El Salvador, Nicaragua y Guatemala se aprestan a comprar aviones de guerra
Centroamérica se arma como si estuviese en guerra
El balance militar en Centroamérica vuelve a convertirse en tema de debate luego del anuncio del Gobierno de El Salvador, que se apresta a comprar a Chile 12 aviones de combate A-37.
Esta adquisición ha encendido las alertas en la región, particularmente en Honduras, pues se realiza en medio de la controversia por la isla Conejo, que sin fundamento pretende el Gobierno salvadoreño.
El ministro de Defensa, Marlon Pascua, anunció que Honduras hará un “análisis profundo” sobre lo que está ocurriendo en la región respecto a la adquisición de equipo militar.
Además de El Salvador, Guatemala se encuentra en un proceso de compra de seis aviones Súper Tucano a la empresa Embraer, de Brasil, por un monto de 133 millones de dólares.
Esta compra ya fue autorizada por el Congreso guatemalteco, pero se ha estado prolongando por presuntas irregularidades en la valorización de las aeronaves, según los medios de ese país.
Como Guatemala y El Salvador, Nicaragua estaría interesado en adquirir al menos seis aeronaves de combate de fabricación rusa para fortalecer su fuerza aérea.
“Hay que hacer un análisis profundo de lo que está sucediendo en la región centroamericana respecto a la adquisición de equipo militar por parte de algunos países”, manifestó el ministro de Defensa.
En la región, la fuerza aérea de Honduras cuenta con ocho F-5, aviones de combate supersónico ligeros fabricados en Estados Unidos.
Sin embargo, en Nicaragua se menciona extraoficialmente la compra de aviones MIG-29, una aeronave caza de superioridad aérea diseñada para misiones de combate contra otros aviones caza.
El presidente Porfirio Lobo también en su momento se mostró interesado en la compra de aviones Súper Tucano.
En el caso de El Salvador, el presidente Mauricio Funes anunció que está por firmar la compra de 12 aviones de combate A-37 por un monto de 10 millones de dólares a Chile.
La adquisición fue confirmada una semana después de que el ministro de Defensa salvadoreño David Munguía Payés señalara que El Salvador carece de la fuerza militar para disuadir a Honduras sobre la soberanía de isla Conejo.
El funcionario del vecino país, incluso, consideró a Honduras como una amenaza por la capacidad de sus Fuerzas Armadas, criterio que también respaldó el Presidente salvadoreño.