acojo con humildad el llamado de los sectores democráticos de la sociedad. Atendiendo el llamado de los partidos políticos representados en la Asamblea Legislativa, así como de las cooperativas, los sindicatos, los empresarios, el sector agropecuario, los solidaristas, la academia y los sectores religiosos, hoy hago una convocatoria a los distintos sectores que respaldan las vías institucionales para que abramos un diálogo nacional para resolver la emergencia económica que enfrenta el país. En ese diálogo me involucraré personalmente”, aseguró Alvarado.

El 17 de setiembre el Poder Ejecutivo dio a conocer la propuesta que presentaría ante el Fondo Monetario Internacional (FMI) para acceder a un crédito de Servicio Ampliado por $1.750 millones, que se sumaría a los fondos de emergencia por $504 millones ya aprobados para responder a la pandemia.

El plan era hacer un ajuste fiscal en varias vías, entre las cuales estaba el incremento temporal a las tasas del impuesto sobre la renta que se cobra a los salarios y a las utilidades de las empresas, y un incremento a la tasa del impuesto a la propiedad de bienes inmuebles.

También se proponía un tributo nuevo a las transferencias bancarias y cheques. Este fue uno de los puntos que provocó mayor oposición en diferentes sectores.

Para el 2021 el Poder Ejecutivo pretendía recaudar 0,50% del Producto Interno Bruto (PIB) en medidas permanentes de ingreso, mientras que mediante tributos temporales se estimaba una recaudación del 4,36% respecto a la producción nacional.

Mientras el proyecto estaba en discusión y los sectores opositores señalaban su debilidad en propuestas para la reducción del gasto público, el director de comunicaciones del FMI, Gerry Rice, confirmó –el 24 de setiembre– que Costa Rica ya se encontraba en “etapas iniciales” de la negociación.

La coyuntura fue aprovechada por grupos que llamaban a protestas violentas en las calles, que se materializaron en bloqueo de vías, quema de vehículos oficiales y agresiones contra miembros de la Fuerza Pública, además de provocar pérdidas al sector productivo y dificultar el acceso a los servicios básicos, como la atención médica. A estas manifestaciones se unieron también los sindicatos.

El Financiero


Diez apuntes sobre la dinámica de las protestas contra el FMI

Por Víctor Artavia

El presente documento es una actualización de nuestra caracterización del proceso de lucha liderado por el Movimiento Rescate Nacional (MRN). Poco antes de finalizar su redacción, Carlos Alvarado anunció que retiraba (provisionalmente) el proyecto de negociación con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y que iba convocar a una mesa de diálogo de todos los sectores. De igual manera, decidimos publicar el documento porque hasta el momento la lucha persiste y, además, el análisis y valoraciones políticas desarrollados mantienen vigencia en caso de que se abra la mesa de negociación.

Al respeto de esto último, alertamos que el llamado a la negociación es una trampa impulsada desde el gobierno, cámaras y partidos burgueses para desmovilizar, negociar sin presión en las calles e imponer un acuerdo contra la clase trabajadora en la mesa de diálogo. Por eso, llamamos a sostener la lucha hasta que el gobierno abiertamente renuncie a negociar con el FMI y a recortar el gasto público, a partir de lo cual se puede abrir una negociación sin presencia de la UCCAEP, partidos burgueses y la Iglesia Católica, para definir las medidas fiscales progresivas ante la crisis fiscal, como los impuestos a las grandes empresas y las fortunas.

Seguidamente, exponemos nuestros diez puntos de análisis sobre la dinámica de las protestas contra el FMI.

