Lenín Moreno busca un poco de aire y convoca a un «Acuerdo Nacional»

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Gobierno convoca al Acuerdo Nacional para reforzar la democracia

Este lunes 06 de mayo, en Quito, el vicepresidente de la República, Otto Sonnenholzner, presentará los parámetros, metodología y objetivos que comprenderá el Acuerdo Nacional Ecuador 2030.

El acto será en el Parque Bicentenario, y lo presidirá el primer mandatario, Lenín Moreno, ante alrededor de 1.500 personas.

Este Acuerdo Nacional busca consolidar la institucionalidad y vocación democrática del Estado, con una visión enmarcada en los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030.

La iniciativa comprende siete ejes temáticos: democracia y la reforma institucional; seguridad ciudadana; no violencia y prevención de adicciones; seguridad social; educación; cambio climático, y competitividad, empleo e innovación.

La propuesta estará estructurada por un grupo promotor o de iniciativa, mesas temáticas, secretaría técnica general, comisión de relatoría y comités locales.

El Gobierno prevé tener en 45 días los primeros acuerdos que se requieran en los diversos ámbitos.

En abril, Sonnenholzner sostuvo que el país necesita trabajar en consensos que sean perdurables.

“Queremos ser un ejemplo de que se puede gobernar para un país, tenemos que dialogar con los diferentes sectores y llegar a soluciones”, señaló.

Además, dijo que con el acuerdo se avanzará en múltiples ejes de trabajo, como el tener un modelo democrático idóneo para el país.

También cree en la necesidad de abrir la discusión de un modelo económico efectivo, que tenga la participación del sector privado.

Mencionó que el Gobierno apuesta a lo que funcione, ya que aquello dará trabajo a la gente. “Si vemos las últimas elecciones, la gente no piensa en ideologías, sino en cómo tener salud, educación, empleo, equidad, oportunidades iguales para todos”.

A mediados de abril, Elizabeth Cabezas, presidenta de la Asamblea Nacional, entregó al vicepresidente Sonnenholzner el Acuerdo Nacional por la Gobernabilidad, un aporte del Legislativo para que el Gobierno lo tome en cuenta en la propuesta final que presentará hoy.

Cabezas manifestó que en la creación del documento participaron 250 organizaciones del país.

“Este documento es un reflejo de que es posible construir acuerdos entre el Estado y la sociedad civil, a través del diálogo”, subrayó.

El acuerdo entregado al Gobierno está planteado desde 3 ejes: economía y producción; sociedad y democracia; seguridad y desarrollo.

Ruth Hidalgo, directora de la Corporación Participación Ciudadana, dijo que el Acuerdo por la Gobernabilidad fue criticado en su inicio porque parecía imposible establecer consensos.

Sin embargo, aseguró que a través del diálogo se construyó el documento desde las necesidades de los ecuatorianos. “El diálogo le hace bien a la democracia”.

Aquello lo comparte Polita Haro, del Gremio de Artesanos de Peluqueros de Pichincha, quien indicó que el sector necesita un marco legal incluyente, que abarque sus necesidades sin retroceso en los derechos adquiridos.

“Esta iniciativa de la Asamblea es importante porque reunió a la sociedad en mesas de trabajo y se tuvo la oportunidad de compartir un diálogo para aportar soluciones”, expresó.

Sectores ven positivo este Acuerdo Nacional 2030

Wilma Andrade, asambleísta de Izquierda Democrática (ID), dijo que el Acuerdo Nacional debería tener objetivos claros que determinen una idónea ruta económica, social y política del país.

Recordó que como ID acudieron a una convocatoria del presidente Moreno, luego de su posesión, para participar del Diálogo Nacional, en donde les presentaron inquietudes y propuestas a favor de los ecuatorianos, pero “no hubo seguimiento”.

Entre los temas planteados por los representantes de la ID constan: seguridad social, es decir, entrar a una reforma o tener una nueva ley para darle sostenibilidad al Seguro Social Ecuatoriano, y la generación de empleo.

