Paraguay: marchas y silencio del gobierno a 30 años del final de la dictadura stronista
El 30 aniversario de la caída de la dictadura de Alfredo Stroessner (1954-1989) en Paraguay fue reivindicado ayer sábado en una marcha en Asunción que recordó a las víctimas de ese régimen, una efemérides que fue ignorada por el Gobierno, que no organizó actos oficiales ni emitió ningún pronunciamiento.
Ese silencio fue afeado por los centenares de personas que marcharon por el centro de Asunción, que exigieron “memoria, juicio y castigo” para los responsables de la represión, tres décadas después de que un golpe militar desalojara del poder a Stroessner, tras 35 años como dictador.
Los manifestantes portaban retratos con los rostros de algunas de las víctimas o desaparecidos por la dictadura, al tiempo que subrayaron que es el Estado quien debía de estar homenajeando a esos represaliados.
También se criticó la falta de un pronunciamiento de condena de la dictadura por parte del Gobierno de Mario Abdo Benítez, del gobernante Partido Colorado.
En ese sentido, se recordó que el padre de Abdo Benítez fue secretario personal de Stroessner y el hecho de que el dictador fue hasta su muerte miembro honorario del gobernante Partido Colorado.
La marcha también se hizo eco de las polémicas declaraciones esta semana del mandatario, que al ser preguntado por el significado del 2 y 3 de febrero, fecha de la asonada que derribó a Stroessner, respondió que esa efemérides corresponde al aniversario de Ciudad del Este, segunda urbe de Paraguay, lo que acompañó con una carcajada.
Las declaraciones fueron muy criticadas por grupos de derechos humanos y partidos de la oposición, que antes señalaron que Abdo Benítez no ha condenado con rotundidad la dictadura.
El mandatario divulgó después de esas declaraciones un comunicado en defensa de la lucha que condujo a derribar la dictadura.
Y el viernes, preguntado de nuevo por los periodistas, Abdo Benítez dijo que “el 3 de febrero fue una fecha importante para la apertura democrática en el Paraguay“.
“Celebro y creo que la democracia la tenemos que regar y construir día a día. No se trata simplemente de un recuerdo, se trata de construir y fortalecer la democracia para que nunca retroceda”, añadió.
Abdo Benítez tiene previsto estar este fin de semana en Ciudad del Este, que celebra un aniversario más de su fundación,
La ciudad, fundada el 3 de febrero de 1957, fue bautizada como Puerto General Stroessner en homenaje al dictador, que murió en 2006 en el exilio en Brasil, funeral al que asistió Abdo Benítez.
Frente a la falta de actos por parte del Gobierno, la mayoría de partidos políticos han recordado el aniversario que supuso la instauración de la democracia.
La Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP) también hizo una breve evaluación de los logros democráticos en estos 30 años, e instó a trabajar en aras de la consecución de una democracia participativa.
La CEP indicó que ese periodo de democracia ha tenido “luces y sombras, pesando más estas últimas”, y añadió que la calidad del proceso democrático sigue presentando un “déficit importante”.
Para este domingo está previsto un acto en Asunción en homenaje a quien lucharon contra la dictadura por parte del Partido Liberal, el mayor de la oposición.
La dictadura Stroessner, la más larga de Suramérica, dejó 425 desaparecidos o ejecutados, detuvo a casi 20.000 personas que en su mayoría padecieron torturas, y forzó el exilio de 20.814 paraguayos, según el informe de la Comisión de Verdad y Justicia
Paraguay solo ha recuperado 37 cuerpos de los desaparecidos en ese periodo, de los que la Dirección de Memoria Histórica y Reparación solo ha conseguido identificar a cuatro.
Al respecto, la Coordinadora de Derechos Humanos de Paraguay lamentó el viernes que todavía no se haya podido “implementar un mecanismo efectivo que lleve a superar la impunidad de los crímenes cometidos”.