Disculpas públicas a los más de 300 afectados de Furukawa, ofrece el Gobierno de Ecuador
En diciembre de 2024, la Corte Constitucional declaró que en las haciendas de la empresa japonesa Furukawa en Ecuador existió una práctica análoga a la esclavitud, ordenó el pago de 120.000 dólares a cada víctima y disculpas públicas.
En un acto histórico de memoria y justicia social, el ministro de Gobierno, José De La Gasca, participó en las disculpas públicas a las víctimas del caso Furukawa, donde el Estado reconoció décadas de explotación y vulneración de derechos humanos. pic.twitter.com/MkYsCtwYXT
— Ministerio de Gobierno Ecuador (@MinGobiernoEc) May 31, 2025
La mañana de este 31 de mayo de 2025, el Gobierno Nacional de Ecuador realizó un acto en la Plaza Grande, en el Centro Histórico de Quito, y posteriormente difundió a través de las redes sociales la disculpa pública correspondiente.
El Caso Furukawa, que derivó en pedidos de reparaciones para las víctimas desde la Organización de Naciones Unidas (ONU), evidenció un sistema que se aprovechó de personas en condiciones de extrema vulnerabilidad para que vivan y trabajen en campamentos dentro de las haciendas en beneficio de Furukawa durante varias generaciones, sin que puedan cambiar su condición.
Los campamentos dentro de las haciendas de Furukawa no tenían luz, agua potable, instalaciones sanitarias básicas ni acceso a servicios de educación y salud, declararon las víctimas.
Disculpas públicas a víctimas del Caso Furukawa
El acto de disculpas públicas por parte del Gobierno de Ecuador hacia las víctimas de Furukawa se desarrolló con la presencia de José de la Gasca, Ministro de Gobierno; Ivonne Nuñez Figueroa, Ministra de Trabajo; Alegría Crespo, Ministra de Educación; Juan Bernardo Sánchez, Ministro de Salud Pública; Harold Burbano, Ministro de Inclusión Económica y Social; Gustavo Camacho, Subsecretario General de Gabinete de la Presidencia de la República y César Córdova, Defensor del Pueblo encargado.
«Respetar los derechos laborales de los trabajadores en Ecuador, forma parte de la consagración de los derechos humanos. Nunca más explotación moderna a los trabajadores. Hoy sus derechos se respetan y son parte de la construcción de una sociedad justa, igualitaria y digna», dijo la Ministra del Trabajo.