Eurolat: Diplomacia parlamentaria bicontinental – Por Franco Metaza, especial para NODAL
Los conceptos vertidos en esta sección no reflejan necesariamente la línea editorial de Nodal. Consideramos importante que se conozcan porque contribuyen a tener una visión integral de la región.
Por Franco Metaza*, especial para NODAL
Eurolat Argentina 2022
Por primera vez tuvo lugar en Argentina una importante cumbre de parlamentarios: EUROLAT. Esta Asamblea Parlamentaria Euro-Latinoamericana en la que participan miembros de parlamentos regionales latinoamericanos y del Parlamento Europeo se realizó entre los días 11 y 14 de abril en Buenos Aires.
Las comisiones, los grupos de trabajo y los Foros de la Mujer y de la Sociedad Civil se llevaron a cabo en el Centro Cultural Kirchner (CCK) y la sesión plenaria en donde se debaten y aprueban resoluciones, se celebró en el recinto de Diputados del Congreso de la Nación.
La sesión de apertura el día miércoles 13 que tuvo lugar en la Ballena Azul del CCK fue encabezada por la Vicepresidenta de la Nación y Presidenta del Senado, Cristina Fernández de Kirchner. A la misma, además del centenar de parlamentarios miembros de Eurolat, estuvieron invitados los 257 diputados, los 72 senadores, legisladores provinciales y concejales. También participaron los embajadores y embajadoras de los distintos países que tienen representación ante este organismo parlamentario internacional.
Las palabras de la Presidenta del Senado inciaron describiendo cómo la pandemia “ha trastocado vidas, gobiernos y al planeta entero” y desde ese marco resaltó la importancia del rol del estado haciendo un racconto histórico en el que destacó al estado de bienestar acaecido luego de la 2da guerra mundial. También se refirió al conflicto en Ucrania e hizo un llamamiento a que las reglas internacionales sean cumplidas por todos los países por igual. Y en ese hilo de ideas recordó que en Latinoamérica tenemos una base de la OTAN en las Islas Malvinas, lo que generó un encendido aplauso de los presentes. Y por último, hizo mención a la necesidad de reflexionar sobre el poder real y como la configuración actual de la división de poderes no contempla múltiples aristas de la vida pública del presente y lo graficó con una frase contundente: “Tengamos en cuenta que cuando se adoptó esta forma institucional de gobernanza no existía ni siquiera la luz eléctrica” .
¿Qué es Eurolat?
La Asamblea Parlamentaria Euro-Latinoamericana, conocida por su acrónimo Eurolat, es un ámbito de deliberación parlamentaria creado en el año 2006 en el marco de la asociación estratégica bicontinental entre la Unión Europa y América Latina y el Caribe (UE-ALC). La integran 150 parlamentarios, 75 por el componente europeo y 75 por el componente latinoamericano. El componente europeo emana exclusivamente del Parlamento Europeo, es decir que sus 75 miembros son parlamentarios del órgano legislativo de la Unión Europea. Por el contrario, el componente latinoamericano emana de distintos parlamentos regionales, a saber: Parlatino, Parlandino, Parlacen, Parlasur y las comisiones parlamentarias mixtas de México y Chile. En suma, Eurolat representa a 1200 millones de personas.
Es decir que a la Argentina la representan diputados, senadores y los parlamentarios supranacionales del Parlasur. Ellos son: las diputadas Graciela Camaño y María Rosa Martínez; los senadores Adolfo Rodríguez Saa, Lucia Corpacci, Alfredo Cornejo y Silvia Giacoppo; y los parlasureños Julia Perie, Alejandro Karlen, Julio Sotelo, Cecilia Brito, Elena Corregido y Oscar Laborde. Los senadores Adolfo Rodríguez Saa y Silvia Giacoppo integran además la Mesa Directiva de 16 miembros de Eurolat -8 por cada continente-, por lo cual la participación argentina en este ámbito es muy relevante.
La gran mayoría de las resoluciones de EuroLat se refieren a las principales prioridades que los Estados deberían llevar a cabo de forma general para fortalecer los lazos entre ambas regiones. En los últimos años la agenda de trabajo también ha estado atravesada por asuntos de relevancia global como democracia y derechos humanos, migración, lucha contra la pobreza, promoción de la cohesión social, innovación y tecnología, y cambio climático. Sus resoluciones no son vinculantes sino que son de tipo declarativo y recomendaciones de leyes para adoptar luego en los ordenamientos jurídicos domésticos en algo que se ha dado en llamar “legislación indicativa” y que viene cobrando mucha fuerza con el auge de la diplomacia parlamentaria.
Una relación bicontinental pensada en el siglo XXI
La historiografía siempre ha sido desproporcionada en la concepción de nuestro continente en relación a Europa. Desde el concepto del “descubrimiento de América” como si fuera terra nullis y en rigor de verdad siempre había estado ahí y habitada por pueblos precolombinos de los más diversos y con distintos grados de progreso; hasta cierta ingratitud y falta de reciprocidad con las distintas corrientes migratorias que por causas bélicas y económicas se dieron entre nuestros continentes en el siglo próximo pasado.
Es por ello, que nos debemos una nueva página en la historia bicontinental, y el ámbito de Eurolat resulta propicio para ello. Si pudieramos observar alguna debilidad en el diseño institucional de este organismo parlamentario internacional, podríamos señalar el hecho de que el componente europeo es homogéneo y funciona en un solo bloque a pesar de los diferentes grupos partidarios que lo integran; a diferencia del componente latinoamericano que está integrado por 4 parlamentos regionales de distinta naturaleza y dos comisiones parlamentarias, como explicamos en el segundo acápite. Esta diferencia hace que las reuniones preparatorias de un componente sean mucho más ágiles, cohesivas y económicas de realizar que las del otro.
De esta XIV Asamblea se reportó en la prensa que no se aprobó ninguna resolución referente al conflicto en Ucrania. Lo cierto es que hubieron 4 proyectos de resolución de urgencia al respecto pero ninguno obtuvo la mayoría de ambos componentes como establece el reglamento. ¿Hubiera sido importante una resolución al respecto? Por supuesto. Pero el resultado de ello se explica en que el componente europeo no logró imponer su redacción pretendida. Y eso es un gran valor de Eurolat: obliga al debate en condiciones de igualdad y los votos absolutos de un componente y del otro valen lo mismo.
Los grandes temas que atraviesan y atravesarán los debates políticos en el concierto global en esta primera mitad del siglo XXI como el cambio climático, la transición energética, el fortalecimiento de una desescalada de armamento nuclear efectiva, las deudas soberanas y el rol de los organismos de crédito, la necesidad de reformular los ámbitos multilaterales para que se adecuen a los tiempos que corren, y nada más y nada menos que la seguridad alimentaria y la erradicación de la pobreza extrema; son asuntos que en el marco de la asociación estratégica Unión Europea-América Latina y el Caribe resulta fundamentar discutir con dignidad y de igual a igual.
Como dijo la Vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner en ocasión del 40° aniversario de la Guerra de Malvinas unas semanas antes de esta cumbre de Eurolat “No hay buenos ni malos, hay intereses”. Y quienes tenemos responsabilidades en el ejercicio de la diplomacia parlamentaria, trabajamos fuertemente en Eurolat y otros organismos parlamentarios internacionales para defender los intereses de la República Argentina en particular y de Latinoamérica en general.•
*Licenciado en Gobierno y Relaciones Internacionales. Director general de Relaciones Internacionales del Senado de la Nación