  1. El 30 de setiembre el Movimiento Rescate Nacional (MRN) convocó a una serie de movilizaciones en oposición al acuerdo con el FMI y la propuesta de negociación que presentó el gobierno a los partidos en la Asamblea Legislativa. Las protestas se extendieron por varios puntos del país (principalmente en las zonas rurales) y continúan hasta el día de hoy, contabilizándose decenas cortes de rutas.
  1. Como analizamos en nuestro artículo del 02 de octubre[1], es un movimiento complejo y marcado por la heterogeneidad de los sujetos sociales y reivindicaciones, lo cual se refleja en la confusión en cuanto a las reivindicaciones. Así, mientras el pliego petitorio del MRN apunta en un sentido progresivo al repudiar el acuerdo con el FMI, oponerse a la venta de empresas estatales y pedir impuestos para los ricos, la consigna que en los hechos aglutina la lucha es “No más impuestos”, la cual es regresiva porque es funcional a los sectores burgueses que no quieren pagar tributos sobre sus utilidades y presionan para que el ajuste se ejecute por la vía de los recortes en el sector público (privatizaciones, despidos masivos en el Estado y precarización salarial).
  1. Por este motivo, desde el Nuevo Partido Socialista (NPS) inicialmente no acudimos a la jornada organizada por el MRN, pues caracterizamos que en su convocatoria se imponían tendencias regresivas, algo que fue explícito en la marcha que salió el 30 de setiembre desde la Fuente de la Hispanidad, la cual estuvo atiborrada de camisas y banderas de Costa Rica, con fuerte presencia de grupos anti-comunistas y anti-sindicales. Recordemos que previo a esta marcha, el MRN realizó una protesta en Casa Presidencial el 25 de agosto con la exigencia de apertura comercial total en medio de la pandemia, por lo cual movilizó a sectores de pequeños propietarios urbanos y sectores negacionistas con una agenda a la derecha. Esa misma base fue la que se hizo presente en la marcha de la Fuente de la Hispanidad.
  1. Asimismo, en nuestro primer comunicado también resaltamos que “nuestra caracterización de las protestas es abierta y, por ende, está sujeta a la dinámica del proceso. Dada la presencia de sectores populares con reivindicaciones totalmente justas, nos parece un error dar por cerrado el curso que pueda tomar la lucha, sobre todo en una coyuntura marcada por la polarización política donde los procesos pueden virar de la derecha a la izquierda en cualquier momento (o viceversa). En el momento que la luche tome un giro progresivo nos sumaremos a apoyar las acciones de protesta”.
  1. Al respecto, señalamos tres posibles condiciones para que la lucha tomara un rumbo progresivo: 1) el reemplazo de la consigna “No más impuestos” por una orientada a exigirle impuestos a las grandes empresas y fortunas; 2) la radicalización de la lucha si persistían los bloqueos en las zonas rurales, lo cual daría paso a una polarización política de las cámaras patronales y el gobierno; 3) la entrada en escena de las organizaciones sindicales en la pelea, lo cual daría un punto de apoyo social para levantar un verdadero programa de lucha unitario de la clase trabajadora y los sectores de pequeños propietarios en lucha.
  1. Caracterizamos que el fin de semana se produjeron los puntos 2 y 3 anteriores. Con respecto a los bloqueos, el gobierno desató una feroz represión contra comunidades enteras, donde se libraron batallas campales en algunos lugares, como sucedió en Limón. En lo concerniente a las organizaciones sindicales, el Bloque Unitario Sindical y Social (BUSSCO) convocó a una movilización contra el acuerdo del FMI y por impuestos a los ricos para el próximo martes 06 de octubre.
  1. En vista de lo anterior, desde el NPS ajustamos nuestra táctica y acordamos sumarnos críticamente a las protestas, manteniendo nuestro programa de lucha contra el FMI y por impuestos a las grandes empresas y fortunas, a la vez que diferenciándonos abiertamente de la consigna “No más impuestos” que articula a la enorme mayoría de cortes de ruta, la cual es una consigna regresiva y típica de la derecha, aunque en la lucha en curso sea sostenida por pequeños propietarios empobrecidos por la crisis económica.

Lo anterior no es una postura sectaria o un afán por el “purismo ideológico”, sino que tiene una importancia trascendental a pocas semanas de que inicien las negociaciones con el FMI y la derecha neoliberal tiene en curso una campaña de “No más impuestos” para evitar que graven al gran capital y promover la venta de empresas estatales. Es más, hay presión de los partidos burgueses y la Iglesia Católica para que el gobierno habilite una mesa de diálogo y varios economistas del establishment neoliberal plantean condicionar algunas de los impuestos más regresivos (transacciones bancarias y renta) para que no afecte a los sectores populares, pero, en contraposición, sostienen concentrar el ajuste fiscal en el recorte del gasto público y golpear a la clase trabajadora del sector público. Así, no se puede descartar que en una eventual mesa de negociación el gobierno realice una concesión parcial en materia de impuestos regresivos para desmovilizar a los campesinos y transportistas, pero apuntalando el ataque por el lado del gasto público contra la clase trabajadora (lo cual ya anunció el Ministro de Hacienda).

