Ecuador en la Encrucijada: Soberanía o Dependencia Geopolítica – Por Verónica Arias Fernández
Ecuador en la Encrucijada: Soberanía o Dependencia Geopolítica
Por Verónica Arias Fernández*
Las relaciones exteriores de Ecuador han estado definidas por dinámicas complejas que reflejan tanto las tendencias globales como las particularidades de su política interna. Las Elecciones Generales de 2025 marcarán el rumbo y la dirección que Ecuador tomará respecto de su política exterior y su visión sobre la justicia global, la soberanía nacional y la integración latinoamericana.
Esto, mientras Ecuador enfrenta un escenario político polarizado, con dos opciones que se encuentran en las antípodas ideológicas: Luisa González y Daniel Noboa. Por un lado, González representa al proyecto progresista impulsado por Rafael Correa, con una visión de soberanía nacional y una política exterior que busca fortalecer el multilateralismo, reposicionando al país andino en organismos como UNASUR y CELAC impulsando la cooperación regional en áreas clave como defensa, salud, educación y seguridad.
En contraposición el candidato Daniel Noboa encarna la dependencia tradicional con Washington que se había mantenido hasta 2006 y que se retomó en el mandato de Lenin Moreno (2017 – 2021). El actual mandatario alineado con las políticas conservadoras y el pragmatismo proempresarial, ha buscado por todos los medios la intención de fortalecer los lazos con Estados Unidos y seguir modelos de gobernanza similares a los de Donald Trump y otros líderes de derecha en la región.
Los años de soberanía
La administración de Rafael Correa (2007-2017) se caracterizó por una política exterior orientada a fortalecer la soberanía ecuatoriana y reducir la injerencia de Estados Unidos en los asuntos internos del país. Su gobierno impulsó una estrategia de diversificación de alianzas internacionales, fomentando la cooperación y la integración regional en organismos como UNASUR y CELAC.
A pesar de su postura crítica hacia la hegemonía estadounidense en América Latina, Rafael Correa nunca rompió relaciones diplomáticas con Washington. Su gobierno mantuvo relaciones de comercio bilateral y ciertos canales de diálogo, aunque bajo condiciones distintas a las tradicionales, marcadas por una mayor autonomía en la toma de decisiones.
Tensiones y desencuentros
Las relaciones diplomáticas entre Ecuador y Estados Unidos en estos años también estuvieron marcadas por tensiones y desencuentros, reflejo de las diferencias ideológicas y las prioridades divergentes de ambos gobiernos durante ese período.
Uno de los puntos álgidos fue la decisión de Correa de no renovar el acuerdo que permitía a Estados Unidos operar desde la base de Manta. El expresidente argumentó que no aceptaría una base extranjera en suelo ecuatoriano sin reciprocidad, sugiriendo irónicamente que Ecuador establecería una base en Miami si Estados Unidos deseaba mantener la suya en Manta.
En 2009, el gobierno ecuatoriano expulsó a dos diplomáticos estadounidenses acusados de interferir en asuntos internos. Y en abril de 2011, Ecuador declaró persona non grata a la embajadora estadounidense Heather Hodges.
En 2012, el gobierno de Rafael Correa otorgó asilo político a Julian Assange en la embajada de Ecuador en Londres, desatando tensiones con Estados Unidos. La decisión se produjo por la evidente persecución política y la posibilidad de que Assange perdiera la vida.
Washington reaccionó con presiones diplomáticas. El asilo duró casi siete años, hasta que finalmente, en 2019, el gobierno de Lenín Moreno retiró la protección, permitiendo su arresto y evidenciando el giro en la política exterior del país.
El regreso de la soberanía y la creación del Banco del Sur
El plan de política exterior de la candidata progresista Luisa González se enfoca en fortalecer la soberanía de Ecuador y consolidar la integración. Para ello, busca impulsar la Nueva Arquitectura Financiera Regional, que incluye la creación del Banco del Sur, el Fondo de Reservas del Sur y un sistema de pagos regional, con el objetivo de reducir la dependencia de organismos financieros tradicionales, fomentando la cooperación económica entre países latinoamericanos.
Una de sus propuestas centrales, también es el restablecimiento de los lazos diplomáticos entre Ecuador y México, que se rompieron desde abril de 2024 luego de la invasión a la Embajada de México en Quito y la agresión por parte de fuerzas policiales al personal diplomático mexicano.
El pequeño Trump
El presidente – candidato Daniel Noboa, ha mostrado una notable inclinación por parecerse al presidente estadounidense Donald Trump, lo que se refleja en varias de sus acciones.
En enero de 2025, Noboa asistió a la ceremonia de investidura de Donald Trump en Washington D.C., recalcando la idea de que era el primer mandatario ecuatoriano en participar en tal evento. Esta asistencia fue destacada por su administración como un hito en la política exterior de Ecuador.
A diferencia de líderes latinoamericanos como Gustavo Petro, Luiz Inácio Lula da Silva y Claudia Sheinbaum, quienes han abogado por el respeto y la protección de los derechos de los migrantes, Noboa ha elogiado con aplausos las deportaciones masivas de migrantes latinoamericanos impulsadas por Trump. Esta postura ha generado críticas, especialmente en un contexto donde la migración es un tema sensible en la región. Por el contrario, su oponente política, Luisa González en una posición alineada con la de los mencionados líderes, ha manifestado que de llegar a la presidencia, abogará por políticas que protejan los derechos de los migrantes.
Hace pocos días Noboa, imitando las acciones adoptadas por Trump, anunció la imposición de un arancel del 27% a las importaciones provenientes de México, argumentando la necesidad de promover la industria local y asegurar un trato justo para los productores ecuatorianos. Sin embargo, esta medida afecta directamente al ya empobrecido pueblo ecuatoriano, que deberá asumir un arancel adicional en el costo de las medicinas importadas desde México.
Respecto a la imposición de aranceles, Claudia Sheinbaum minimizó el hecho y la prensa mexicana se burló de la actitud de Noboa.
Noboa ha tradado de emular el estilo confrontativo de Donald Trump en pleno proceso electoral. Al adoptar estas posturas busca consolidar el apoyo de su base electoral conocida en Ecuador como el «anticorreísmo», un sector que rechaza cualquier orientación progresista y respalda enfoques conservadores en materia económica, migratoria y diplomática.
*Verónica Arias Fernández, abogada y política ecuatoriana es actualmente Parlamentaria Andina en representación del Ecuador. Fue Asambleísta de la República en dos periodos: 2013-2017 y 2017-2021. Fue vicepresidenta de la Comisión de Enmiendas Constitucionales de la Asamblea Nacional y presidenta de la Comisión de Economía del Parlamento Andino.