Honduras: Tribunal declara culpable a la exprimera dama Rosa Elena de Lobo por fraude
Declaran culpable a ex primera dama de Honduras, Rosa Elena de Lobo
El Tribunal de Sentencia de la Corte Suprema de Justicia de Honduras encontró culpable a la ex primera dama, Rosa Elena Bonilla de Lobo (de 52 años), por tres delitos de apropiación indebida y ocho de fraude a título de autora en perjuicio del patrimonio de Honduras.
Asimismo, los jueces absolvieron a la esposa del expresidente, Porfirio Lobo Sosa, del delito de lavado de activos.
Rosa Elena de Lobo enfrentará una pena mínima de 58 años de cárcel y una máxima de 87. La audiencia de individualización de la pena será el próximo martes 27 de agosto a las 2:00 pm.
No vamos a descansar hasta que ‘Mi Rosa’ esté libre; vamos a ir a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos – Porfirio Lobo Sosa, expresidente de Honduras
La Caja Chica de la Dama fue el caso por el que Rosa Elena de Lobo fue enjuiciada y sentenciada. También fueron imputados su exsecretario privado Saúl Escobar Puerto y cuñado Mauricio Mora Padilla.
En el caso de Saúl Escobar, el Tribunal de Sentencia también lo encontró culpable por ocho delitos de fraude en concurso real a título de autor directo, mientras que Mauricio Mora Padilla fue absuelto de todos los ilícitos y se ordenó su excarcelación inmediata.
Escobar Puerto enfrentará una pena mínima de 48 años de cárcel y máxima de 72 años.
Acusación y captura de Rosa Elena de Lobo
La ex primera dama de Honduras Rosa Elena Bonilla de Lobo fue capturada en la mañana del miércoles 28 de febrero de 2018 en su residencia, en el sector de El Chimbo, Santa Lucía, al oriente de la capital hondureña.
La esposa de Pepe Lobo fue señalada por la Misión de Apoyo Contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras (Maccih) de sustracción irregular de poco más de 12 millones de lempiras (más de 510,000 dólares) de la cuenta de la oficina del Despacho de la Primera Dama a una cuenta personal cuatro días antes que su esposo entregara la Presidencia de la República el 27 de enero de 2014.
Tras cuatro meses de investigación, la Maccih reveló el mismo 28 de febrero que la ex primera dama creó una red de lavado de activos que movió 94 millones de lempiras con 70 cheques girados a unas nueve personas durante el 2011 a 2015.
La Maccih dijo que Rosa Elena también estaba acusada de lavado de activos, malversación de caudales públicos y asociación ilícita por haberse apoderado de 16 millones de lempiras y haber creado una red de blanqueo de capitales para ocultar dinero proveniente del Estado, destinado a obras sociales. Desde allí denominó el caso de Rosa Elena de Lobo como la «Caja Chica de la Dama».
Zapateros falsos
En el fallo se leyó cómo Rosa Elena de Lobo hizo un mal manejo de fondos públicos que salieron en cheques del Despacho de la Primera Dama.
Rosa Elena de Lobo fue primera dama de Honduras de 2010 a 2014, en ese tiempo lideró un programa llamado Calzando a niños de Honduras que era dirigido para alumnos de escuelas públicas.
La exprimera dama hondureña contrató falsos zapateros que cobraron el dinero por los trabajos, pero del que recibieron un porcentaje y la otra parte fue regresada a cuentas personales de Bonilla de Lobo.
El Tribunal concluye que los fondos utilizados por el Despacho de la Primera Dama eran provinientes de Casa Presidencial y de organismos cooperantes, por lo tanto eran fondos públicos.
La Fiscalía estableció que días antes de que su esposo Porfirio Lobo Sosa dejara la presidencia, Rosa Elena transfirió fondos que fueron utilizados para el pago de tarjetas de crédito, colegiaturas de sus hijos, compra de joyas y otras menesteres de índole personal.
Durante el proceso judicial se realizó un estudio de patrimonio familiar a la exprimera dama hondureña.
Sobrevaloración de zapatos
De acuerdo al fallo, se estableció que una persona identificada como Julio Galdámez (ya fallecido) era el encargado del programa y era el encargado de pagar los contratos.
«Los montos pagados a los supuestos zapateros eran menores a 30,000 lempiras mientras los depósitos hechos a los contratistas rondaban los 100,000 lempiras… No resulta creíble el hecho que ella (Rosa Elena Bonilla) realizó pagos de tipo personal de la cuenta que fue abierta con fondos públicos porque se confundió de chequera», se detalla.