Promiscuidad obscena en Lava Jato – Por Jeferson Miola
Los conceptos vertidos en esta sección no reflejan necesariamente la línea editorial de NODAL. Consideramos importante que se conozcan porque contribuyen a tener una visión integral de la región.
Promiscuidad obscena en Lava Jato
Por Jeferson Miola*, especial para NODAL
Aunque más lento que rápido, la verdad sobre el gangsterismo de los miembros de Lava Jato está saliendo a la luz. Poco a poco se van descubriendo nuevas capas de obscena promiscuidad entre jueces, magistradas, fiscales y policías federales que formaron parte del operativo encabezado por el sospechoso exjuez y ahora senador de extrema derecha Sérgio Moro -quien el ministro Gilmar Mendes, de la Supremo Tribunal Federal (STF), considerada una organización criminal.
Además de la connivencia de funcionarios públicos de la alta aristocracia estatal con los medios hegemónicos, la operación también estuvo impulsada por vínculos corporativos, amistad, amiguismo y parentesco entre autoridades públicas y con agentes privados.
Son notorios los casos de estrecha amistad, lazos familiares e identidad política entre fiscales, policías federales, jueces y abogados.
El exfiscal federal y ahora diputado federal ultraderechista Deltan Dallagnol, por ejemplo, ideó una fundación privada controlada por miembros de Lava Jato para recibir seis mil millones de reales malversados de Petrobras.
Con el espíritu emprendedor de quien ya había invertido con éxito en bienes raíces del programa social Minha Casa Minha Vida, Deltan también planeó crear una empresa de charlas sobre el combate a la corrupción con su colega de la PGR Roberson Pozzobon. Ejemplos típicos de buenos ciudadanos y predicadores de falsa moral, naturalmente pensaron en poner a sus respectivas esposas como “naranjas” en el negocio.
El abogado Rodrigo Castor de Mattos, hermano del fiscal Diogo Castor de Mattos, abogó por Lava Jato imputado denunciado por su propio hermano!
Cabe recordar que el fiscal Diogo fue despedido del MPF en 2021 por haber contratado la instalación de una valla publicitaria cerca del aeropuerto de Curitiba con las palabras: “Bienvenidos a la República de Curitiba – tierra de la Operación Lava Jato – la investigación que cambió el país . Aquí se cumple la ley” [sic].
A pesar de ello, Diogo sigue cobrando un sueldo abultado, porque se beneficia precisamente de ese principio que tanto luchó en relación con los “enemigos”: la decisión final e inapelable.
Los hermanos Castor de Mattos son primos del subfiscal de la República del TRF4 Maurício Gotardo Gerum, que no tuvo escrúpulos y actuó en el caso para aumentar la pena del presidente Lula en casos fabricados por Lava Jato.
El abogado Carlos Zucolotto Júnior, socio de Rosângela Moro en un estudio de abogados y padrino de la boda de la pareja Moro, cobró 5 millones de dólares en sobornos de Rodrigo Tacla Duran para facilitar un acuerdo de adjudicación que sería confirmado con una persona identificada como “DD” – iniciales de Deltan Dallagnol.
Moro y Deltan huyen del testimonio de Tacla Durán como huye el diablo de la cruz. Para evitar que Tacla Duran compareciera ante el tribunal y declarara en la PF para entregar las pruebas de la propuesta de soborno que le ofreció Carlos Zucolotto, el exjuez sospechoso Sérgio Moro fue salvado por el juez del TRF4 Marcelo Malucelli, quien falsificó una orden de aprehensión de Tacla Durán.
Sin embargo, el juez nunca podría haberse hecho cargo del caso, ya que su hijo, el abogado João Eduardo Barreto Malucelli, además de ser socio de la pareja Moro en un estudio de abogados, también es yerno de Sérgio y Rosângela Moro. Entonces todo en casa.
Con la destitución del juez Malucelli, no sin perturbar el proceso y dilatar el testimonio de Tacla Duran, la jueza Loreci Flores asumió la relatoría Lava Jato en el TRF4.
Para no escapar a la regla de la promiscuidad obscena en Lava Jato, la jueza Loreci es hermana del delegado de la PF Luciano Flores, responsable de la absurda conducta coercitiva de Lula en marzo de 2016 y de las grabaciones ilegales de doña Marisa.
Loreci, además, llenó su oficina de TRF4 con exasesores de confianza de Sérgio Moro, quienes trabajaron con el presunto exjuez cuando estaba a cargo del 13º Tribunal Federal de Curitiba.
Comparada con la conducta abiertamente ilegal de los dos jueces del TRF4, la jueza Gabriela Hardt hasta parece una santa.
No es casualidad que la llamada operación Lava Jato sea considerada por la prensa internacional como el mayor esquema de corrupción judicial de la historia.
*Miembro del Instituto de Debates, Estudios y Alternativas de Porto Alegre (Idea), fue coordinador ejecutivo del V Foro Social Mundial. Colaborador del Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la)