Brasil | La deforestación en la Amazonía brasileña marcó un nuevo récord en febrero
Nuevo récord en la deforestación de la Amazonia brasileña
La deforestación en la Amazonia brasileña marcó un récord en febrero, según datos oficiales actualizados, que contemplan poco más de la mitad del mes, segundo del año y de gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
El monitoreo satelital detectó 209 kilómetros cuadrados de bosques destruidos en la parte brasileña de la mayor selva tropical del mundo, según datos preliminares del sistema de vigilancia DETER, del Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE) citados por la agencia de noticias AFP.
Aunque el área, que equivale a más de 29.000 canchas de fútbol, sólo contempla datos hasta el 17 de febrero, representa un alza en relación con el récord anterior, de 199 kilómetros cuadrados destruidos en todo el mes febrero de 2021, último año del gobierno del ultraderechista Jair Bolsonaro.
El mes pasado, el monitoreo satelital había reportado una caída de 61% en relación con el mismo período de 2022, aunque organizaciones ambientalistas habían alertado que era prematuro hablar de una «reversión de tendencia», ya que parte de la caída podía atribuirse a una mayor cobertura de nubes que perjudicaron los cálculos.
«El aumento de la deforestación puede ser un reflejo de la limitación en la detección el mes pasado debido a la cobertura de nubes, y lo que se está observando ahora tal vez contemple tanto el área destruida este mes como también de enero», dijo Daniel Silva, especialista en conservación de la ONG WWF-Brasil.
De Bolsonaro a Lula
Bajo el gobierno de Jair Bolsonaro, un aliado de la agroindustria y negacionista del cambio climático, la deforestación anual promedio en la Amazonia brasileña aumentó 75,5% con respecto a la década anterior.
Lula asumió al comenzar este año por tercera vez la presidencia de Brasil con la protección de la selva como una de sus principales banderas para permitir que Brasil deje de ser un «paria» en temas climáticos.
Usurpadores
Los expertos en temas ambientales aseguran que la destrucción de la amazonía brasilera se debe principalmente al avance de las granjas y los usurpadores de tierras, que talan la selva para ganadería y cultivos.
El mandatario nombró al frente del ministerio de Medio Ambiente a Marina Silva, una reconocida ambientalista que estuvo al frente de esa cartera entre 2003 y 2008, cuando Brasil logró disminuir sensiblemente la deforestación.
El 24 de enero, Silva reconoció que la realidad ambiental de Brasil es «mucho peor» de lo esperado.
«Sabemos que existe un empeño del nuevo gobierno para controlar la deforestación, pero los resultados concretos deben demorar un tiempo para ser observados«, agregó el experto de la WWF-Brasil.
Prévia do Inpe indica recorde de alertas de desmate na Amazônia em fevereiro
Dados divulgados nesta sexta-feira (24) pelo Instituto de Pesquisas Espaciais (Inpe) mostram que 209 quilômetros de floresta foram desmatados na chamada Amazônia Legal até o dia 17. É a maior marca para o mês na série histórica, iniciada em 2015. O instituto divulga às sextas as informações colhidas na semana anterior. Com isso, os números do mês de fevereiro serão fechados na próxima sexta-feira, 3 de março.
Segundo o relatório de hoje, os estados que mais desmataram neste mês são Mato Grosso (129 km²), Pará (34 km²) e Amazonas (23 km²).
Os alertas são feitos pelo Sistema de Detecção de Desmatamento em Tempo Real (Deter), que produz sinais diários de alteração na cobertura florestal para áreas maiores que 30 mil metros quadrados.
A Amazônia Legal corresponde a 59% do território brasileiro. Engloba a área total de oito estados (Acre, Amapá, Amazonas, Mato Grosso, Pará, Rondônia, Roraima e Tocantins) e parte do Maranhão.
Desmate da Amazônia em janeiro
Os dados divulgados pelo Inpe contrastam com os registrados em janeiro, quando o acumulado de alertas de desmatamento foi de 167 km², queda de 61% em relação a igual mês de 2022. Entidades ligadas à preservação ambiental ressaltaram, à época, que ainda era cedo para falar sobre uma reversão de tendência.
“A queda observada nos dados de desmatamento, em janeiro, deve ser interpretada com cautela. Registramos a maior cobertura de nuvem dos últimos seis anos para o início do ano. O fenômeno pode aumentar o tempo de detecção pelo Deter, que usa imagens de satélites com sensores ópticos”, disse Daniel Silva, especialista em conservação da WWF Brasil.