Canciller de Argentina se reunió en Brasil con Jair Bolsonaro y el canciller Ernesto Araujo
Jair Bolsonaro le propuso a Alberto Fernández reunirse el 1 de marzo en Montevideo
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, le propuso este miércoles al canciller Felipe Solá reunirse con su par de Argentina, Alberto Fernández, el 1 de marzo en Montevideo, en el marco de la asunción del presidente electo de Uruguay, Luis Alberto Lacalle Pou.
La propuesta surgió en la reunión que mantuvieron este miércoles Solá y Bolsonaro en Brasilia, para recomponer las relaciones bilaterales entre la Argentina y Brasil, luego de los cruces mediáticos entre los presidentes de ambos países.
Sola reveló a la salida de ese encuentro que le llevará a Fernández la propuesta para reunirse en Montevideo, aunque ambos mandatarios dejaron abierta la puerta para un futuro encuentro en Brasilia o en Buenos Aires.
Vinimos a Brasil con el objetivo de construir consensos con nuestro principal socio regional. La relación estratégica y el afecto mutuo entre los pueblos son más importantes que las diferencias ideológicas.
Gracias @jairbolsonaro por recibirnos. pic.twitter.com/TfU8uejLt0
— Felipe Solá (@felipe_sola) February 12, 2020
Según el funcionario, esa posibilidad de un primer encuentro en Montevideo entre ambos mandatarios se debe a que, en opinión de Bolsonaro, ese es el «horizonte más cercano» en que coincidirán ambos mandatarios, que asistirán a la toma de posesión de Lacalle Pou.
Ese domingo 1 de marzo se celebrará en la Argentina la apertura de las sesiones del Congreso, por lo que resta confirmar si ese mismo día se podrá dar el encuentro entre los mandatarios.
Además, el canciller argentino reveló que durante el encuentro le pidió a Bolsonaro apoyo en el marco de la negociación con el FMI.
Solá dijo que durante su encuentro con Bolsonaro, que duró casi una hora y siguió a una entrevista con el canciller Ernesto Araújo, se trataron diversos temas de la agenda bilateral y se reforzó la intención de ambos Gobiernos de mantener una relación «pragmática», más allá de sus diferencias ideológicas.
«Hemos hablado de futuro», dijo el canciller argentino, quien en relación a las agudas polémicas entre el líder de la ultraderechista brasileña y el gobernante peronista apuntó que «hay cosas que sólo se entienden cuando uno está acá y ve a las personas».
El encuentro comenzó pasadas las 14 de este miércoles, tras la reunión que mantuvieron los cancilleres de Argentina y Brasil. En una conferencia conjunta de los dos cancilleres, Araújo sostuvo que «Brasil tiene la expectativa de contar con una alianza con la Argentina».
Solá prometió una postura «pragmática y realista» a Bolsonaro, que podría verse con Alberto en Uruguay
En su primera visita al Brasil, el canciller Felipe Solá prometió que el gobierno encabezado por Alberto Fernández adoptará una postura «pragmática y realista» frente a Brasil, y anticipó que las diferencias ideológicas con el presidente Jair Bolsonaro «no serán un obstáculo» para el desarrollo del Mercosur, la principal herramienta de integración económica y productiva compartida por ambos países.
La visita al principal socio comercial del país culminó con un paso en favor de recomponer los vínculos entre los líderes, ya que el gobierno brasileño mostró disposición para que Fernández y Bolsonaro se reúnan el próximo domingo 1 de marzo en Montevideo, adonde ambos mandatarios acudirán para la jura del presidente uruguayo, Luis Lacalle Pou. Ese domingo, Fernández dará apertura al período de sesiones ordinarias en el Congreso e inmediatamente después viajará a la Banda Oriental.
Tras reunirse con su homólogo, Ernesto Araújo, Solá se dirigió al Palacio de Planalto para mantener un encuentro con el presidente Bolsonaro, en lo que fue interpretado desde la Casa Rosada como una buena señal y un gesto para distender la relación, siendo que el brasileño se involucró en la campaña electoral en favor de Mauricio Macri y tuvo varias declaraciones despectivas hacia Fernández y la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Oficialmente, la comitiva aseguró haber tenido «una cálida reunión» que se prolongó cerca de 50 minutos y estuvo esencialmente dedicada a plantear el complejo escenario heredado de la gestión anterior, que le impide a la Argentina poner un particular énfasis en las negociaciones económicas que el Mercosur mantiene con otros bloques hasta tanto haya un acuerdo para la reestructuración de la deuda con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y los bonistas privados.
