Bolivia: el TSE propone que las elecciones presidenciales se realicen entre junio y septiembre
Con el aval de las ocho organizaciones políticas en carrera electoral, el Tribunal Supremo Electoral (TSE) decidió congelar el calendario debido a la situación de emergencia por el coronavirus en Bolivia y envió un proyecto de ley al Legislativo en el cual propone que la votación de las elecciones presidenciales se realice entre el 7 de junio y el 6 de septiembre.
En primera instancia, las elecciones estaban programadas para el 3 de mayo.
El proyecto normativo “propone un rango de fechas en las cuales deberá celebrarse la votación comprendido entre el domingo 7 de junio y el domingo 6 de septiembre de 2020”, explicó el presidente de la entidad electoral, Salvador Romero.
Además, propone que dentro de ese lapso el TSE defina una fecha para la votación sobre la base c consideraciones técnicas y valoraciones científicas sobre la evolución del coronavirus en el país.
Romero también explicó que las actividades realizadas en el cronograma electoral hasta la fecha “quedan cerradas por lo que reanudación del proceso electoral se hará en el punto exacto en el cual quedó suspendido”.
Partidos apoyan la postergación de las elecciones, pero hacen observaciones
Representantes de los cuatro partidos políticos con mayor respaldo en intención de voto apoyan la suspensión de la fecha de las elecciones generales, aunque algunos aún tienen observaciones que esperan sean tomadas en cuenta. Debido a la emergencia de salud, el Tribunal Supremo Electoral (TSE) planteó que la nueva fecha de los comicios sea entre el 7 de junio y el 6 de septiembre.
En conferencia de prensa, el presidente del TSE, Salvador Romero, informó que la propuesta es parte de un proyecto de ley que se enviará al Órgano Legislativo para su consideración. En caso de que el proyecto sea aprobado, será atribución del Órgano Electoral definir en qué fecha, dentro del lapso de tiempo propuesto (7 de junio al 6 de septiembre) se hagan las elecciones.
La autoridad precisó que esta decisión se tomará “a partir de consideraciones técnicas, de valoraciones científicas, provenientes de estimaciones serias sobre la probable evolución de la pandemia, y teniendo como referencia útil las experiencias internacionales”. Mientras tanto, el gobierno de transición al mando de la también candidata Jeanine Áñez seguirá al mando del país.
Ricardo Paz, jefe de campaña de Comunidad Ciudadana (CC) que tiene como candidato a Carlos Mesa, manifestó su apoyo a la propuesta del TSE y expresó su esperanza de que la situación en el país vuelva a la normalidad lo antes posible. “Pensamos que en la Asamblea Legislativa podrán ver que el plazo sea el más breve posible, lo más pronto posible de acuerdo a lo propuesto”.
José Luis Bedregal, vocero de la alianza Juntos, con Áñez como candidata, dijo que se acatará “disciplinadamente” lo que se defina desde el Órgano Electoral como instancia encargada de definir la fecha de las elecciones.
“Nosotros vamos a acatar lo que defina el TSE en función al análisis técnico e institucional que ellos hagan. Es la instancia responsable de llevar adelante los procesos electorales y son ellos los que deben determinar estos elementos en el marco de la Constitución y la ley”, acotó Bedregal.
Sin embargo, desde algunos partidos como el de Creemos, que tiene a Fernando Camacho como candidato, se hicieron algunas observaciones. Ronald MacLean, jefe de campaña de esta agrupación política, indicó que si bien la postergación de las elecciones es necesaria el calendario electoral debe ser modificado a fin de permitir cambios en las candidaturas y las alianzas.
“Básicamente estamos de acuerdo, pero creemos que es necesario reabrir el calendario electoral en términos de los plazos para renuncia e inscripción de nuevos candidatos, porque el tiempo tiene sus efectos y eso abre la posibilidad de nuevas alianzas y de conformaciones políticas”, señaló MacLean.
El político indicó que, además de los nuevos plazos, una razón para modificar el calendario es que la candidata y presidenta Jeanine Áñez continúa en campaña a pesar de la crisis que se vive en el país. “En Santa Cruz cómo están poniendo banderolas a su favor. Y obviamente ella está en ventaja porque como presidenta sigue en campaña”.
Sin embargo, la posibilidad de hacer estos cambios fue de alguna manera descartada por Salvador Romero, quien en la conferencia de prensa indicó: “Bajo el principio de preclusión, las actividades realizadas hasta el momento quedan cerradas, por lo que la reanudación del proceso electoral se hará desde el punto exacto en el cual quedó suspendido”.
Por otro lado, el delegado del MAS ante el TSE, Melvin Siñani, dijo que aún no le llegó información oficial del proyecto elaborado por el Órgano Electoral. Sin embargo, aclaró que como partido no se opondrán a cualquier determinación que beneficie a la salud de la población. “Nosotros nos sumaremos siempre en pos de la realidad que estamos viviendo. Siempre vamos a ponderar primero la salud y vida de los bolivianos”.
Por último, el diputado Víctor Borda, también del Movimiento al Socialismo, manifestó que la Asamblea analizará los criterios técnicos presentados por el TSE para tomar una determinación sobre el proyecto de postergación de las elecciones. Resaltó que el proceso debe continuar desde donde se lo paralizó, pues reabrir nuevamente la inscripción de candidatos sería una opción poco seria.
El legislador señaló que no sería prudente que el Legislativo debata la norma a través de sesiones virtuales y que la presencia física de los legisladores será necesaria, incluso si el proyecto debe tratarse durante la cuarentena.
“El Gobierno deberá darnos permisos especiales. Este proceso electoral es muy delicado y no se puede generar vicio de nulidad. En mi criterio personal una sesión virtual no está en la Constitución ni en nuestros reglamentos y podría generar una nulidad de actos a posteriori por algún candidato o partido político que se viera perjudicado”, comentó Borda.