Argentina | Amenazan de muerte a Cristina Fernández a 11 días del intento de magnicidio

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A 11 días del intento de magnicidio, amenazaron de muerte a Cristina Kirchner

La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner fue amenazada de muerte y, ante ese hecho, la jueza federal María Eugenia Capuchetti, a cargo de la causa por el intento de magnicidio que sufriera el 1 de septiembre pasado, dispuso reforzar la custodia de la exmandataria, confirmaron este martes fuentes judiciales.

Los informantes precisaron que la amenaza fue hecha el lunes por la tarde a través de un llamado telefónico a la línea 911 realizado desde la ciudad de La Plata.

La jueza federal María Eugenia Capuchetti dispuso reforzar la custodia de la Vicepresidentea

Así, once días después del atentado contra la Vicepresidenta ocurrido en la puerta de su domicilio, cuando el ahora detenido Fernando Sabag Montiel gatilló un revólver a escasos centímetros de su rostro, se suma ahora esta amenaza de muerte ocurrida en las últimas horas.

En la causa por el intento de magnicidio, a cargo de la jueza María Eugenia Capuchetti, interviene también el fiscal Carlos Rívolo.

Además de Fernando Sabag Montiel se encuentra detenida su pareja, Brenda Uliarte, imputada también por el hecho.

La investigación del intento de maginicidio

Como parte de la investigación, la justicia detectó una serie de mensajes extraídos del teléfono celular de Brenda Uliarte que permitieron a la justicia detectar que un grupo de personas había intentado antes asesinar en dos ocasiones a la exmandataria.

La información surgió del celular de la propia novia de Fernando Sabag Montiel y fuentes de la investigación consultadas por esta agencia confirmaron que los mensajes dan cuenta de un intento de asesinato ocurrido el 27 de agosto, durante la noche en la que la Vicepresidenta le habló a la militancia apostada en la zona de las calles Juncal y Uruguay, donde se emplaza el edificio donde vive la titular del Senado.

«No, no es que se dé cuenta, el tema es que hay una cámara de C5N, y hay poca gente, y la gente se está yendo, y el momento es ese, ahora ya es tarde, o sea son las 12 y ella salió a esa hora, y era a esa hora, o sea el escenario era con ella porque la habrán seguido», dice uno de los mensajes que recibió Uliarte de parte de Sabag Montiel.

«¿Entendés? Después vamos a ver en la tele a ver qué pasó porque cuando ella se metió, la siguieron y ahí tendría que haber sido», sostiene otro mensaje detectado por la justicia.

En otra comunicación, Sabag Montiel le dice a Uliarte: «No, ya se me metió adentro y el escenario, el anfiteatro lo sacaron. Le toqué la espalda a (el gobernador bonaerense) Axel Kicillof y se metió en un Toyota Etios, eh, y se fue, un quilombo. Ella está arriba pero no creo que salga, así que ya fue, dejá, voy para allá, quédate ahí. No traigas nada».

La información coincide con la de un video publicado la semana pasada por el canal de noticias C5N donde se ve que el 27 de agosto Sabag Montiel estaba camuflado entre los manifestantes como si fuera un vendedor de copos de nieve azucarada y logró acercarse a metros del gobernador de la provincia de Buenos Aires.

A partir de la nueva información incorporada al expediente, Capuchetti volvió a imponer el secreto de sumario en la causa, luego de que se incorporara al expediente como prueba clave el contenido del celular de Uliarte.

«El teléfono de ella es muy contundente», afirmó a Télam una fuente de la investigación que, sin revelar detalles, aseguró que confirma su participación en el intento de asesinar a la expresidenta, a la vez que aseguró que se trata de un material que la coloca como participante activa de distintos grupos de «haters» («odiadores», en inglés).

Por estas horas, todas las partes involucradas en la causa se preguntaban si la jueza Capuchetti avanzaría con los procesamientos para luego continuar con la investigación de las nuevas pruebas o si ampliaría las indagatorias de los imputados para exhibirles el nuevo material probatorio.

Una de las discusiones que se desarrollan en el expediente es cuáles eran los roles de cada uno de los dos imputados y si contaron además con la colaboración de más personas.

En segundo plano está, por ahora, la línea investigativa que conduce el «entorno de contención» de los agresores: allí aparecerían los vendedores de copos de azúcar («los copitos») que se mostraron en televisión con Uliarte antes de que fuera detenida.

