Colombia | Organizaciones indígenas denuncian falsos positivos del gobierno y asesinato de líder social por parte del Ejército
La Organización Nacional de los Pueblos Indígenas de la Amazonia Colombiana (OPIAC) le pidió al ministro de Defensa que se retracte de sus declaraciones en las que reportó nueve disidentes de las Farc muertos en combate en Puerto Leguízamo, Putumayo. La organización insiste que se trata de una autoridad indígena y campesinos, de los cuales aún no conocen el paradero de sus cuerpos.
Luego de haber denunciado un presunto caso de falsos positivos en Putumayo, la Organización Nacional de los Pueblos Indígenas de la Amazonia Colombiana (OPIAC), realizó una rueda de prensa para dar detalles sobre lo sucedido. El pasado martes 29 de marzo, la organización denunció que el ataque adelantado contra disidencias de las Farc en Puerto Leguízamo (Putumayo), en el que el ministro de Defensa, Diego Molano, informó de la muerte de nueve presuntos disidentes, se trató realmente de un caso de ejecuciones extrajudiciales, denominadas comúnmente como falsos positivos.
Durante la rueda de prensa, la OPIAC le pidió al ministro que se retractara, pues, de acuerdo con la organización, se trata de campesinos y Pablo Panduro Coquinche, una autoridad indígena de la región. “Eran civiles, no guerrilleros”, señaló uno de los voceros de la organización. Además, indicaron que aún no tienen información del paradero de los cuerpos y que ya alertaron al Ministerio de Defensa y a la Fuerza Pública de la situación, pero que hasta el momento no han tenido respuestas. La organización también insistió en que la Fiscalía no hizo el levantamiento de los cuerpos, sino que lo hizo directamente el Ejército.
La OPIAC retomó los relatos de la comunidad, los cuales apuntan a que no hubo ningún tipo de enfrentamiento armado. “El Ejército llegó (en la noche del 28 de marzo) a la vereda donde se encontraban unos habitantes de la zona, realizando un bazar en una caseta comunal, adyacente a una cancha de fútbol de uso de los vecinos”, señaló un habitante de la región a un medio local. Igualmente, aseguraron que “dicha actividad era para recolectar fondos para atender necesidades de la misma vereda. En este espacio se encontraban el señor Divier Hernández y su mujer, padres de dos menores de edad de 6 y 2 años”.
Igualmente, la comunidad señaló que el bazar era para recolectar fondos para atender necesidades de la misma vereda y que se recolectaron once millones de pesos, los cuales desaparecieron durante los hechos. En el pronunciamiento, la organización señaló que estos ataques contra las comunidades indígenas en esta zona del país no son hechos aislados y que en meses pasados también se han presentado asesinatos de sus integrantes. Este diario se contactó con el Ejército y señaló que en las próximas horas se pronunciará sobre los hechos.