Bolivia: universitarios marcharon para pedir justicia por la muerte de un estudiante durante protesta
Ocho universidades marcharon para pedir justicia para Jonathan
Estudiantes, docentes y administrativos de ocho universidades del país marcharon ayer para exigir que la muerte del universitario Jonathan Quispe sea esclarecida.
La comunidad universitaria nacional marchó de manera masiva en las ciudades de Santa Cruz, Sucre, Tarija, Potosí, Cochabamba, Oruro, La Paz y El Alto, donde murió el estudiante.
En la sede de Gobierno, desde muy temprano la manifestación convocada por la Universidad Pública de El Alto (UPEA) recorrió la avenida Juan Pablo II y descendió hasta el centro paceño, para luego reunirse en inmediaciones de la avenida Montes, con los manifestantes de la Universidad Mayor de San Andrés.
Las marchas, multitudinarias y estruendosas, recorrieron las principales vías de las ciudades capitales, pero fue en Oruro y Cochabamba donde hubo enfrentamientos con la Policía.
En la Llajta, la marcha de estudiantes del Instituto Tecnológico Canadiense acabó con nueve detenidos y dos oficiales heridos. Esa movilización coincidió con la protesta de los universitarios de San Simón, que repudiaron la muerte de Jonathan Quispe, de la Universidad Pública de El Alto (UPEA), reportó ayer radio Pío XII.
Otro reporte, esta vez de Los Tiempos, dio cuenta de que por parte de los estudiantes también hubo heridos. En un video se ve a un universitario herido en la cabeza, producto de un proyectil que, según denunció, fue disparado por la Policía.
El rector de la Universidad Mayor de San Simón (UMSS), Juan Ríos, condenó la violencia y aseguró que hubo “infiltrados” en la movilización. “No venimos a enfrentarnos con la Policía, eso no está bien. Esta marcha no es (en defensa del referendo) del 21 de febrero, es una marcha en rechazo del crimen del que ha sido objeto el universitario Jonathan Quispe, de El Alto; además, en demanda de un mayor presupuesto. Se infiltraron en este movimiento totalmente pacífico”, sostuvo, según la ANF.
El comandante departamental de la Policía de Cochabamba, Fernando Angulo, informó que hubo dos marchas de protesta. La primera, de los estudiantes del instituto que protagonizaron una manifestación pacífica y que fue custodiaba por efectivos del orden, motivo por el que su ingreso a la plaza 14 de Septiembre fue permitido.
La segunda marcha fue de los universitarios, que coincidió con la de los estudiantes, quienes consideraron que era una manifestación en su respaldo y se armaron de valor para atacar con piedras y petardos a la Gobernación de Cochabamba.
Angulo sostuvo que la “violenta acción” de los manifestantes obligó a la Policía a disparar gases lacrimógenos. Los estudiantes lanzaron piedras y petardos contra los efectivos policiales, de los cuales uno fue alcanzado por la carga de un petardo, que le ocasionó la pérdida del pabellón de la oreja derecha.
En Oruro, los estudiantes también se enfrentaron a los policías, después de lanzar canicas a los vidrios de la Gobernación y Alcaldía. En medio del enfrentamiento, según el reporte de radio Fides, tres estudiantes fueron arrestados.
En el centro paceño, los universitarios condenaron la represión policial y gritaron estribillos en contra de los uniformados. Cerca del Ministerio de Economía, los estudiantes les gritaron “asesinos” y uno que otro golpeó los escudos con los que la institución del orden resguardaba el edificio.
En Potosí, a las 10 de la mañana, la marcha de la Universidad Autónoma Tomás Frías partió al centro. Los estudiantes demandaron un presupuesto de más de 100 millones de bolivianos, reportó Abya Yala.
En el departamento de Tarija, la Universidad Autónoma Juan Misael Saracho inició su movilización a las 11:00. Estudiantes, docentes y trabajadores administrativos de las diferentes unidades académicas realizaron la marcha en repudio al fallecimiento del joven universitario.
Jonathan Quispe Vila, estudiante de primer año de Comunicación Social, falleció el jueves, producto del impacto de una canica.
Piden diálogo con el Presidente
En conferencia de prensa, el rector de la Universidad Pública de El Alto (UPEA), Ricardo Nogales, pidió al presidente Evo Morales que los reciba.
“Señor Presidente, recíbanos en audiencia, le vamos a mostrar la realidad, tenemos déficit”, expresó, antes de añadir que él es el único interlocutor válido.
Nogales aseguró que todas las universidades del sistema apoyan a la UPEA y coinciden con el déficit de presupuesto.
Sobre los nexos con Samuel Doria Medina y su partido, Unidad Nacional, dijo que lo quieren inculpar. “Uno de los letreros dice Gestión Turística y Hotelera, fue un seminario donde lo invitaron a él. Seguro dirán lo mismo con Waldo Albarracín, también tenemos una foto con (Héctor) Arce, así también sería del MAS”, expresó.
Gobierno insiste en resolver conflicto con UPEA pese a trabas para el diálogo
El ministro de Economía, Mario Guillén, dijo el lunes que el Rectorado de la Universidad Pública de El Alto (UPEA) rechazó recibir la carta de invitación al diálogo sobre las demandas de mayor presupuesto y con el objetivo de poner fin a un conflicto y protestas que la semana anterior dejaron un muerto.
«Hemos mandado al mensajero esta mañana, ha logrado entrar a la UPEA, se ha entrevistado con la secretaria del Rectorado, la secretaria hizo una llamada a alguien y le han ordenado que no reciba la nota; entonces, la persona ha vuelto y en base a eso nosotros hemos enviado otro fax para que la nota llegue», informó a los periodistas.
El Ministro de Economía dijo que insistirá en instalar una mesa de diálogo con la UPEA, aunque representantes de esa casa de estudios manifestaron que solo hablarán con el presidente Evo Morales para solucionar ese conflicto.
«Queremos tener esta reunión para que esto, de una vez, tenga una solución», enfatizó a tiempo de recordar que las autoridades de la UPEA tampoco aceptaron dialogar el sábado pasado.
Guillén ratificó que la UPEA tiene importantes recursos a su disposición, de la coparticipación tributaria y las asignaciones extraordinarias que recibió del Estado para cubrir sus gastos operativos.
La UPEA tiene guardado en cajas 173 millones de bolivianos y, si certifica el número de estudiantes que tiene, podría movilizar otros 222 millones, según fuentes oficiales.