“Siempre reconozco que el acuerdo y diálogo son importantes, por lo tanto, aplaudo esta nueva decisión del Gobierno de convocarnos, pero sería importante que se articulen las propuestas sugeridas”, indicó Andrade.

Además, instan a que se transparenten las condiciones del Fondo Monetario Internacional (FMI) y que se fortalezca el tema de la seguridad y combatir el consumo y contrabando de droga.

La asambleísta acotó, además, que como Izquierda Democrática plantearon un acuerdo nacional por el empleo, con incentivos para la empresa privada.

“Ojalá que este acuerdo llegue a todos, para así plantearnos espacios de gobernabilidad. Esperamos que salgan propuestas absolutamente definidas, pero que se las realicen”, dijo Andrade.

Para el consejero del Gobierno, Santiago Cuesta, el Acuerdo Nacional 2030 es una propuesta positiva, porque reunirá a la sociedad civil en busca de acuerdos mínimos, con la finalidad “de sacar al país adelante”.

Cuesta manifestó que en el anterior Gobierno era imposible tener este tipo de iniciativas, porque “el dictador decía cómo debemos caminar todos. Ahora tenemos un Presidente democrático, que llama a conversar a todos los estamentos del país”.

Comentó que este Acuerdo traerá cambios importantes para la sociedad, en la parte económica, laboral, mejoras educativas, entre otros, que serán consensuados con todos los sectores para lograr un mejor Ecuador.

“Además, buscamos que el próximo presidente no tenga los problemas que nosotros nos encontramos cuando llegamos al Gobierno”, señaló.

Por su parte, Fausto Camacho, coordinador del Observatorio Ciudadano Electoral, sostuvo que trabajar por un acuerdo, con la participación de todos los actores de la sociedad, es una propuesta correcta y positiva.

Comentó que esta iniciativa abriría una línea estratégica de país, no de Gobierno, la cual también implicaría, en su opinión, los avances hacia una reforma política electoral y del tema del Consejo de Participación Ciudadana.

Camacho ve importante que este tipo de iniciativas nazcan de una construcción colectiva, pero bajo diversas condiciones, como el que haya una metodología donde todos los actores acuerden reglas del juego del propio debate, tanto para edificar la propuesta, como para respetar lo que se apruebe.

Para el analista electoral, el éxito del Acuerdo Nacional 2030 radicaría en la voluntad de todos los actores de cada eje para acudir a los diálogos, luego está el acordar objetivos que satisfagan los intereses de cada parte.

“Y un tercer elemento que garantizaría el éxito de la propuesta es la voluntad de todos los actores y de la sociedad ecuatoriana para cumplir lo acordado”, indicó.

En 1985, Chile cimentó las bases para el retorno a la democracia 

Corría 1984 y el régimen dictatorial de Augusto Pinochet había decretado Estado de sitio, ante un aumento de las protestas sociales en Chile.

El ambiente en el país estaba convulsionado. A tres años de la crisis económica de 1982, los efectos aún persistían en la población.

Bajo ese escenario, el entonces recién asumido arzobispo de Santiago, monseñor Francisco Fresno, convocó a representantes de la oposición y partidarios del régimen a un proceso de diálogo.

Así, tras varias reuniones, el 25 de agosto de 1985 se firmó el Acuerdo Nacional para la Transición a la Plena Democracia por un grupo transversal de dirigentes políticos chilenos.

Aunque el documento fue desconocido por la dictadura, muchos creen que este fue el que cimentó las bases para el retorno a la democracia.

El acuerdo chileno contemplaba tres ejes: Acuerdo Constitucional, medidas de orden económico y social, y medidas inmediatas.

El primero señalaba que el restablecimiento de la democracia “hace indispensable el que todos tengan el derecho de expresar su pensamiento y asegurar sus libertades”.

Para ello, se proponía elección por votación popular del Congreso y del Presidente de la República, un procedimiento de Reforma Constitucional, entre otros.

En lo económico, se propuso superar la extrema pobreza y la marginalidad, la creación de trabajo, además, que las relaciones entre los trabajadores y empresarios sean equilibradas.

