Docentes de Bioingeniería realizaron un modelo 3D para una cirugía en el Hospital El Cruce

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Docentes de la carrera de Bioingeniería de la UNAJ realizaron un biomodelo impreso en 3D que permitió realizar con éxito procedimientos quirúrgicos a un paciente que fue intervenido en dos etapas en el Hospital El Cruce.

Por primera vez, cirujanos del Hospital El Cruce realizaron procedimientos quirúrgicos a un paciente, asistidos con un biomodelo impreso en 3D. Debido a la complejidad de la patología que presentaba el paciente, no era sencillo realizar el planeamiento quirúrgico basado en el método tradicional, que consiste en observar las imágenes de una tomografía computada. Es por eso que el equipo médico comenzó a trabajar con docentes de la carrera de Bioingeniería con el fin de desarrollar un modelo físico con la anatomía del paciente, que les permitiera realizar el planeamiento y abordaje quirúrgico de una manera más precisa y eficiente, explicó el Dr. Osvaldo Romano, jefe del servicio de Traumatología del Hospital y docente del Instituto de Ciencias de la Salud.

La Diseñadora Industrial Valeria Sararols, docente de la asignatura Diseño Bioindustrial y referente de la universidad en el campo de impresión 3D aplicada a salud, fue la responsable de segmentar e imprimir la réplica de la columna del paciente que luego se esterilizó y se utilizó en la cirugía como material de soporte en la toma de decisiones.

“La reconstrucción 3D fue realizada mediante softwares de segmentación y modelado 3D, a partir de los cuales se editaron las imágenes DICOM del estudio del paciente y se exportaron las mallas poligonales que permitieron la generación de modelos tridimensionales con una impresora 3D. Una vez impresas las vértebras con polímeros biodegradables, se ensamblaron para conformar la columna, obteniendo una réplica en escala real de la columna vertebral del paciente”, comentó la docente.

A su vez, el Dr. Romano agregó: “poder contar con un modelo 3D de la columna del paciente facilitó el procedimiento quirúrgico notablemente, permitiendo discernir claramente la forma de la columna y cómo acceder a la misma. Esto beneficia ampliamente al paciente, ya que mejora los resultados de la cirugía y disminuye el tiempo en el quirófano. Poder contar con esta tecnología en el hospital, que ya está presente en otras partes del mundo, es de gran utilidad para el servicio del hospital”.

Fuente-Universidad Nacional Arturo Jauretche


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