México | AMLO y los desafíos de una probable continuidad – Por Matías Caciabue y Paula Giménez

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Los conceptos vertidos en esta sección no reflejan necesariamente la línea editorial de Nodal. Consideramos importante que se conozcan porque contribuyen a tener una visión integral de la región.

En una situación de estabilidad y crecimiento económico que repercute positivamente en la imagen del lopezobradorismo hacia en interior del país, como por el rol regional que ha desempeñado Andrés Manuel Lopez Obrador (AMLO) en la región, sin embargo teñido por la violencia política, el impacto del narcotráfico y los debates sobre la realidad de las y los migrantes en la región, México elegirá el 2 de junio su próxima presidenta, sus diputadas/os y sus senadoras/es. En medio de un clima político enrarecido y a tono con la compleja realidad de la región, las y los mexicanos decidirán qué proyecto conducirá los destinos no sólo del gigante azteca, sino también el impacto que esto tendrá en la región.

El país latinoamericano atravesado por problemáticas globales

Desde septiembre de 2023 a febrero de este año hubo, según la consultora Integralia, 182 incidentes de violencia política, asociados a 238 víctimas donde se encuentran implicados funcionarios, ex funcionarios, políticos, ex políticos, aspirantes a cargos de elección, familiares y víctimas colaterales. El disciplinamiento mediante los hechos de violencia, repetidos en la región, resultan vivencias cotidianas en la realidad mexicana y particularmente para las y los actores de la esfera política que se encuentran en campaña de cara a las elecciones del 2 de junio.

Al problema de la violencia política en el país se suman el narcotráfico y la migración como temáticas que han marcado el pulso de la agenda nacional y del gobierno de MORENA, que finalizará su sexto año de mandato presidencial.

A lo largo de su gestión el presidente AMLO ha intentado llevar adelante políticas migratorias de flexibilización, debido al aumento del pasaje terrestre desde Centroamérica y el caribe hacia Estados Unidos (EE.UU), generando espacios de diálogo y coordinación. El 28 de diciembre del año pasado, AMLO se reunió con el presidente estadounidense Joe Biden y acordaron crear un grupo de trabajo y reuniones periódicas por esta problemática. En la misma línea, en el mes de febrero de este año le presentó un decálogo proponiendo, entre otros puntos, aprobar un presupuesto de veinte mil millones de dólares anuales para apoyar a países pobres de América Latina y el Caribe, suspender sanciones a Venezuela, levantar el bloqueo a Cuba y mantener el programa de recepción de migrantes por vías legales implementado por el actual gobierno de Estados Unidos, haciendo especial hincapié en dejar fuera aquellas propuestas que se vinculan con la construcción de muros y cierre de fronteras, que fueron un eje central durante el trumpismo.

En la dirección contraria, hace pocos días, el gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, promulgó una ley que permite que la policía detenga a los migrantes que cruzan de manera ilegal la frontera de Estados Unidos y, otorga a los jueces locales la autoridad para dar la orden a los migrantes de abandonar el país vecino y enviar a 20 años de prisión a una persona que reincida. Frente a las propuestas de legislación del país vecino AMLO declaró desde su posicionamiento de respeto a las y los migrantes, que: “se está haciendo un trámite en Relaciones Exteriores para impugnarla” y dijo “nosotros vamos a estar siempre en contra de estas medidas” resaltando la necesidad de “decirle a nuestros paisanos y a nuestros migrantes que vamos a estarlos defendiendo.”

Además de los conflictos con la migración, el narcotráfico forma parte de las problemáticas del país, al igual que en el resto de muchas de las naciones latinoamericanas. En particular, en este territorio los problemas con el narcotráfico se remontan a la década del ´60 con la aparición de los carteles para la venta de sustancias y la feroz disputa por el control del territorio. Como sucede en otros países de la región, este flagelo social no es aislado sino que tiene incidencia en el ámbito educativo, la pobreza, la seguridad y las redes de crimen organizado contra los sectores empobrecidos y las/os actores políticos.

La violencia trasciende todos los colores políticos y a varios niveles de gobierno, pero se concentra con mayor fuerza en los ámbitos locales. En este sentido, Chiapas podría ser considerado una de las zonas del centro sur que se ha constituido en un territorio para el secuestro y las extorsiones a migrantes, siendo el recrudecimiento de la violencia una necesidad de los grupos por influir en la política local para afianzar el control del territorio.

Los hechos de violencia vinculados con la problemática del narcotráfico generan un desgarramiento del tejido social y se evidencia con mayor fuerza en el sector de la prensa, las mujeres de los barrios y la marginalidad de la sociedad mexicana. Ejemplo de ello es que ya en el 2021, 3.462 mujeres resultaron asesinadas, generando un promedio de más de 10 mujeres al día, siendo de ese total, 2540 víctimas de homicidio doloso, y 922 de feminicidio.

El país azteca tiene una frontera compartida de 3.141 kilómetros que históricamente ha constituido una de las rutas de contrabando más activas del mundo, representando según datos de la ONU, un movimiento de entre 170 y 320 millones de dólares en 2022 en el mercado ilícito de armas que representa entre el 10% y el 20% del mercado lícito. En este sentido, cada año, más de 200.000 armas de todo tipo ingresan ilegalmente al país desde Estados Unidos. De hecho, cerca del 70% de los asesinatos en México se cometen con armas de fuego, y la mayoría de estas armas provienen de armerías estadounidenses. El problema radica en la incapacidad de frenar este flujo de armas y evitar su comercialización ilegal en las grandes ciudades y centros rurales. La vinculación entre el narcotráfico y la violencia en el país es y será uno de los grandes desafíos para la política mexicana.

