Honduras registró casi 300 femicidios en 2022 y Ecuador más de 270
2022, un año violento para las mujeres en Honduras con casi 300 muertes
El 2022 ha sido un año violento para las mujeres en Honduras, con un registro de 300 feminicidios y un 95 % de impunidad en los casos debido a la poca investigación, alertó la directora del Observatorio de la Violencia de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Migdonia Ayestas.
Señaló que «cada 28 horas» hay un asesinato de una mujer en Honduras, que aún tiene altas tasas de homicidios con un promedio actual de 10 muertes diarias.
Organizaciones sociales y de defensa de las mujeres, contabilizan en Honduras, un país tradicionalmente dominado por los hombres, 293 muertes violentas de mujeres entre enero y el 20 de diciembre.
La violencia de género, según organizaciones feministas, empeoró en la pandemia, cuando muchas mujeres quedaron confinadas con su victimario y otras más perdieron su empleo.
Esto «es alarmante» para Honduras y, sin duda, la violencia post pandemia «ha disminuido» en el mundo, pero en Honduras «sigue siendo uno de los más violentos», puntualizó Ayestas.
«En relación a la violencia contra las mujeres se vuelve una preocupación porque Honduras ocupa uno de los primeros lugares a nivel latinoamericano», lamentó la directora del Observatorio de la Violencia.
El 95 % de los casos de asesinadas siguen impunes en Honduras, de acuerdo a registros oficiales y de organizaciones feministas.
El Estado debe trabajar en «la prevención de la violencia, esa cultura patriarcal que inicia en la familia, la forma en la que se educan niños y niñas», subrayó.
Honduras tiene «una deuda pendiente» en la prevención y erradicación de la violencia contra las mujeres, un flagelo que deja a muchos niños en «total indefensión, marginación, orfandad y pobreza», sostuvo Ayestas.
Más de 270 femicidios se reportaron este año en Ecuador
El año 2022 fue el más violento para las mujeres de Ecuador, con más de 270 femicidios contabilizados, reflejan hoy estadísticas de organizaciones contra la violencia de género.
A pesar de que aún faltan unos días para cerrar el año, el número de muertes violentas es el más alto desde 2017, cuando los colectivos sociales empezaron el registro detallado de esos asesinatos.
Entre los casos con mayor impacto social estuvo el de la abogada María Belén Bernal, de 34 años, quien desapareció luego de visitar a su esposo, el teniente Germán Cáceres, en la Escuela Superior de Policía, y su cuerpo fue encontrado varios días después.
El homicidio de Bernal, cuyo principal sospechoso se encuentra prófugo de la justicia, fue considerado un crimen con complicidad del Estado, según concluyó la comisión parlamentaria especial instaurada para averiguar lo sucedido.
Ese hecho sacó a la luz problemas en la formación de los uniformados, y también la realidad de la violencia de género en Ecuador.
Guayas, Manabí y Esmeraldas son las provincias en las que ocurren la mayor cantidad de femicidios y las armas de fuego fueron las más utilizadas para cometer esos crímenes.
Ante las exigencias al gobierno por implementar acciones para frenar tragedias de ese tipo, a fines de noviembre el Ejecutivo transformó la Secretaría de Derechos Humanos en Ministerio de la Mujer, lo cual para analistas es solamente un cambio de nombre y no cuenta con un aumento de presupuesto.
En opinión de madres cuyas hijas fueron asesinadas, el Gobierno solo apoya la lucha de las mujeres en el discurso, porque en la práctica no existen políticas públicas a su favor.
La Fundación Aldea adelantó que en los primeros días de 2023 publicará un informe que recogerá las cifras exactas de todo 2022, hasta la última semana de diciembre, que suele ser una de las más violentas.