Argentina | Leonor Cruz, Secretaria de Géneros y Diversidades de la Central de Trabajadores Argentina Autónoma (CTA-A): “Milei ataca al feminismo y al transfeminismo porque sabe la potencia que tenemos”
Leonor Cruz es Secretaria de Géneros y Diversidades de la Central de Trabajadores Argentina Autónoma (CTA-A) y referente de la Federación Nacional Territorial (FeNaT). En diálogo con NODAL compartió su mirada sobre la situación de las mujeres y diversidades trabajadorxs en Argentina en este 8 de Marzo.
¿Cuál es la situación de las mujeres y diversidades trabajadorxs en Argentina?
Nos han preguntado mucho por qué marchamos y la respuesta se encuentra solamente al mirar las políticas que este Gobierno viene ejecutando. Cómo no salir ante la crueldad de este Gobierno, ante los despidos masivos que viene ejecutando, cómo no salir cuando nos vuelve a plantear arrodillarse ante el Fondo Monetario Internacional, pagar una deuda ilegítima a costa del hambre de nuestro pueblo, a costa de la vida de nuestro pibes y nuestras pibas en los barrios, a costa del genocidio silencioso de nuestros jubilados y jubiladas.
Este 8M, nosotras marchamos por la dignidad. Porque creemos y estamos convencidas que hay otro país posible. Nos negamos rotundamente a que se instale en Argentina un programa político, económico y social que quiso implementarlo y no terminó de hacerlo la dictadura. Nosotras lo decimos fuertemente: este Gobierno es un Gobierno autoritario, es un régimen, es lo más parecido a la dictadura militar, es la dictadura militar encubierta. Milei significa eso.
Nosotras entendemos y sabemos que ese sistema se puede aplicar en la Argentina solamente teniendo como política pública número uno la represión. Ahora, también denunciamos y lo venimos diciendo en todos lados: que es mentira que Milei no tiene políticas. Milei tiene una política muy clara y esta política es achicar el Estado en beneficio de unos cuantos. Achicar el Estado para que los poderosos de la Argentina y los poderosos de multinacionales se lleven los bolsillos llenos, se lleven las riquezas de nuestro país en desmedro del bienestar de nuestro pueblo.
¿Cuáles son las principales iniciativas y qué debates están atravesando en términos organizativos las mujeres y diversidades trabajadorxs en Argentina?
El movimiento feminista y transfeminista tiene un debate y un debate profundo que es justamente la construcción del poder y la acumulación de ese poder: cómo construimos y dónde acumulamos todo este poder que construimos durante décadas y décadas. Milei no ataca al feminismo y al transfeminismo de casualidad. Lo hace porque sabe de la potencia que tiene cuando se une, lo ataca porque sabe que nosotras conquistamos nuestros derechos.
El movimiento sindical feminista es desde la clase y desde la unidad. Nosotras las sindicalistas feministas no somos un apéndice del movimiento obrero organizado, somos columna vertebral del movimiento, siempre estuvimos. A veces invisibilizadas, hoy más visibles. Nuestras demandas no son las demandas de una agenda por fuera, son las demandas del movimiento obrero organizado, son las demandas de las mujeres y diversidades de este pueblo.
Ante el hambre, nuestras compañeras en los barrios no sólo resisten sino que se organizan. Vienen a destruir todo aquello que es colectivo, no es casual tampoco el ataque feroz contra los movimientos sociales y los sindicatos. Ellos quieren destruir todo lo colectivo y todo lo que se organiza porque quieren instalar “el sálvese quien pueda».
Avanzamos mucho en nuestros debates, por ejemplo, nuestra central ATE (Asociación de Trabajadores del Estado) tiene una secretaria general adjunta y una secretaria de género después de 100 años. Nos falta construir mucho hacia adentro pero entendemos que cuando el movimiento en toda su pluralidad, en toda su diversidad se une y sale a las calles nos fortalece también hacia adentro.
Frente al contexto actual, cuando vemos a nuestros pibes y pibas en las esquinas, cuando la droga avanza porque este Gobierno tiene alianzas con el narcotráfico, ante tanta crueldad, tanto hambre, saqueo e indiferencia nosotras venimos a proponer un país más justo, más solidario, con justicia social, pero sobre todo más humano, más feminista, más transfeminista. Creo que todo eso está puesto en juego en este 8M. Todas, todes y todos le vamos a decir que No a Milei para defender la democracia como un valor invaluable en la Argentina.
¿Cuáles son los principales desafíos en el contexto actual?
Las derechas que vienen avanzando en la Argentina y en todo el mundo representan no solo al fascismo sino que son la cara más feroz del capitalismo y del patriarcado. Milei es un simple títere del poder, un títere con motosierra, que a cambio de una foto vende nuestro país.
Tenemos el desafío en relación al poder que acumulamos, todo ese poder de construcción feminista y transfeminista lo debemos convertir en unidad estratégica y programática, en una unidad que vuelva a hablar de derechos, de revolución. Para decir que es mentira lo que intentan instalar sobre que “no hay plata”, que “hay que ajustarse”, que “hay que sufrir para que el país salga adelante”.
Las derechas no nos van a perdonar la Ley de Identidad de Género, el Cupo Laboral Trans, la Ley de Aborto Legal, Seguro y Gratuito. No nos van a perdonar que nosotras dejamos de ser sumisas, que pensamos, que decidimos sobre nuestros cuerpos y nuestras vidas. Sobre eso avanzan. No avanzan sobre el movimiento solamente por la conquista de derechos. Avanzan porque creemos profundamente en un país diferente, que somos dueñas de nuestras vidas y que merecemos un país mejor.
Hoy más que nunca la pobreza tiene rostro de mujer, tiene rostro de diversidad, de niñez. No vamos a permitir que estos dominadores de la muerte vuelvan a aparecer: primero fue Martínez de Hoz, luego fue Menem, después fue Macri y hoy es Milei. Las cuatro M representan Muerte. Nosotras decimos que el movimiento feminista y transfeminista representa la Vida, por eso salimos a las calles con alegría, con color, gritos y canciones. Pero, sobre todo, con convicción y militancia porque nuestro movimiento es por la defensa absoluta de los derechos humanos, es un movimiento de clase, es la unidad de la clase. Somos las herederas de los 30.000, no bajamos las banderas. Milei tiene miedo al movimiento feminista y transfeminista, y hace bien en tenerlo, nosotras hace muchos años perdimos el miedo porque ya no tenemos nada más que perder.