Según el medio Statista, México se ubica junto con Brasil como las mayores economías de América Latina y el Caribe, según el producto interno bruto (PIB) registrado en 2023. En Brasil la cantidad de bienes y servicios producidos alcanzó un valor estimado de 2,08 billones de dólares estadounidenses, mientras que el PIB de México ascendió a 1,66 billones de dólares.

En términos comerciales México fue noticia en el mes de febrero ya que fue la primera vez en 20 años que EE.UU. le compró más a México que a China. Es decir que, en 2023, México se convirtió en el país al que EE.UU compró más bienes y servicios superando así a China. En relación a los vínculos de México con China, la balanza comercial ha sido negativa en los últimos 30 años, producto de un bajo nivel de exportaciones de tipo primario y un elevado nivel de importaciones. Sin embargo, las empresas chinas con presencia internacional establecidas en México se destacan en los sectores de logística y distribución, telecomunicaciones, servicios financieros, automotriz, electrónico, de autopartes, insumos médicos y manufactura, por mencionar algunos.

En vínculos con ambos centros de poder (China y EEUU) que se encuentran en la disputa por las riquezas del mundo, México se configura como un actor central en la región para abonar al despliegue y poder de fuego económico de uno u otro proyecto en América Latina.

El Termómetro electoral en México

El 2 de junio más de 99 millones de mexicanos se encontrarán convocados a elegir quién conducirá los destinos de su patria. A dos meses del acto eleccionario, la gran mayoría de las encuestas dan por ganadora a Claudia Sheinbaum, por más de 20 puntos. La candidata de la alianza entre Morena, Partido del Trabajo (PT) y Partido Verde Ecologista de México (PVEM) es egresada de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) en el área de las ingenierías y desarrolló su carrera laboral en el Banco de México y en el Banco Santander.

Sheinbaum es la representante de la 4T (Cuarta Transformación de México), el proyecto Lopezobradorista, que ha sacado a más de 5 millones de personas de la pobreza, ha promovido el aumento del salario mínimo e implementó una pensión universal que alcanza a 12 millones de adultos mayores, garantizó un crecimiento económico del 3% a pesar de la Pandemia y mantiene estable y sólido respecto del dólar al peso mexicano. Ningún dato menor a la hora de perfilarse como la preferida de la opinión pública.

La candidata de AMLO se convirtió, en el 2018, en la primera mujer en ser electa como Jefa de Gobierno de la Ciudad de México donde disminuyó los delitos de alto impacto en 60% y los homicidios dolosos en 50%. En sus redes sociales se define como “científica, humanista, con profundo amor a mi patria y a mi pueblo”. Actualmente con el total apoyo de AMLO y también de las encuestas, la candidata propone como ejes de campaña: el cuidado del agua, el rescate del sector energético de México, la federalidad, la continuidad de los programas para pequeños productores, entre otros.

En oposición a la candidata de Morena, se ubica en segundo lugar en las encuestas la candidata de la coalición Fuerza y Corazón por México, Xóchitl Gálvez Ruiz. Esta coalición está conformada por los conservadores Partido Acción Nacional (PAN), el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el Partido de la Revolución Democrática (PRD) para la Presidencia de la República. La candidata también estudió ingeniería en la la UNAM y desarrolló su carrera en el ámbito privado a través de su empresa Consultoría High Tech Services. Como parte de su carrera política, en 2003 fue nombrada titular de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas y en 2018 ganó un escaño en el Senado de México por un periodo de 6 años.

Xóchitl Gálvez Ruiz se define en sus redes sociales como mamá, ingeniera, tecnóloga y empresaria y sus principales ejes de campaña son: “el abrazo a los ciudadanos y no a los delincuentes”, y el crecimiento y desarrollo de infraestructura, transporte público, energía, salud y agua, entre otras.

Con gran diferencia en las encuestas, el tercer lugar estaría ocupado por el candidato a presidente Jorge Álvarez Máynez quien encabeza el Movimiento Ciudadano (MC). El candidato se caracteriza por haber participado en al menos cuatro partidos en los últimos veinte años. En el año 2010 siendo diputado de Zacatecas se integró al Partido Revolucionario Institucional (PRI) y tres años después, llegó a Movimiento Ciudadano.

A dos meses del acto eleccionario y con una gran tendencia en las encuestas de que quien continúe en la gestión del país sea la candidata de Morena, AMLO decidió llevar al Congreso y a la discusión pública 20 proyectos de reformas de la constitución entre los que considera por ejemplo: el reconocimiento de las comunidades indígenas como sujetos de derechos; el derecho a la pensión a partir de los 65 años; garantizar la atención médica integral gratuita, la prohibición del maíz transgénico y el fracking, salario mínimo para maestros, policías, marinos, elección ciudadana de magistrados y consejeros de organismos electorales, entre otros puntos controversiales.

En el resultado electoral se vislumbrará también el camino que tomen las relaciones internacionales con su país vecino Estados Unidos y sus vínculos con el gigante Chino. Así también será fundamental el lugar que ocupará México en la conformación y el desarrollo del bloque progresista en una región latinoamericana que se encuentra atravesada por gobiernos conservadores con modelos de securitización y en detrimento del estado. En un contexto con grandes probabilidades para Claudia Sheinbaum, resultará una gran tarea el abordaje de temáticas como la migración, la violencia y el narcotráfico, sin dejar de lado la realidad económica de la población y los acuerdos económicos de México con el mundo.

El Destape

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