Brasil | Lula relanza el programa Bolsa Familia y recorta poder a militares

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Presidente de Brasil lanza programa Bolsa Familia para combatir pobreza extrema

El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, firmó este jueves una medida por la que se crea el nuevo programa Bolsa Familia, destinado a combatir el hambre y la pobreza extrema.

“Hoy, en la sala principal de Planalto (en la capital Brasilia), firmé la devolución de Bolsa Familia”, escribió el mandatario brasileño en su cuenta oficial de la red social de Twitter.

“Este no es un programa de un gobierno o de un presidente, es una política pública de la sociedad brasileña para combatir el hambre y la pobreza extrema”, afirmó el jefe de Estado.

En otro tuit, Lula da Silva detalló que Bolsa Familia “es el programa de lucha contra el hambre y la pobreza extrema más serio e integral del país”.

“Hoy vuelve, con 600 reales (unos 116 dólares) por familia (cada mes) y otros 150 reales (unos 29 dólares) por niño hasta los seis años. Es el retorno de una política pública para el desarrollo de Brasil”, externó el presidente.

El programa social, que Lula da Silva ya implementó durante su gestión anterior (2003-2011), beneficiará además con 50 reales mensuales (alrededor de 10 dólares) a infantes mayores de siete años y jóvenes menores de 18, y con 50 reales (10 dólares) para embarazadas.

El mandatario anotó en otro mensaje que regresó a la Presidencia “con 33 millones pasando hambre, una situación peor que en 2003”.

“Entonces, vuelvo a decir que si, cuando termine mi mandato el 31 de diciembre de 2026, todos los brasileños están tomando café, almuerzo y cena, habré cumplido de nuevo la misión de mi vida”, aseveró.

Lula da Silva aclaró que “el programa es solo para las personas que están en condiciones de pobreza”, por lo que pidió se realice una supervisión contra el fraude en el registro único.

El ministro de Desarrollo Social, Wellington Días, mencionó que en el programa social se buscará incentivar a las familias para que consigan empleo formal e incrementen sus ingresos.

Telesur


700 mil famílias que passavam fome voltarão a ser atendidas por Bolsa Família

O ministro do Desenvolvimento Social e Assistência Social, Família e Combate à Fome do Brasil, Wellington Dias, afirmou que 700 mil famílias que passavam fome no País voltarão a ser atendidas pelo Bolsa Família, relançado hoje.

De acordo com o ministro, cerca de 20 milhões de famílias e 55 milhões de pessoas são atendidas pelo programa.

Segundo o programa, todas as pessoas da família, independentemente da idade, terão direito a uma renda mínima. Com o novo Bolsa Família, o governo pretende proporcionar pelo menos R$ 142 por pessoa em cada casa.

Além disso, o novo Bolsa Família terá duas regras. Uma é a de regra de proteção: «Se a família melhorar de vida, a renda dela pode aumentar até meio salário mínimo per capita sem que ela saia de imediato do programa», definiu o governo. Outra é um retorno garantido: «As famílias que se desligarem voluntariamente do programa ou perderem renda e precisarem voltar ao programa, terão prioridade no retorno.»

A resposta prevista na regra de proteção já era delimitada no Auxílio Brasil, programa de benefício social do governo de Jair Bolsonaro. Hoje, quem recebe o benefício do governo federal e tem um emprego pode continuar recebendo por mais dois anos, desde que a renda familiar não ultrapasse R$ 525.

De acordo com o novo programa, todas as famílias beneficiárias receberão um valor mínimo de R$ 600 e serão criados dois benefícios complementares. Com os novos parâmetros do programa, todas as famílias beneficiárias receberão um valor mínimo de R$ 600. Além disso, haverá um complemento de R$ 150 para cada criança de até 6 anos e de R$ 50 para cada integrante da família com idade entre 7 e 18 anos incompletos e para gestantes.

Sobre as fraudes, o ministro afirmou que foram encontradas pessoas com cerca de nove salários mínimos no programa. «Fraudes não vão mais acontecer porque vamos tornar o Cadastro Único mais eficiente», garantiu, destacando que o Cadastro Único e Bolsa Família vão voltar a ter fiscalização. «Vamos pactuar rede com MPF, CGU e TCU para fiscalizar cadastro e Bolsa Família.»

O ministro finalizou sua fala com a oração do Pai Nosso durante o evento. Ele pediu que todos os presentes levantassem das cadeiras, dessem as mãos e fizessem uma promessa de tirar o Brasil do mapa da fome.

