La amenaza mafiosa a Messi expuso el problema del narco en Rosario y se coló en la campaña
El ataque a Messi expuso ante el mundo el problema narco en Rosario y se metió en el barro de la campaña
Por Jonathan Heguier
Trece palabras, catorce balazos y el protagonismo excluyente de Lionel Messi. Así se expuso ante el mundo el problema narco en Rosario y se metió en el barro de la campaña, en medio de un 2023 convulsionado por el plano electoral.
«La crisis de seguridad que desangra la ciudad de Rosario, al noroeste de Buenos Aires, en la provincia de Santa Fe, ha alcanzado a su ciudadano más ilustre» y «Rosario es considerada la ciudad más castigada por la violencia en Argentina, golpeada por hechos de inseguridad por la acción de bandas de narcotraficantes», son algunos de los párrafos más contundentes sobre la crisis que vive esa ciudad. Así lo retrataron los diarios El País y ABC de España.
El ataque al reciente campeón del mundo fue titular y portada de todos los grandes medios internacionales, perturbados por la balacera al supermercado propiedad del padre de la esposa de La Pulga, Antonela Roccuzzo, y por el mensaje mafioso contra Lio: «Messi, te estamos esperando. Javkin también es narco, no te va a cuidar».
Pablo Javkin es el intendente de Rosario que tras conocerse lo sucedido habló telefónicamente con el presidente de la Nación, Alberto Fernández, para intercambiar información sobre el hecho, otro más en esa ciudad y ahora con una de las personas más conocidas del planeta en el medio. Luego, el jefe comunal hizo declaraciones públicas que generaron malestar en el Gobierno.
La relación entre Nación y Javkin transitan un mal momento. «Alberto habló con él antes de que saliera a decir boludeces», dijo a El Destape una fuente del riñón del mandatario. Una frase que grafica cómo está el contacto entre ambos. De hecho, desde Casa Rosada salieron a cruzar la versión del intendente, que había asegurado que le pidió al Presidente que fuera a Rosario. «No dijo nada de lo que dijo públicamente media hora después», respondieron en Presidencia.
Es parte de la tensión que vive el Gobierno con el tema narco y que se acrecienta ante cada hecho nuevo en esa ciudad. En el medio, la cuestión se mete de lleno en una campaña que no arrancó pero en la previa ya se vislumbra que será un tópico primordial de cara a las plataformas de cada candidato.
Pasadas las horas, Alberto salió a adelantar que “evidentemente algo más habrá que hacer», y analizó: “El problema de la violencia y del crimen organizado es muy serio. Hay que hacer algo por los rosarinos y por los santafesinos porque son argentinos”, dijo en un acto en Salta.
Minutos antes, Aníbal Fernández había desplazado al coordinador del Comando Unificado de las fuerzas federales en Rosario. “Voy a reemplazar al titular con el comandante José Mario. El comandante general (Ricardo Daniel) Castillo va a seguir con la región. Nosotros con Mario seguiremos profundizando el rol de las fuerzas”, explicó el ministro. Y adelantó que esta semana «muchas cosas que estábamos haciendo de una manera y las vamos a trabajar mucho más profundo, más fuerte y con más personal”. En el medio, reconoció: «Los narcos han ganado».
Del otro lado, se juega a dos puntas. El ala más extrema de Juntos por el Cambio, liderada por Patricia Bullrich, criticó al Gobierno y pidió la renuncia de Aníbal Fernández pero además se juega la interna propia. El bullrichismo busca matices y trata de diferenciarse de las posturas (que el ala dura denomina «blandas») del larretismo. Esta vez intervino Mauricio Macri, aunque no tomó partido en una discusión entre los dos bandos que ya lleva varios días.
Mientras la presidenta del PRO pide a las Fuerzas Armadas en Rosario para militarizarla, Larreta las quiere usar para las fronteras. El debate interno lleva días y sube la tensión en el macrismo. «Lo dije en Rosario: hay que usar todas las fuerzas para recuperar la ciudad del dominio narco. Pensar que algunos todavía se niegan a hacerlo» fue el mensaje de la precandidata presidencial Bullrich contra el alcalde. Y tras el caso Messi siguió: «No hay lugar para soluciones a medias y respuestas graduales», escribió la exministra de Seguridad del Gobierno de Cambiemos.
Tanto oficialismo como oposición y sus líneas internas ya muestran parte de cómo intentarán armar un discurso sobre el drama del narcotráfico en Rosario de cara a los meses que viene y mientras se discuten candidaturas.
Horas antes del caso Messi, el Presidente había tocado el tema en la apertura de sesiones ordinarias en el Congreso. Nombró la palabra «Rosario» una sola vez en sus casi dos horas de discurso. Pero usó un tramo para responsabilizar a la Corte Suprema por los hechos de violencia en esa ciudad.
