Detienen a fundadores del bufete Mossack Fonseca por vínculo con el caso Lava Jato
Detenidos Mossack y Fonseca Mora
Ramón Fonseca Mora y Jürgen Mossack, socios fundadores de la firma Mossack Fonseca, al igual que el abogado EdisonTeano, colaborador del bufete, quedaron detenidos luego de que la fiscalía segunda contra la Delincuencia Organizada los indagara por la supuesta comisión de delito de blanqueo de capitales. Los tres acusados fueron trasladado a la sede de la Policía Nacional de Ancón.
Marlen Guerra, abogada de Mossack, dijo que la fiscalía alegó“la posibilidad de fuga” para decretar la detención preventiva. Mientras que Elías Solano, abogado de Fonseca Mora, advirtió que no es complicado invocar la nulidad de este expediente, “ya que los cargos fueron muy endebles”.
La diligencia comenzó a las 8:30 p.m., luego de que personal del Ministerio Público allanara las residencias de Fonseca Mora y Mossack, en Altos del Golf, San Francisco, y la oficina de la abogada Sara Montenegro, en el edificio PH Office One, en Calle 50. Montenegro laboró hasta hace poco en Mossack Fonseca, pero ahora es parte de Avant Garde Legal Alliance.
Los funcionarios inspeccionaron documentos, computadoras y todo el material que pudiera constituirse en pruebas de la investigación, ligada a la operación Lava Jato, bajo el escrutinio de las autoridades de Brasil, tras detectarse una compleja red de sociedades que fueron usadas para encubrir sobornos.
Crisis de credibilidad alcanza al Gobierno tras acusaciones de Fonseca Mora
La crisis de credibilidad que en los últimos años ha empañado a las instituciones de justicia, y el Órgano Legislativo alcanza al Gobierno del presidente de la República Juan Carlos Varela, luego de las acusaciones hechas por el exministro consejero Ramón Fonseca Mora, por haber recibido supuestas donaciones de la empresa brasileña Odebrecht para su campaña electoral.
Investigación, aprobación de leyes que ataquen la corrupción y el fortalecimiento de las instituciones de justicia, son los caminos a seguir, según la mayoría de los panelistas que participaron en el programa Radar de este domingo 12 de febrero.
El pasado jueves, Fonseca Mora hizo las acusaciones antes de entrar al Ministerio Público (MP) para la respectiva indagatoria en la Fiscalía Segunda Especializada Contra la Delincuencia Organizada por la investigación que se adelanta a la firma Mossack Fonseca por el supuesto delito contra el orden económico (blanqueo de capitales o lavado de dinero), que lo vincula, junto a sus socios Jürgen Mossack y Edison Teano al caso “Lava Jato”.
FPB Bank, eslabón en Lava Jato
¿Por qué el FPB Bank, Inc. es importante en la operación Lava Jato y en las investigaciones que desarrolla el Ministerio Público contra la firma panameña Mossack Fonseca?
Este banco “negoció” la compra de, al menos, 44 sociedades anónimas con Mossack Fonseca en Brasil. La entidad bancaria contaba con una “representación” en el país sureño que captaba clientes para el banco, aunque no tenía licencia para hacerlo, pero el banco se valía de una empresa que operaba desde Brasil, con ejecutivos también de ese país.
Según los fiscales extranjeros, en allanamientos que antecedieron el origen de la investigación, así como en razón del material aprehendido en el cumplimiento de órdenes de búsqueda y aprehensión –que también incluía documentos, interrogatorios y declaraciones–“vislumbramos la existencia de una organización criminal transnacional, que sin ninguna autorización legal opera en Brasil: [se trata de] una institución financiera panameña, denominada FPB Bank, responsable de abrir cuentas bancarias en el referido paraíso fiscal y, consecuentemente, movió valores supuestamente al margen del sistema financiero nacional, así como negoció empresas offshore a fin de ocultar a los verdaderos socios, responsables y beneficiarios finales, expedientes estos que harían posible el lavado de dinero de sus clientes, entre otros delitos”.
ANTECEDENTES
En un allanamiento a Mossack Fonseca en Brasil a principios del año pasado, los fiscales aprehendieron documentos. “Identificamos algunos que corroboran una actuación de la organización criminal en Brasil por medio de FPB Bank”. Los fiscales añaden que el documento se refiere, “según lo que todo indica, a una cuenta de la oficina de Mossack Fonseca en el FPB Bank, Inc., en la que es posible verificar los movimientos financieros de las empresas offshore bajo la responsabilidad de los representantes del FPB Bank en Brasil…”.
Además, encontraron documentos vinculantes con los investigados que muestran que “el FPB Bank prestaría servicios en Brasil relativos a la apertura, mantenimiento de las offshore o algún ‘alquiler’ de las citadas empresas para justificar movimientos atípicos o esconder el verdadero origen de los valores”. Los fiscales brasileños citan, por ejemplo, un correo enviado por María Mercedes Riaño –encargada de la representación de Mossack Fonseca en Brasil– el 17 de noviembre de 2009 a Carlos Sousa Lennox, a cargo del mercadeo de la firma y familia política de Ramón Fonseca Mora, socio del bufete.
