Israel lanza ataques contra Gaza y rompe el alto el fuego
Más de 400 muertos después de que Netanyahu advirtiera que Hamás se enfrentará a una «fuerza militar cada vez mayor»
Israel lanzó “amplios ataques” contra objetivos de Hamas en Gaza, matando a cientos de palestinos y rompiendo un acuerdo de alto el fuego de dos meses tras semanas de desacuerdo sobre cómo extender la tregua.
Las autoridades sanitarias del enclave controlado por Hamás dijeron que al menos 404 personas murieron y 526 resultaron heridas en los ataques aéreos de la madrugada del martes.
Un cese del fuego en varias fases acordado en enero había quedado en suspenso después de que Israel , con el respaldo de la administración Trump, buscara revisar los términos de una segunda etapa diseñada para liberar a los rehenes restantes en la Franja y poner fin a la guerra de forma permanente.
La oficina del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, quien ha rechazado poner fin a la guerra o retirar las tropas de Gaza , afirmó que Israel lanzó ataques en respuesta a la reiterada negativa de Hamás a liberar a nuestros rehenes. Israel también acusó al grupo militante palestino de rechazar las propuestas de los mediadores para prolongar el alto el fuego.
“Israel, a partir de ahora, actuará contra Hamás con creciente fuerza militar”, dijo la oficina de Netanyahu en una publicación en la plataforma de redes sociales X.
Hamás condenó la acción de Israel como una “agresión traicionera” y agregó: “Netanyahu y su gobierno extremista han decidido revocar el acuerdo de alto el fuego, exponiendo a los prisioneros en Gaza a un destino desconocido”.
Un funcionario israelí dijo que la nueva ofensiva tenía como objetivo “comandantes militares de rango medio de Hamás, funcionarios de liderazgo y la infraestructura terrorista”.
El funcionario agregó que la campaña “continuará mientras sea necesario y se expandirá más allá de los ataques aéreos”, lo que aumenta las expectativas de una nueva invasión terrestre del territorio destrozado.
Más tarde el martes por la mañana, el ejército israelí instó a los residentes de varias regiones fronterizas de Gaza a evacuar a refugios en las ciudades de Gaza y Khan Younis.
Nada Khashan, de 29 años, del sureste de Gaza, dijo que su familia se estaba preparando para regresar a la franja costera de Mawasi, a seis kilómetros de distancia, donde habían pasado la mayor parte del año pasado viviendo en una tienda de campaña.
“Tenemos miedo del viaje y no sabemos si llegaremos sanos y salvos”, dijo, mientras su familia cargaba una carreta tirada por un burro con sus pertenencias. “A todos los que nos rodean se les ha ordenado evacuar. Es una sensación muy desagradable. Ya nos han desplazado siete veces”.
La ofensiva israelí ha matado a más de 48.000 personas en Gaza, según funcionarios palestinos, y ha provocado una catástrofe humanitaria. El ataque de Hamás contra Israel el 7 de octubre de 2023, que desencadenó la guerra, causó la muerte de 1.200 personas y unas 250 más fueron tomadas como rehenes, según funcionarios israelíes.
Aunque los aliados de extrema derecha de Netanyahu aplaudieron el renovado ataque a Gaza, los políticos de la oposición acusaron al primer ministro de utilizar la operación para distraer la atención de una tormenta política interna por sus planes de despedir al jefe de la agencia de inteligencia doméstica Shin Bet de Israel.
“Los soldados en el frente y los rehenes en Gaza son solo cartas en su juego de supervivencia —Netanyahu está usando las vidas de nuestros ciudadanos y soldados porque tiembla de miedo ante nosotros— de la protesta pública contra el despido del director [del Shin Bet]”, escribió Yair Golan, líder de los demócratas de izquierda, en X.
La tensión se ha intensificado en la región en los últimos días, con el ejército estadounidense atacando objetivos hutíes en Yemen. El gobierno del presidente estadounidense Donald Trump afirmó haber sido consultado por Israel antes de los ataques contra Gaza.
“Hamás, los hutíes, Irán, todos aquellos que buscan aterrorizar no solo a Israel sino también a los Estados Unidos de América, tendrán que pagar un precio”, dijo la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, a Fox News.
La primera etapa de seis semanas del alto el fuego entre Israel y Hamás, que incluyó el regreso de más de 30 rehenes israelíes en Gaza a cambio de la liberación por parte de Israel de unos 1.500 prisioneros palestinos, terminó el 1 de marzo.
Los mediadores internacionales, incluido Estados Unidos, han estado tratando de extender la tregua y lograr la liberación de los 59 rehenes adicionales retenidos por Hamas, de los cuales se cree que aún menos de la mitad están vivos.
Israel y Estados Unidos han exigido la liberación de entre cinco y once rehenes vivos para extender el alto el fuego durante el actual mes sagrado musulmán de Ramadán y la festividad judía de Pésaj del mes próximo.
Hamás declaró la semana pasada su disposición a liberar a cinco cautivos israelíes, de los cuales se cree que solo uno sigue con vida. Israel calificó la oferta de «manipulación», mientras que Steve Witkoff, enviado de Trump para Oriente Medio, la calificó de «totalmente impracticable» y que se había fijado un plazo para que Hamás respondiera de forma más positiva.
A principios de este mes, Israel suspendió todos los envíos de ayuda a Gaza y cortó la última línea eléctrica del enclave. Las autoridades israelíes también han amenazado con cortar el suministro de agua.
Trump advirtió a Hamas a principios de este mes que “ningún miembro de Hamas estará a salvo” y que los habitantes de Gaza estarían “muertos” a menos que el grupo liberara a los rehenes restantes, y agregó que estaba “enviando a Israel todo lo que necesita para terminar el trabajo”.
“¡LIBEREN A LOS REHENES AHORA O SE PAGARÁ UN INFIERNO DESPUÉS!”, dijo.
Tras semanas de retraso, Israel envió la semana pasada un equipo negociador a Doha para las primeras conversaciones desde la llegada de Trump al poder, tras el estancamiento de las conversaciones directas entre Washington y Hamás. Las conversaciones están siendo mediadas por Estados Unidos, Qatar y Egipto.
Netanyahu ha insistido en que no pondrá fin a la guerra hasta que Hamás esté completamente “destruido” y ha prometido asegurar el regreso de todos los israelíes detenidos en Gaza.
En una declaración posterior a los ataques, el Foro de Familias Desaparecidas y de Rehenes, que representa a las familias de rehenes israelíes, dijo que estaba «conmocionado, enojado y temeroso» y acusó al gobierno de Netanyahu de «interrupción deliberada del proceso para regresar a nuestros seres queridos», lo que podría poner en peligro sus vidas.