«Si la Corte Suprema no hubiera tomado por asalto al Consejo de la Magistratura, hoy Santa Fe no estaría padeciendo la carencia de tribunales que impiden enjuiciar con rapidez al crimen organizado que se ha expandido en su territorio. ¿Quiénes son los responsables de que el Consejo de la Magistratura no funcione hace un año? ¿Quiénes atropellan a las instituciones republicanas? Lamentablemente, el accionar de los miembros de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, nos llevó a presentar un pedido de juicio político», fue uno de los pasajes más duros de Fernández contra el máximo tribunal.
Sobre este ítem fue que hizo énfasis el Frente de Todos tras el ataque a Messi. Por un lado, el presidente de la Comisión de Justicia de la Cámara de Diputados, Rodolfo Tailhade, convocó para el miércoles próximo a las comisiones de Justicia y de Legislación Penal para tratar el proyecto de fortalecimiento de la Justicia Penal Federal en la provincia de Santa Fe, que servirá para la creación de 13 cargos de fiscal federal, 4 defensorías y 6 juzgados federales en distintas ciudades de la provincia. Y por otro lado, Aníbal Fernández se reunió con la Asociación de Magistrados y Funcionarios de la Justicia Nacional (AMFJN) para que se arme una mesa de diálogo para abordar la crisis en la ciudad santafesina.
Apuntado por el Presidente, Horacio Rosatti fue blanco de las críticas en la apertura de sesiones en el Congreso. El presidente del Consejo de la Magistratura de la Nación que también es titular de la Corte Suprema de la Nación estuvo presente en el recinto junto a su compañero en el tribunal, Carlos Rosenkrantz. Fueron los únicos dos cortesanos presentes. Y escucharon los argumentos del juicio que se lleva adelante en ese mismo lugar.
Rosatti, oriundo de Santa Fe, también reaccionó tras la balacera al supermercado de los Roccuzzo. Junto al juez de la Cámara Federal rosarina, Aníbal Pineda, acordaron la instalación de videocámaras de alta complejidad en los Tribunales Federales de Rosario.
El Poder Judicial también estará en la mira en medio de los casos de violencia narco Rosario que conmueven al país y ahora también pasan las fronteras para ocupar los portales y diarios del mundo, que si en diciembre del año pasado describían a esa ciudad como la cuna del astro futbolístico que ganó la Copa del Mundo ahora además le sumarán este capítulo áspero. Así, Rosario será uno de los epicentros del barro de la campaña electoral que se viene en 2023.
La amenaza mafiosa a Messi en Rosario movió el arco del debate
Por Melisa Molina
Las amenazas que sufrió el futbolista Lionel Messi, mediante un mensaje mafioso dejado en la puerta de un supermercado de la familia de su mujer, Antonela Roccuzzo, pusieron en el primer plano internacional la situación de violencia y crimen organizado que viven la provincia de Santa Fe y, en particular, la ciudad de Rosario. Desde el gobierno nacional rápidamente salieron a repudiar lo sucedido, hubo múltiples reuniones de funcionarios y se tomaron medidas para tratar de contener la situación.
El presidente Alberto Fernández, durante un acto que encabezó en Salta, dijo sobre el tema: «Amanecí con una noticia muy fea. Me comuniqué enseguida con el intendente (Pablo Javkin), y con el jefe de Gabinete. Estamos haciendo mucho, pero evidentemente algo más habrá que hacer. El problema de la violencia y del crimen organizado en Rosario es muy serio”.
La primera medida tomada por el Gobierno fue cambiar al titular del comando unificado de las fuerzas federales en Rosario, Ricardo Castillo, por el comandante de Gendarmería José Mario. También se acordó que, desde el Poder Legislativo, el presidente de la Comisión de Justicia de la Cámara de Diputados, Rodolfo Tailhade, convocará para el próximo miércoles una reunión para tratar el proyecto de fortalecimiento de la Justicia Penal Federal en la provincia de Santa Fe. Por último, el gobierno nacional recordó que la semana pasada modificó el decreto reglamentario de la Unidad de Información Financiera (UIF) con el el fin de permitir la creación de más delegaciones del organismo, con lo cual Rosario podrá tener una oficina, tal como había pedido el gobernador, Omar Perotti.
Los hechos en el súper de Roccuzzo
En la madrugada del jueves, un supermercado de Rosario que pertenece a la familia de Roccuzzo fue baleado por dos hombres: dispararon catorce tiros desde una moto. En el lugar, además, dejaron una amenaza por escrito: «Messi te estamos esperando. Javkin es narco, no te va a cuidar». El titular de la Fiscalía Regional de Rosario, Federico Rébola, que tiene a su cargo la investigación, dijo que «por ahora nada indica que querían amenazar a la familia», y que «el primer objetivo de los que hicieron esto fue que se entere todo el mundo».
Según una hipótesis que manejan desde las oficinas de Inteligencia Criminal, el ataque podría tener que ver con un conflicto vinculado a las barras del club Newell’s. «No pareciera ser un mensaje contra Messi, sino contra Javkin», arriesgaron quienes conocen parte de la investigación.