Y el tercer eje indicaba el término a los Estados de excepción, pleno restablecimiento de todas las libertades públicas, entre otros.

Aunque muchos aseveran que el documento chileno fracasó como intento de construcción de acuerdos, sí marcó un hito significativo en esta dirección.

Hoy, 34 años después, Chile es uno de los países más prósperos de la región, con la quinta mayor economía de América Latina, una democracia estable e índices altos en educación.

El Telégrafo


45 días de plazo para llegar a los acuerdos

El 6 de mayo del 2019 se presenta el Acuerdo Nacional impulsado por la Vicepresidencia de la República. No serán solo seis mesas como se dijo en un inicio. Se discutirán siete temas, con los diferentes sectores de la sociedad civil, gremios y actores políticos, entre otros.

El jueves pasado, en el Gabinete ministerial realizado en Santo Domingo, el vicepresidente Otto Sonnenholzner se refirió a varios detalles técnicos.

Reafirmó que los temas sobre los cuales se desarrollarán las discusiones serán: Educación, Seguridad Social; Competitividad, Empleo e Innovación; además de Democracia y Reforma Institucional; Sostenibilidad y Cambio Climático; Seguridad Ciudadana y No Violencia y Prevención de Adicciones.

Según el Vicepresidente, el Acuerdo Nacional es una propuesta para establecer consensos con varios sectores, que permitan establecer mecanismos para concretar sus demandas. También habló de un plazo de 45 días para tener los resultados del trabajo de las mesas.

Se ha anticipado que en las mesas de trabajo se abordarán el tema laboral y la situación del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social. Mencionó esto en relación con los efectos causados por los despidos en las empresas públicas ocurridos recientemente. “Seguramente se cometieron errores en desvinculaciones. No se permitirán excesos y eso lo vamos a corregir”, señaló el Segundo Mandatario.

Otro tema que planea plantear el Gobierno es las nuevas modalidades de trabajo, como el teletrabajo. Sin embargo, señaló que sobre esto no hay nada definido y se espera que los acuerdos salgan de la discusión en la mesa del Trabajo.

El Gobierno ha manifestado que dependiendo de los acuerdos a los que se lleguen se buscarían diversos mecanismos para aterrizar las propuestas. No se descarta la realización de una consulta popular.

Por su parte, el nuevo presidente del Frente Unitario de Trabajadores (FUT), Mesías Tatamuez, anunció que los sindicatos no acudirán a los diálogos en el Acuerdo Nacional. “Cómo se puede ir a un diálogo cuando se ha escuchado en los medios que van a mandar una ley de reformas a la Asamblea”, explicó Tatamuez.

Educación va adelante

En abril del 2018, Fander Falconí, entonces ministro, presentó la iniciativa llamada Acuerdo Nacional por la Calidad e Inclusión Educativa. El propósito -se dijo- era construir una agenda de cara al 2030. De esos diálogos participaba el actual titular de la Cartera, Milton Luna, quien comenta que les interesa trabajar en acuerdos a cortísimo y a largo plazo (2050). Patricio Crespo es la ‘bisagra’ entre la autoridad y la sociedad civil. Tiene una oficina en el Ministerio y en Esquel. Informa que hay 60 organizaciones involucradas, la mayoría de los gobiernos locales. Pero no cerrarán el paso a toda agrupación que desee participar. Existe, por ejemplo, el Acuerdo Tungurahua por la Educación. Ya hay 5 mesas formadas y 3 en creación, tratan de derechos, empleabilidad.

Un debate por el IESS

Las medidas estructurales que requiere el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) para su sostenibilidad financiera, que preocupa a sus propias autoridades, serán debatidas dentro del Acuerdo Nacional por la seguridad social, convocado por la entidad.

El desfinanciamiento de los fondos de pensiones y salud es el principal problema que hoy atraviesa el IESS. Algunas soluciones para el rescate de la entidad ya fueron planteadas en estudios actuariales desde el 2010, entre ellas el incremento de la edad de jubilación o del aporte de los afiliados al seguro o, incluso, un cambio en el sistema de financiamiento.