  1. De igual manera, nos diferenciamos de la conducción de la lucha por parte del MRN, encabezado por José M. Corrales y Célimo Guido; el primero una figura política burguesa de corte “socialdemócrata”, el segundo un referente vinculado a sectores de pequeños propietarios (transportistas, campesinos). Sin dejar de reconocer que sostuvieron la movilización cuando el gobierno desató la represión, tampoco podemos obviar que su estilo de dirección es caudillista y, por ende, anti-democrático, orientando por redes sociales o conferencias de prensa, pero sin convocar a asambleas o encuentros de representantes de las regiones. De haberlo hecho, hubiese sido relativamente sencillo centralizar el movimiento en torno al programa del MRN, pero por su estilo caudillista no lo han hecho hasta el momento, facilitando que en los hechos la consigna “No más impuestos” articule los cortes de ruta en todo el país. Por otra parte, nada garantiza que en cualquier momento desmonten la lucha sin mediar ninguna consulta democrática (por ejemplo, ahora con el llamado a negociación), o bien traicionen en una eventual mesa de negociación donde van a decidir sin ningún control democrático desde la base. Es un tema muy sensible, el cual ninguna corriente de izquierda trotskista coloca sobre la mesa, síntoma de una pasmosa capitulación al MRN y el abordaje acrítico del proceso que identificamos en sus análisis y tácticas.
  1. De igual manera, a pesar de la convocatoria del BUSSCO para movilizarse el martes, sostenemos nuestra crítica a las burocracias sindicales, las cuales renunciaron a luchar contra el gobierno y apuestan a “renegociar” con el FMI, una orientación desastrosa que conduce al movimiento sindical a una nueva derrota y no cuestiona la injerencia del imperialismo. Asimismo, denunciamos al Frente Amplio (FA) porque no llama a luchar contra el FMI (aducen que la negociación en un hecho consumado que no vale la pena resistir) y se limiten a promover el diálogo “racional” en el parlamento para sacar las medidas regresivas del acuerdo de negociación (convocó para la marcha de BUSSCO, pero sin plantear la oposición rotunda con el FMI). Por eso, la derecha prácticamente monopolizó las críticas a las medidas que el gobierno propuso para negociar con el FMI, presionando al gobierno para que ejecute más recortes presupuestarios y privatización de empresas estatales, lo cual camuflan con la consigna de “No más impuestos”.
  1. Por todo lo anterior, reiteramos nuestro programa de lucha contra el FMI en el marco del acutal proceso de lucha: 1) Llamamos a sostener la lucha hasta que el gobierno abiertamente renuncie a negociar con el FMI y a recortar el gasto público, a partir de lo cual se puede abrir una negociación sin presencia de la UCCAEP y partidos burgueses, para definir las medidas fiscales progresivas ante la crisis fiscal; 2) Nuestra oposición rotunda al acuerdo con el FMI, un organismo imperialista especialista en implementar planes de ajuste empobrecedores contra la clase trabajadora y los de abajo; 3) Exigir impuestos a las grandes empresas y fortunas para enfrentar la crisis económica; además, la persecución de los evasores que por año provocan un hueco fiscal de 2.22 billones de colones; 4) Llamamos a las organizaciones sindicales (BUSSCO, APSE) y al MRN, a convocar un Encuentro Sindical y Social de emergencia, con delegados de las organizaciones y regiones en lucha, para centralizar la lucha en cuanto al programa y el plan de acciones a seguir hasta derrotar al gobierno de Carlos Alvarado.

[1]

 “Sobre el carácter de las protestas convocadas por el Movimiento Rescate Nacional”. En http://izquierdaweb.cr/titulares/sobre-el-caracter-de-las-protestas-convocadas-por-el-movimiento-rescate-nacional/

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