Las fuentes de la investigación señalaron que allí aparecen, bajo sospecha, Gabriel Nicolás Carrizo, el referente de «los copitos», quien registraría intensas comunicaciones con Sabag Montiel durante el mes previo al intento de magnicidio y participante de ese grupo que hablaba con frecuencia con Uliarte.

Hay otras personas de diálogo frecuente con los imputados que también están bajo la lupa de los investigadores entre los que se encuentran un hombre y una mujer que habrían intentado a ayudar a Uliarte a ocultarse.

Télam


Mensajes entre los sospechosos revelan al menos otro intento de atentado a CFK

Fuentes de la investigación por el atentado a la vicepresidenta Cristina Kirchner afirmaron que hubo al menos otro intento de asesinato a la Vicepresidenta. En el marco de la investigación que lidera la jueza María Eugenia Capuchetti y el fiscal Carlos Rívolo, se conocieron nuevos mensajes entre Fernando Sabag Montiel y su pareja Brenda Uliarte que demuestran otros intentos frustrados de atacar a Cristina.

Una serie de mensajes extraídos del teléfono celular de Brenda Uliarte, imputada por la tentativa de homicidio de la Vicepresidenta, permitieron a la justicia detectar que el mismo grupo de personas había intentado antes asesinar a la dos veces presidenta.

Precisamente, según informó Telam, se trata de un intento de asesinato ocurrido el 27 de agosto, durante la noche en la que la Vicepresidenta le habló a la militancia apostada en la zona de las calles Juncal y Uruguay, donde se emplaza el edificio donde vive la titular del Senado.

«El tema es que hay una cámara de C5N y hay poca gente. La gente se está yendo y el momento es ese. Ahora ya es tarde. Son las 12 y ella salió a esa hora y era a esa hora. Osea el escenario era con ella porque la habrán seguido ¿entendés?», dice uno de los mensajes que Sabag Montiel envió a Uliarte. En ese mismo agregó: «Después vamos a ver en la tele qué pasó porque cuando ella se metió la siguieron y ahí tendría que haber sido».

En otro texto que el brasileño mandó a su pareja se lee: «No, ya se metió adentro y el escenario, el anfiteatro, lo sacaron. Le toqué la espalda a Kicillof y se metió en un Toyota Etios y se fue. Un quilombo. Ella esta arriba, dejá voy para allá no traigas nada».

La comunicación entre Uliarte y Sabag Montiel puso en evidencia la planificación y el trabajo de inteligencia previo que llevaron adelante ambos detenidos, antes del intento de magnicidio sucedido a las 21hs del primero de septiembre. La información coincide con la de un video publicado la semana pasada por el canal de noticias C5N donde se ve que el 27 de agosto Sabag Montiel estaba camuflado entre los manifestantes como si fuera un vendedor de copos de nieve azucarados y logró acercarse a metros del gobernador de la provincia de Buenos Aires.

En la noche del sábado 27, Cristina habló desde un escenario montado en la esquina de Uruguay y Juncal. Allí le pidió a la gente «que vayamos a descansar porque ha sido un largo día» luego de la represión de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires, ocurrida el viernes.

Secreto de sumario

La jueza federal Capuchetti reimplantó el secreto de sumario en la investigación por el intento de asesinato a la Vicepresidenta. Fue luego de nuevas pruebas que surgieron de parte Uliarte, quien junto con su novio están acusados por tentativa de homicidio.

Según las fuentes, del celular de Uliarte surgieron mensajes donde despotricaba contra el Gobierno Nacional refiriendo que debían pasar de la «protesta» a la «acción». A raíz del análisis de distintos elementos del teléfono, es que la jueza reimplantó el secreto de sumario, una medida que había fijado días atrás cuando la mandó a detener a ella. Por ello, se prevé que en las próximas horas se produzcan novedades importantes en la causa, aunque no transcendió de que se trata.

«El teléfono de ella es muy contundente», afirmó a Télam una fuente de la investigación que, sin revelar detalles, aseguró que confirma su participación en el intento de asesinar a la expresidenta, a la vez que aseguró que se trata de un material que la coloca como participante activa de distintos grupos de «haters» («odiadores», en inglés).

Capuchetti está en plazo para definir la situación procesal tanto de Uliarte como de su novio, para lo cual tiene diez días desde la semana pasada cuando fueron indagados en Comodoro Py.

