Nueva marcha estudiantil por la reforma a la educación culmina con 97 detenidos

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Estudiantes marcharon con la mirada puesta en la reforma a la educación superior

Los estudiantes concretaron este jueves su última marcha previa al envío al Congreso, por parte del Gobierno, del esperado proyecto de reforma a la educación superior, que definirá, entre otras cosas, cómo se implementará la gratuidad prometida en la campaña de la Presidenta Michelle Bachelet.

La protesta se dio en medio de críticas recientes y crecientes al movimiento estudiantil a raíz de los últimos hechos de violencia en las marchas, que -según las encuestas- han mermado su apoyo ciudadano, como el saqueo a la Iglesia de la Gratitud Nacional con la destrucción de una imagen de Cristo y los daños provocados al Internado Nacional Barros Arana en medio de una toma.

La manifestación se planteó, por parte de los dirigentes, con un objetivo concreto de «recuperar la confianza» ciudadana, según reconocía Gabriel Iturra, presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Central y vocero de la Confech.

No obstante, igualmente hicieron su aparición en la marcha los encapuchados, que protagonizaron desórdenes en las inmediaciones del Parque Forestal, la Estación Mapocho y el Mercado Central, enfrentándose incluso con locatarios de este último.

El trazado autorizado por el intendente Claudio Orrego, para evitar la Alameda, provocó una disputa pública con la alcaldesa Carolina Tohá (PPD), quien criticó la «injusticia» de que «siempre en la comuna de Santiago los vecinos, los locatarios, los trabajadores sufran las consecuencias» de las protestas.

La marcha de hoy partía en Plaza Italia y avanzaba hacia el norponiente. El recorrido autorizado terminaba en la Avenida La Paz, pero luego de cumplirlo algunos estudiantes tomaron la calle Bandera y avanzaron hacia el sur, rumbo a la Plaza de Armas e incluso la Alameda, donde hubo escaramuzas y se interrumpió el tránsito.

De acuerdo a cifras oficiales, 97 personas resultaron detenidas, 51 de ellos mayores de edad.

El intendente Claudio Orrego había advertido que el Gobierno va a «evaluar» el desarrollo de la protesta y «eso va a condicionar cualquier permiso y cómo se realizan próximas manifestaciones».

«La apuesta es ganar»

Los dirigentes estudiantiles celebraron la «masividad» de la marcha -algunos hablaron de hasta 100 mil personas sólo en Santiago- y reivindicaron la necesidad de volver a centrar el debate en la calidad de la educación, en el marco de la reforma.

El proyecto sobre educación superior «está por ingresar y la apuesta del movimiento estudiantil es ganar. Nos movilizamos por cambios sustantivos», dijo la presidenta de la FECh, Camila Rojas.

«Porque queremos hablar de educación, seguimos marchando», señaló Marta Matamala, presidenta de la Feusach.

Mientras que el vocero de la Cones, José Corona, dijo que «nosotros hacemos un muy buen diagnóstico con respecto a esta movilización».

«Creo que quedó demostrado, no solo para nosotros mismos, sino que también para la ciudadanía en general, de que fuimos los estudiantes conscientes, los estudiantes que luchamos por una educación pública, gratuita y de calidad, los que les terminamos ganando a los encapuchados en las calles, los que les terminamos ganando a los violentistas», agregó.

Delpiano: La violencia hace daño a las reformas

Desde el Mineduc la ministra Adriana Delpiano destacó la importancia de que las manifestaciones se realicen de forma pacífica, «sin terminar en desórdenes o que se cuelen los encapuchados, porque eso le hace un daño muy fuerte al propio movimiento estudiantil, pero también a las reformas y a la educación pública».

«En ese sentido, la toma de colegios públicos es profundamente dañina», dijo Delpiano, que esta semana ha mantenido las últimas reuniones con actores políticos y de la educación -el pasado 10 de junio se reunió con la Confech-, en la antesala de la presentación de la reforma al Congreso, algo que está comprometido para ocurrir de aquí a fin mes.

Mientras que el ministro Secretario General de Gobierno, Marcelo Díaz, declaró que «entendemos que lo que todos queremos es que éstas se realicen con la mayor tranquilidad sin hechos de violencia que tengamos que lamentar».

«Tenemos la disposición y la voluntad de permitir, como corresponde en democracia, el derecho a manifestarse, pero también tenemos la responsabilidad el resguardo del orden público», indicó.

Desde la Municipalidad de Santiago expresaron su satisfacción por la baja en la cantidad de destrozos y daños. El director de Seguridad Vecinal, Marcelo Muñoz, sostuvo que «hubo una consciencia de todo el mundo con respecto a que las marchas tenían que parar de tener los niveles de violencia que estaban teniendo».

«En ese sentido, felicitar a los organizadores y a Carabineros, a la autoridad y la Intendencia por el logro que se ha tenido. Nunca vamos a estar contra el derecho a manifestarse, sí creemos que no todas las marchas tienen que pasar por la misma calle o estar todas en la comuna de Santiago», expresó.

Los jóvenes convocaron para el sábado, desde las 14:00 horas, a un «Concierto Ciudadano Por una Nueva Educación Pública» que se realizará en el Parque Almagro y contará con la presencia de los grupos musicales Inti Illimani y La Moral Distraída.

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