El impacto en el Gobierno
Tras conocerse los hechos, las reuniones y el diálogo entre funcionarios del gobierno nacional, provincial y municipal fueron permanentes durante la jornada. Por la mañana, el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, se reunió en su despacho con el comandante general de gendarmería, Andrés Severino; la secretaria de Seguridad Interior, Mercedes La Gioiosa; y su jefe de Gabinete, Lucas Gaincerain.
El ministro y el Presidente también hablaron entre ellos, con el jefe de gabinete, Agustín Rossi, y con el intendente de Rosario –horas después Javkin salió a cuestionarlos por los medios de comunicación y más tarde volvió a llamar al Presidente para bajar el tono de sus dichos–. Mientras tanto, los funcionarios nacionales se comunicaban con el comandante Castillo, quien hasta ahora tenía a cargo la región dos, incluyendo las ciudades de Santa Fe y Rosario.
En esas reuniones hicieron una evaluación de la situación y analizaron posibles medidas. En principio, definieron que el que va a viajar a Rosario y va a ser el enlace político con Gendarmería y las fuerzas de Seguridad es Gaincerain. Además de ser el segundo de la cartera de Seguridad, es quien maneja el presupuesto del ministerio. Pusieron al tanto a Alberto Fernández y quedaron en evaluar más medidas para los próximos días. «El Presidente, el gobernador, los ministros y el intendente están trabajando en el tema, que tiene la repercusión que tiene porque los involucrados son Messi y Antonela, no porque sea lo más grave que ha pasado en Rosario el último tiempo», aclararon cerca del mandatario.
Las palabras de Aníbal Fernández
«Hace 20 años que existe esta situación. Los narcos han ganado, pero ahora hay que revertirlo», advirtió el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández. En esa línea, sostuvo que «desde el primer momento estamos con más de 4500 efectivos allí e invirtiendo dinero para tratar de revertir la situación. Ese es el camino». Fernández resaltó que durante 2022 hubo 2077 detenidos y dijo «es una situación severa en la que hay que meterse a fondo y nosotros estamos dispuestos a hacerlo».
El intendente Javkin rápidamente intentó despegarse del tema. Aseguró que había hablado con el ministro de Seguridad y con el gobernador. «Yo los quiero acá. ¿El Presidente a cuánto está de acá? ¿a media hora? Los quiero a todos acá. Vamos a poner las cosas en claro: no manejo las fuerzas de seguridad y cuando pedí no me mandaron», dijo con un tono elevado.
Desde Casa Rosada aclararon que Javkin estuvo reunido con el Presidente la semana pasada y que ayer por la mañana, media hora antes de decir lo que dijo, había hablado con él y no le pidió que fuera a la ciudad. Especificaron que, al contrario, habían intercambiado información sobre las posibles causas de lo sucedido y que Javkin «estuvo muy agradecido por todo lo que está haciendo Nación». Horas más tarde, según contaron en Casa Rosada, el intendente volvió a comunicarse con el Presidente y le pidió disculpas, dijo que las declaraciones «fueron sacadas de contexto».
De todos modos, Aníbal Fernández cuestionó a Javkin: «El intendente de una ciudad de una provincia tiene que hablar con la gente de la provincia», apuntó. Por la noche, el gobernador Omar Perotti mantuvo una reunión de la Junta Provincial de Seguridad y luego, rechazó las expresiones de Fernández. «Es una situación que podemos superar y Rosario siempre va a estar en manos de rosarinas y rosarinos de buena fe y no en manos de cualquiera de estas lacras que cotidianamente amenazan la tranquilidad y la convivencia».
Fortalecer la Justicia
Mientras desde el Ejecutivo se analizaban medidas y posibles salidas a la crítica situación, desde el Poder Legislativo también el oficialismo resolvió intervenir. El presidente de la Comisión de Justicia de Diputados, Rodolfo Tailhade, convocó para el miércoles que viene a las 11 una reunión de las comisiones de Justicia y Legislación Penal para tratar el proyecto de fortalecimiento de la Justicia Penal Federal en Santa Fe. Esa iniciativa había sido una propuesta de diputados de distintas fuerzas políticas de la provincia. El objetivo del proyecto es crear trece cargos de fiscal federal, cuatro defensorías y seis juzgados federales en distintas ciudades. Además de crear seis cargos de juez penal federal con funciones de revisión.
En paralelo, el ministro de Seguridad se reunió con la Asociación de Magistrados y Funcionarios de la Justicia Nacional, que le pidió que el gobierno arme una mesa de diálogo con representación de jueces y fiscales federales. Según informaron desde Seguridad, la reunión fue una continuidad de la que había tenido el ministro con el titular de la Corte Suprema, Horacio Rosatti, hace veinte días, en la que hablaron de la seguridad para los jueces federales de Santa Fe. La custodia de las cinco sedes de la Justicia federal en la provincia, de hecho, fue reforzada por la policía federal. «Ese tema es importante porque todas las causas de narcotráfico pasan por los jueces y fiscales», explicaron desde la cartera y agregaron que «otro pedido es que faltan nombrar dos jueces y fiscales». «Vamos a seguir trabajando», aseguraron.