Eduardo Rodríguez Veltzé, agente boliviano ante La Haya por la demanda marítima: «Se trata de una de las más graves injusticias para un país»
Entrevista a Eduardo Rodríguez Veltzé, agente boliviano ante La Haya por la demanda marítima
Por Cecilia Escudero, de la redacción de NODAL
En 2013, el gobierno de Bolivia presentó ante la Corte de La Haya una demanda para exigirle a Chile la negociación de una salida soberana al mar. Bolivia perdió 400 kilómetros de costa, su única salida al mar y 120 mil km2 de territorio en la llamada Guerra del Pacífico (1879-1883). Bolivia y Chile suscribieron en 1904 un tratado de límites que marcó la actual frontera binacional, principal argumento esgrimido por Chile para enfrentar la demanda legal boliviana. Actualmente, el proceso judicial culminó su fase de los alegatos, y se estima que el tribunal emita su fallo a fin de año. NODAL conversó con el agente de Bolivia ante La Haya, Eduardo Rodríguez Veltzé. Presidente del país durante seis meses tras la grave crisis política de 2005 y previo a la asunción de Morales, Rodríguez Veltzé cerró esta semana la posición de Bolivia en La Haya y pidió a la Corte que convoque a un proceso de negociación con Chile.
¿Cómo sintetizaría los argumentos sobre los cuales Bolivia sostiene su reclamo a Chile por una salida soberana al mar?
Chile reconoció que Bolivia debía tener un acceso soberano al Océano Pacífico, lo hizo desde 1895 cuando suscribió tratados para transferirle territorios costeros, posteriormente en innumerables declaraciones, actos unilaterales, compromisos y negociaciones diplomáticas (1920, 1950, 1976, 1987, 2006). También la Organización de Estados Americanos destacó que la solución del enclaustramiento era de interés hemisférico y recomendó soluciones concertadas. Esta acumulación de antecedentes configuran la obligación jurídica de Chile de negociar con Bolivia.
Autoridades chilenas reiteran que la frontera entre los dos países se fijó por medio del tratado de 1094. El canciller dijo además que “la soberanía de Chile no se toca”. ¿Cuál es su respuesta?
Bolivia no demandó la validéz del Tratado de Paz, Amistad y Límites de 1904 y así también lo reconoció la Corte en oportunidad de rechazar la Objeción Preliminar que intentó Chile para desconocer la competencia de la Corte. Los múltiples episodios relativos a una solución para el acceso soberano de Bolivia dejaron expresa constancia que se realizaban “ al margen del Tratado de 1904”, por ejemplo, Chile en 1976 ofreció una franja territorial con soberanía. Chile ha modificado su política exterior hacia Bolivia, desde el tiempo en que abiertamente reconoció la necesidad de encontrar una salida propia y soberana, pasando por múltiples episodios fallidos de negociación hasta la negación absoluta, incluso de recordar sus propios actos. La negociación puede permitir soluciones en las que se superen estas diferencias y permita encontrar soluciones mutuamente convenientes.
Bolivia acaba de cerrar la presentación de sus alegatos por la demanda marítima planteada contra Chile, ¿cómo sigue el proceso? ¿cuáles son las expectativas reales de Bolivia?
Las audiencias orales concluyeron los procedimientos y sólo resta esperar que la Corte delibere y anuncie su decisión. Bolivia ha sido rigurosa en las pruebas y los razonamientos legales que deben examinar los jueces para resolver la controversia. Se trata, sin duda, de un caso complejo jurídicamente pero que puede contribuir a solucionar una de las más graves injusticias para un país y para un pueblo que todavía sufre las consecuencias de un conflicto bélico que no provocó. Fue producto de intereses foráneos interesados en la explotación de los recursos naturales de la región, fue asimétrica y todas sus consecuencias siguieron la lógica y las imposiciones del vencedor quien, por sus propios actos adquirió para sí mismo una obligación de negociar.
Bolivia tiene acceso no soberano al mar mediante el tratado mencionado. En términos económicos y sociales, ¿cuál es la importancia para el país de recuperar una salida «soberana» al mar?
La importancia de tener un acceso propio al mar no sólo facilitaría las condiciones para hacer de las exportaciones e importaciones más expeditas y económicas, hoy severamente limitadas por las condiciones de acceso ó las contingencias de las frecuentes huelgas de los servicios portuarios que fueron privatizados por Chile, permitirían lograr mejores condiciones de competitividad para Bolivia, generar mayor inversion productiva, diversificar su economía y promover mayor crecimiento económico. Las Naciones Unidas y otros organismos internacionales han reconocido las grandes desventajas para el desarrollo de los países sin acceso directo al mar.