UOL Economía


Lula corta poder a los militares

El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, le recortó poder al sector militar del gobierno y puso bajo el control civil de la jefatura de gabinete a la Agencia Brasileña de Inteligencia (ABIN). La decisión se hizo oficial ayer y si bien el cambio ya se planteó durante el periodo de transición, debido a la impronta bolsonarista de muchos de sus miembros, los ataques del 8 de enero a la sede de los tres poderes en Brasilia terminaron por acelerar el traspaso de poderes.

La ABIN fue creada en 1999 como un órgano centralizado de la inteligencia del Estado brasileño.

Lula recortó poder al sector militar del gobierno. (Fuente: AFP)

Respondía hasta ahora al Gabinete de Seguridad Institucional (GSI), que se encuentra en el centro del debate debido a que sus integrantes, militares, son los encargados de la seguridad presidencial y del Palacio del Planalto.

En 2019, en el gobierno de Jair Bolsonaro, el GSI recuperó su estatus de ministerio al mando del general Augusto Heleno.

Después del intento de golpe del 8 de enero, Lula acusó a los servicios de inteligencia del Estado de haber fallado en la prevención de los movimientos de ultraderecha que terminaron accediendo sin resistencia a las sedes de los tres poderes. Actualmente el GSI está comandado por el general Marco Gonçalves Dias, el elegido para depurar a los altos cargos afines a Bolsonaro. Hasta finales de enero, 121 militares habían sido designados para ocupar puestos de distinta responsabilidad en el GSI.

La idea de transferir la ABIN a Casa Civil fue planteada por Lula, que eligió para liderar el ministerio a uno de sus hombres de confianza, Rui Costa, en gran medida por la incomodidad en el seno del nuevo gobierno por la militarización de los servicios de inteligencia, que se entiende como un vestigio de la dictadura.

Actualmente se investiga si militares nombrados en la gestión de Bolsonaro permitieron la destrucción de la casa de gobierno durante el intento de golpe.

Como parte de la investigación, el miércoles un juez de la Corte Suprema decidió mantener en la cárcel al ministro de Justicia de Bolsonaro, Anderson Torres.

La defensa del también expolicía, preso de forma preventiva desde el 14 de enero por “indicios de omisión” ante los ataques a las sedes de los tres poderes por parte de seguidores radicalizados de Bolsonaro, había pedido al juez Alexandre de Moraes la libertad, pero el magistrado consideró que no hay motivos para ello y que sería “prematuro” concederla.

En su decisión, Moraes destacó que la “omisión y connivencia de diversas autoridades del área de seguridad” con los vándalos quedaron “demostradas”. El juez citó, entre otros puntos, la presencia de un número insuficiente de policías el día de los ataques y la autorización para que más de un centenar de micros con manifestantes ingresaran a la capital de Brasil sin ningún seguimiento de la policía. Torres, quien se encontraba en Estados Unidos el día de los ataques, se desempeñaba como secretario de Seguridad de Brasilia.

Página 12


Lula tira militares do comando da Abin e transfere controle da agência para Casa Civil

O presidente Lula (PT) transferiu a Agência Brasileira de Inteligência (Abin) do Gabinete de Segurança Institucional para a Casa Civil nesta quinta-feira 2. A mudança havia sido sinalizada pelo ministro Rui Costa em entrevista ao blog de Andreia Sadi, do site G1, no início de fevereiro.

A medida, que tira militares do controle da agência, foi oficializada por decreto publicado no Diário Oficial da União. O documento é assinado por Lula, Esther Dweck, ministra da Gestão, e Rui Costa, da Casa Civil.

A mudança é mais uma das etapas de um processo de desmilitarização da Abin, um objetivo traçado pelo governo após os atos de terrorismo em 8 de janeiro. Desde janeiro, o presidente Lula vem demitindo militares escolhidos por Jair Bolsonaro (PL) para o GSI.

Em recente entrevista a CartaCapital, o cientista político Rodrigo Lentz, professor da Universidade de Brasília e autor de República de Segurança Nacional: militares e política no Brasil (Expressão Popular), avaliou que retirar a Abin das mãos do GSI.

“A iniciativa vai ao encontro de sugestões de estudiosos da academia, pontuando que a inteligência civil tem de atender à sua finalidade: assessorar sobretudo na área de políticas públicas e na estabilidade dos Poderes constitucionais, sem a perspectiva de um inimigo interno”, declarou.

A transferência concretizada nesta quinta-feira, vale ressaltar, não se tratou de uma tarefa simples. Para concluir a mudança, Lula teve de vencer forte resistência dos militares, que tinham o comando da pasta, na figura do general da reserva Marco Edson Gonçalves Dias, que atualmente comanda o GSI.

Carta Capital

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