En este sentido, la comitiva argentina solicitó oficialmente el respaldo del gobierno brasileño ante el board del organismo multilateral de crédito con sede en Washington.
En otro orden, Solá señaló que el Gobierno no pretende colocar barreras a las negociaciones comerciales que están en curso desde el Mercosur con Canadá, el Líbano o Singapur. «Vamos a tener la mente abierta para los acuerdos y vamos a tratar de no ser un obstáculo», comentó, si bien puso reparos al acuerdo con la Unión Europea (UE). «Las negociaciones en curso nos condicionan en lo inmediato a no tener una ratificación inmediata del acuerdo», avisó.
Guiño de Solá a Bolsonaro: «el Mercosur debe hacer acuerdos de libre comercio con otros países»
Antes de la cumbre con Jair Bolsonaro, el canciller Felipe Solá se reunió con su par brasilero Ernesto Araújo y se mostró de acuerdo con la línea de apertura comercial con la que insiste el país vecino.
«Compartimos que el Mercosur para crecer debe hacer acuerdos de libre comercio con otros países», afirmó en un claro guiño al principal socio comercial argentino.
Se trata de uno de los temas de mayor interés de la administración Bolsonaro, que a lo largo de los últimos meses amenazó con retirarse del bloque si el Mercosur no aceleraba los tratados de libre comercio proyectados.
Tenemos claro que los acuerdos fundamentales entre Argentina y Brasil no solo deben mantenerse sino que deben multiplicarse. Nos costó décadas construir la paz y la integración en la región.
Con el canciller @ernestofaraujo estamos convencidos que este es el camino. pic.twitter.com/AiYwtdzqOD
— Felipe Solá (@felipe_sola) February 12, 2020
El principal, lógicamente, es el firmado con la Unión Europea que de todos modos está lejos de ratificarse. No sólo por la oposición argentina, sino por la fuerte resistencia de ciertos países europeos que quieren proteger su sector agropecuario.
Pero además, Brasil instaló en agenda la celebración de tratados con Canadá, Corea del Sur, China, Estados Unidos, Reino Unido y Japón. A su vez, el ministro de Economía ultraliberal Paulo Guedes, presiona para reducir el Arancel Externo Común del bloque, lo que afectaría directamente a varias actividades industriales.
El objetivo de la misión argentina es acercar posiciones y mejorar las relaciones bilaterales que se vieron afectadas por la escalada de agresiones mutuas entre los presidentes de ambos países.
En ese sentido, los cancilleres destacaron que la reunión fue «extremadamente productiva», orientada a «mantener al Mercosur con un rol estratégico». «Brasil tiene la expectativa de contar con una alianza con la Argentina», agregó Araújo.
En la reunión con el primer mandatario, se espera que Solá también haga hincapié en el problema de la deuda externa local y presente proyectos de infraestructura a financiar con el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES).
La idea de Gustavo Béliz, el poderoso secretario de Asuntos Estratégicos que acompaña a Solá en la gira- es volver a potenciar el rol del BNDES en Argentina, que dejó de tener participación desde la llegada de Macri a la Casa Rosada.
Argentina le pide apoyo a Bolsonaro en la negociación por la deuda
El canciller Felipe Solá solicitó hoy el respaldo de Brasil a las negociaciones que el gobierno argentino lleva adelante con el Fondo Monetario Internacional (FMI), durante la primera reunión de trabajo que mantuvo esta mañana con su par brasileño, Ernesto Araújo.
Solá y Araújo acordaron «fortalecer el Mercosur», según afirmaron durante una declaración a la prensa ofrecida en el Palacio de Itamaraty y antes de que el canciller argentino se reúna, en el Palacio del Planalto, sede del gobierno de Brasil, con el presidente Jair Bolsonaro.
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