En ese correo, Riaño señala: “Te puedo decir que las sociedades de BVI [Islas Vírgenes Británicas, por sus siglas en inglés] se han usado en Brasil para ser accionistas de sociedades brasileiras y que no es el primer país en el mundo donde el accionista no utiliza la persona física y sí la jurídica. Que es el caso de incubrir [sic] el verdadero dueño”.
En declaración a los fiscales federales, una empleada de la representación de la firma en Brasil –Retana Pereira– relató que algunos clientes que adquieren un producto offshore solicitan la apertura de una cuenta en el país de registro de la empresa. Pereira también contó que siempre eran los representantes del banco los que adquirían las empresas de Mossack Fonseca y que solo bajo algunas circunstancias Mossack Fonseca recomendaba a sus clientes el banco para la apertura de cuentas en Panamá.
Añadió que Mossack Fonseca no vende el servicio de apertura de cuentas y que solo indica un contacto para la apertura y que la firma generalmente indica el FPB Bank en Panamá, que es el mismo banco en el que Mossack Fonseca posee cuentas. Pero lo que dijo Pereira no es del todo cierto.
La Prensa tuvo acceso a correos en los que Mossack Fonseca Panamá no solo recomendaba a sus potenciales clientes abrir cuentas en el FPB Bank, sino que cobra por este servicio. Por ejemplo, el 10 de diciembre de 2012, un intermediario (Nicky Gouder) pidió al abogado de Mossack Fonseca Luis Quiel ayuda para uno de sus clientes, quien quería abrir una cuenta bancaria en Panamá.
Una asistente ejecutiva, que escribía en nombre de Quiel – Cristina Ríos– le informó a Gouder que ayudaría a su cliente: “Nosotros estamos trabajando con un banco llamado: FPB Bank. Es un banco de capital brasileño, regulado por la Superintendencia de Bancos de Panamá. Cuenta con banca en línea y se puede abrir la cuenta bancaria en todas las principales monedas. Nuestros honorarios por apertura de cuentas cuentas bancarias son: USD 1.500”, escribió Ríos.
CLIENTE Por otro lado, Pereira declaró sobre un teléfono con tecnología de encriptación encontrado en su escritorio durante un allanamiento de Mossack Fonseca en Brasil, que este fue instalado por “exigencia de funcionarios del FPB Bank”. Pereira también confirmó que el teléfono era para hablar exclusivamente con representantes o funcionarios del banco.
Otro hallazgo importante fue que FPB Bank era cliente de Mossack Fonseca, identificado con número 39495, desde el 16 de octubre de 2014 y el banco figura como intermediario “profesional”, representando a clientes de Brasil. Así, pues, según los fiscales de Brasil, los elementos de convicción presentados “indican la existencia de una organización criminal de carácter transnacional, estructuralmente ordenada, caracterizada por la división de tareas, dedicada a la práctica de crímenes contra del sistema financiero nacional y el lavado de dinero”.
Añaden que “está claro que la constitución y utilización de empresas ‘offshore’ no son un crimen por sí solo. Pero su utilización con el propósito de ocultar valores provenientes de delitos configura lavado de dinero. Comercializando o disponiendo de empresas ‘offshore’ para criminales, el FPB Bank y sus responsables en Brasil y en el exterior estarían participando, mediante la ayuda, de la práctica de ese crimen”, sostienen los fiscales. “No nos parece razonable –añaden– que un brasileño que busca una institución financiera ilegal en Brasil (FPB Bank) para ‘adquirir’ una ‘offshore’ y abrir cuentas en un banco panameño quiera simplemente actuar por motivos lícitos”.
La investigación del banco se divulgó en la etapa 32 de Lava Jato, denominada Caza Fantasmas, que “hace referencia a la verdadera extensión oscura de la institución bancaria [FPB Bank] en Brasil, así como la vasta clientela que utiliza de sus servicios y de la oficina Mossack Fonseca para operaciones financieras con características de ilicitud y de forma oculta”, describió en su momento la Policía Federal de Brasil. UN BANCO BRASILEÑO Según documentación del FPB Bank, este es parte de The Brickell Group., compuesto por seis compañías: BP Asset, Brickell Fomento, Brickell CFI.
El banco, que es el único que posee el grupo, tiene licencia internacional en Panamá, y es de capital brasileño. Fue intervenido por la Superintendencia de Bancos el pasado viernes, el mismo día en que la Superintendencia del Mercado de Valores le suspendió la licencia de casa de valores. SUSPENDEN CALIFICACIÓN A finales de 2016, el FPB Bank presentó serios problemas que le merecieron una reducción de su calificación.
Equilibrium Calificadora de Riesgo, S.A., además le suspendió su calificación a razón de la intervención. La calificadora recordó que en noviembre le bajó la calificación de BB.pa a BB.pa, asignándole perspectivas negativas, “por el pronunciado deterioro del activo productivo del banco a raíz de la salida de sus operaciones de Brasil”, situación que venía impactando en su generación de ingresos y consecuentemente en los indicadores de rentabilidad”.
“Al mismo tiempo se observó la baja cobertura de su cartera vencida y morosa con reservas, mientras que, subrayó la calificadora, los niveles de liquidez se mantenían en niveles ajustados desde el ejercicio 2015”, indica la calificadora de riesgo.