Hasta el momento, la jueza da por hecho que ambos actuaron con premeditación y que hicieron inteligencia previa, ya que estuvieron en las inmediaciones a la casa de la Vicepresidenta días antes del atentado del 1 de septiembre pasado. Por lo pronto, de los celulares de él y ella surgió que Sabag Montiel tenía pleno conocimiento del arma calibre 32 el cual gatilló a centímetros de la cabeza de Cristina, pero fracasó al realizar el disparo, ya que no deslizó la corredera para hacerlo.

Además, se están investigando las llamadas ambos hicieron durante ese jueves 1, y las que ella hizo días posteriores, ya que recién Uliarte fue detenida poco tiempo después y no al momento del hecho como ocurrió con Sabag Montiel.

El Destape Web


Cristina Kirchner publicó su primer tuit tras el atentado para mostrar cómo es la campaña mediática y judicial en su contra

La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner realizó su primera publicación en Twitter tras el intento de asesinato que sufrió el pasado 1 de septiembre. Luego de un silencio de 11 días que generó altas expectativas, la exmandataria prefirió no referirse directamente al atentado pero sí advertir sobre una situación que viene señalando desde 2019: que la sentencia en su contra en la causa Vialidad ya está escrita.

Como muestra de que la sentencia ya está decidida, publicó una imagen de la tapa del diario Clarín, donde aparece una nota del periodista Pablo Vaca titulada «La bala que no salió y el fallo que sí saldrá». La sintonía con la que operan la justicia y los medios opositores queda a la vista.

El pasado 23 de agosto, en la transmisión en vivo que hizo desde su despacho en el Senado luego de que los jueces le rechazaran su pedido para ampliar la indagatoria, CFK hizo un extenso desarrollo sobre cómo opera el lawfare en Argentina y porqué su sentencia «ya está escrita».

“El lawfare (en el país) tiene un escalón superior –siempre hemos ido un poquito más allá los argentinos–. Cuando vivimos la tragedia de la dictadura genocida, fue la más sangrienta de todas”, dijo entonces CFK.

“En esta farsa de hoy que es lawfare en América Latina, cuando ya no hay partidos militares pero hay Partido Judicial, dan un paso más. Acá no se trata de estigmatizar o confundir a los gobiernos populares con asociaciones ilícitas, ahora protegen a los que verdaderamente roban en el país”, apuntó la vicepresidenta desde su despacho, donde dio lectura a varios chats entre el secretario de Obras Públicas José López –que saltó a la fama por revolear bolsos con 9 millones de dólares en un convento de General Rodríguez– con Nicolás “Nicky” Caputo, el hermano de la vida del expresidente Mauricio Macri, que estaban en poder de la justicia pero no fueron investigados.
CFK: una sentencia ya escrita por la causa vialidad

“Cuando dije que la sentencia estaba escrita me quedé corta”, remarcó la exmandataria, al señalar que los 12 años de prisión que pidieron en su contra los fiscales Diego Luciani y Sergio Mola corresponden a «los doce años del mejor gobierno que tuvo la Argentina en las últimas décadas: el de Néstor Kirchner y mis dos mandatos”

“¿Por qué nos piden doce años? Lo digo con números. Uno por la memoria, otro por la verdad, otro por la justicia, otro por el Fondo, otro por las AFJP, otro por YPF y Vaca Muerta, otro por el no endeudamiento, otro por el salario de los laburantes”, enumeró. “Cuando yo me fui, los laburantes se llevaban el 51,8 por ciento del PBI y el resto era para los empresarios. Ahora, ni hablar cómo estamos. Por eso me van a estigmatizar, por eso me van a condenar. Y les quiero decir algo: si naciera 20 veces más, 20 veces lo haría de nuevo”, aseguró ese día la vicepresidenta.

Ya lo había advertido en la declaración indagatoria que dio el 2 de diciembre de 2019, a días de asumir como vicepresidenta. «Este juicio forma parte también del lawfare, esto fue un plan ideado por el gobierno saliente. Se nota mucho lo que han hecho señores jueces, en serio se nota mucho», afirmó entonces sobre la causa Vialidad. «Seguramente tienen la condena escrita. No me interesa. Yo he elegido la historia. A mí me va a absolver la historia. Y a ustedes, seguramente, los va a condenar la historia”, les dijo en aquella oportunidad a los jueces y a los fiscales, entre ellos Luciani.

Página 12

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