Luis Arce propone ampliar la lucha contra el narcotráfico hacia los demás países
Arce propone regionalizar la lucha contra el narcotráfico
El presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, Luis Arce, propuso que la lucha contra el narcotráfico ya no debe ser local, sino que debe regionalizarse para tener mejores resultados, ya que ese flagelo azota a la sociedad y a todo el continente americano.
“Esta lucha no solo puede ser concebida nacionalmente, sino debe tener un contexto de alcance internacional y de compromisos compartidos y soberanos. Hay que caminar hacia la regionalización con soberanía en la lucha contra el narcotráfico”, dijo la autoridad.
La historia de #Bolivia🇧🇴 no puede explicarse sin sus FFAA, cuya lucha hizo posible la declaración de nuestra Independencia. Hoy tienen la tarea de cuidar las fronteras, luchar contra el contrabando y precautelar nuestros recursos naturales.
¡Felicidades, en su 198 aniversario! pic.twitter.com/2NoOcoGatW— Luis Alberto Arce Catacora (Lucho Arce) (@LuchoXBolivia) August 7, 2023
Arce indicó que este ilícito está presente en la mayoría de los países y reconoció que es una problemática sensible que atenta contra la seguridad interna de los Estados y, sobre todo, llega a afectar profundamente los cimientos sociales.
El narcotráfico es una preocupación latente para el Gobierno y tiene una antigua data. En ese entendido, el Jefe de Estado hizo un repaso de los hechos más significativos relacionados con este ilícito que corrompe instituciones y personas.
El ejemplo más paradigmático que citó es la “narco-dictadura” de Luis García Meza y Luis Arce Gómez, instituida en julio de 1980. Un segmento de las Fuerzas Armadas se vio corrompido por el negocio millonario del tráfico de cocaína, combinando el uso atrabiliario de la fuerza y la promoción del narcotráfico.
“Esto ocasionó un tremendo daño para la imagen de Bolivia, que se vio catalogada como un país insostenible debido a la penetración de asociaciones criminales en el seno del Estado”, lamentó.
Entre 1979 y 1980 apareció Roberto Suárez Gómez, potentado narcotraficante que llegó a vincularse con el Cártel de Medellín, dirigido por Pablo Escobar. Suárez, apodado el ‘Rey de la Cocaína’, se vio inmiscuido con varios políticos bolivianos a quienes colaboró a cambio de brindarles protección e impunidad.
Durante el gobierno de Paz Estenssoro, el científico Noel Kempff Mercado fue asesinado por grupos armados del narcotráfico cuando emprendía una expedición, en 1986.
“El crimen destapó el escándalo de Huanchaca, una megafábrica de cocaína internalizada en el oriente boliviano. Las autoridades gubernamentales de aquel entonces fueron sindicadas de encubrir el funcionamiento de esta gigantesca fábrica de droga”, recordó.
En la gestión de gobierno de Jaime Paz Zamora también relucieron casos pomposos de narcotráfico. El país conoció las relaciones que tenía la cúpula dirigencial del MIR con reconocidos narcotraficantes como Isaac ‘Oso’ Chavarría y Carmelo ‘Meco’ Domínguez, en 1994. Los denominados “narco-vínculos” develaron una red criminal que apoyaba financieramente al MIR, a partir de las ganancias del tráfico de drogas.
Otro escándalo de narcotráfico fue el denominado ‘narco-avión’, en el primer gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada, en 1996. Una aeronave fue interceptada en la ciudad de Lima, Perú, con una carga de cuatro toneladas de cocaína. El dueño de la droga era Amado Pacheco, alias ‘Barbaschocas’, un peligroso narcotraficante ligado con la mafia mexicana.
“Como podemos corroborar, el narcotráfico estuvo inmerso en las esferas de la política boliviana dejando saldos desastrosos para nuestro país. Hoy este delito debe ser entendido y combatido desde una perspectiva regional, tal como lo mencioné en la Organización de las Naciones Unidas, en 2022”, resaltó.
Indicó que aunando esfuerzos internacionales y regionales entre las fuerzas del orden y la sociedad civil, se podrá combatir contra ese delito que afecta el bienestar social y la soberanía nacional.
“Esta lucha no solo es del Gobierno, sino debe ser del Estado en su conjunto, y por eso la importancia de la participación de todos y todas, desde el lugar que ocupemos en la sociedad, convirtamos la lucha contra las drogas en una tarea cotidiana. Solo así podremos vencer este flagelo al interior de nuestras fronteras”, finalizó Arce.