El titular del IESS, Paúl Granda, también ha planteado que se debe hallar una forma de financiamiento para las atenciones médicas de los hijos menores de 18 años de los afiliados.

Reformas laborales

Mejorar la competitividad del sector productivo del país es la principal premisa del proyecto de Ley de Fomento Productivo 2, que se espera sea presentada a la Asamblea antes del 24 de mayo. El Foro Económico Mundial ubica a Ecuador en el puesto 86 del Índice de Competitividad Global, de entre 140 países. La propuesta del Gobierno incluirá reformas laborales. Las autoridades han expresado la intención de retomar la contratación por horas, lo cual es respaldado por los gremios empresariales, pero rechazado por los sindicatos. Esa figura contractual está prohibida por la Constitución, el Ministerio de Finanzas no descarta hacer cambios. La posibilidad de aumentar el período de prueba también divide a trabajadores y empleadores.

La situación del Cpccs

El debate sobre el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (Cpccs) empezó a partir de la elección de los consejeros mediante votación popular. Hay dos bandos claramente establecidos y ambas posiciones requieren una reforma de la Ley de Participación ciudadana. Una aboga por la eliminación del organismo. La otra busca que se elimine la facultad de nominación de autoridades y que esa función vuelva a la Asamblea Nacional. De hecho, la presidenta del Legislativo ha planteado una iniciativa de reforma para limitar las funciones. Mientras tanto, Julio César Trujillo, presidente del actual Cpccs transitorio, anunció una recolección de firmas para que el futuro de la entidad se resuelva en una consulta. El Gobierno ha manifestado que es uno de los temas que se tratarán en las mesas.

Sin violencia ni drogas

Una de cada tres mujeres en la región enfrenta violencia física o sexual por parte de su pareja. En el país rige la Ley para Prevenir y Erradicar la Violencia contra la Mujer. Luego de un año y medio de su aprobación, aún no se concreta su ejecución. Por eso el tema es parte de los diálogos del Acuerdo. La implementación del Sistema de Protección Integral, las medidas de protección, las juntas cantonales y la atención psicológica y legal a las víctimas son los ejes centrales, según la Secretaría de Derechos Humanos. Además, se espera alcanzar acuerdos sobre derechos de niñas, niños y adolescentes. Erradicar el consumo de drogas está en la lista de prioridades. El trabajo avanza con organizaciones y autoridades locales y del país.

Inseguridad en el país

Las estadísticas sobre seguridad en el país muestran cómo de los seis delitos que más impactan en los ciudadanos, cuatro aumentaron sus índices entre enero y febrero del 2019.

Las cifras fueron comparadas con igual periodo del 2018. El Ministerio del Interior detectó que hay más robos a personas, de carros, de locales comerciales y de motos. Este último tiene el mayor incremento: 41,52%.

En homicidios intencionales, la medición abarca de enero a marzo y se indica que en este ilícito hay una baja del 1,61%. Pero en más de la mitad de los casos se usa armas de fuego.

En Quito también hay temor por los asaltos violentos perpetrados en taxis. Este tipo de hechos hizo que el alcalde electo, Jorge Yunda, se reuniera con generales de la Policía y con la ministra del Interior, María Paula Romo.

La lucha por el ambiente

Ecuador asumió este año la misión de reducir hasta en un 20% sus emisiones de gases de efecto invernadero, provenientes de los sectores transporte, energético, agrícola y gestión de residuos. Por eso, la sostenibilidad y el cambio climático son parte de uno de los ejes que se discutirán en las mesas. En marzo, el Ministerio del Ambiente del Ecuador (MAE) presentó su Contribución Determinada a Nivel Nacional (NDC), que es uno de los requisitos del Acuerdo de París para la lucha contra el cambio climático. Este documento representa la guía para las acciones de adaptación y mitigación que se llevarán a cabo entre el 2020 y el 2025. Los principales retos se concentran en el sector energía, ya que es el que más emisiones genera en el país.

El Comercio


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