Brasil | Miles de personas protestaron contra la explotación y deforestación de reservas indígenas

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Protestan en Brasil por iniciativas que afectan a indígenas

Miles de brasileños se reunieron este miércoles fuera del Congreso en Brasilia para protestar contra un conjunto de proyectos de ley que consideran que amenazan la selva amazónica al promover la deforestación y la actividad industrial en tierras indígenas protegidas.

El acto, encabezado por el músico brasileño Caetano Veloso, reunió a varios artistas famosos y a más de 200 organizaciones sin fines de lucro. En tanto, en el interior de la cámara baja del Congreso, los legisladores comenzaron a debatir una propuesta que podría autorizar actividades mineras en territorio indígena.

Pero más tarde, el presidente de la cámara Arthur Lira, un firme partidario del presidente Jair Bolsonaro, frustró las intenciones del líder de extrema derecha al anunciar que los líderes de los diferentes partidos habían acordado que la iniciativa debería ser analizada primero por un grupo de trabajo. Dijo que no se llevaría a cabo una votación antes de la segunda semana de abril.

El proyecto de ley ha languidecido en el Congreso desde que el presidente Bolsonaro la presentó en 2020, pero la guerra en Ucrania puso en peligro el crucial abastecimiento de fertilizantes rusos para las gigantescas tierras agrícolas de Brasil y apremió al gobierno de Bolsonaro a impulsar una votación de emergencia.

El proyecto de ley tiene apoyo amplio entre los aliados de Bolsonaro y los influyentes cabilderos agrícolas en el Congreso. De aprobarse, será remitido al Senado.

“No vamos a aceptar (la extracción de) potasio en tierras indígenas, ni a pagar las facturas de los que se están matando ¡Basta de sangre indígena!”, dijo ante la multitud Sônia Guajajara, integrante de una tribu y coordinadora ejecutiva de la Asociación de Pueblos Indígenas de Brasil.

Durante la tarde, ambientalistas y activistas políticos, así como dirigentes indígenas, subieron al escenario para arremeter contra las iniciativas, a las que se refirieron como “el paquete de la destrucción”. Artistas brasileños como Seu Jorge y el rapero Emicidia tenían previsto actuar antes de Veloso.

Ana Paula Vargas, directora del programa en Brasil de la organización sin fines de lucro Amazon Watch, dijo que el gobierno de Bolsonaro ha intentado incesantemente restringir los derechos de los pueblos indígenas.

“Ni siquiera han intentado ocultar su estrategia”, recalcó Vargas. “Desde el principio, el gobierno de Bolsonaro ha dejado en claro su agenda antiambientalista”.

Activistas y artistas denunciaron durante el evento que hay otras iniciativas que reducirían las restricciones ambientales a los proyectos de infraestructura en tierras protegidas; regularizarían la ocupación ilegal de tierras públicas mediante la invasión y la deforestación; y podrían despojar a las reservas indígenas de su estatus de zonas protegidas.

Otra propuesta de ley atenuaría las restricciones al uso de ciertos pesticidas en la nación más grande de América Latina, marginando a los organismos gubernamentales responsables de evaluar las repercusiones ambientales y de salud derivadas del proceso de licencias, según un comunicado de los organizadores del evento.

En una audiencia ante el presidente del Senado, Rodrigo Pacheco, Veloso recordó a los legisladores los recientes desastres ambientales que algunos expertos han atribuido al cambio climático: los deslaves en el estado Río de Janeiro en los que murieron más de 200 personas y las inundaciones en los estados de Bahía y Minas Gerais.

“Ninguna de estas imágenes corresponden al futuro distante, señor presidente. Están ocurriendo ahora”, afirmó Veloso. “El Senado tiene la competencia y la responsabilidad de impedir cambios legislativos irreversibles que, al ceder a intereses locales, infligen una carga inmensa a la sociedad y ponen en peligro el futuro del país”.

Net Noticias


Indígenas protestam em Brasília contra projeto que autoriza exploração de terras para mineração

Povos indígenas fazem um protesto, na manhã desta quarta-feira (9), contra o projeto de lei que libera o garimpo em terras preservadas. O ato ocorre na Esplanada dos Ministérios, em Brasília (veja vídeo acima).

O grupo saiu da Biblioteca Nacional em direção à Câmara dos Deputados. Durante o trajeto, os participantes do movimento chegaram a fechar, pelo menos, duas faixas da via S1, no Eixo Monumental.

«Terra demarcada, água protegida», diz uma das faixas carregadas pelos manifestantes. Ao g1, a Polícia Militar informou que o grupo ocupou a faixa da direita da S1 até a chegada ao Anexo 2 da Câmara dos Deputados. Segundo a corporação, não houve ocorrências.

O Projeto de Lei n° 191/2020 autoriza a mineração e a construção de hidrelétricas em terras indígenas. O projeto valida ainda todos os requerimentos de exploração de minérios que tenham sido solicitados ou protocolados antes da lei, e legaliza garimpos.

A nova lei abre a possibilidade de as aldeias explorarem as terras em outras atividades econômicas, como agricultura e turismo. A exploração mineral e hídrica está prevista na Constituição Federal, mas nunca foi regulamentada.

Apresentado pelo Executivo, o projeto aguarda a criação de uma Comissão Especial na Câmara de Deputados. A regulamentação do garimpo e de outras atividades extrativistas em terras indígenas é defendida pelo presidente Jair Bolsonaro(PL) desde o início do mandato.

Instituições brasileiras e uma universidade australiana realizaram um estudo que aponta que a regulamentação da mineração em terras indígenas deve aumentar em 22% a área afetada pela atividade. Os autores também apontam que a regulamentação poderá colocar em risco o modo de vida de 200 povos indígenas.

Os indígenas também carregam faixas contra o marco temporal, que determina que as etnias só podem reivindicar a demarcação de terras que já eram ocupadas por eles antes da data de promulgação da Constituição de 1988. Em outra faixa, os manifestantes pedem para que o STF, que julga o caso, «não legalize o roubo de nossas terras».

A decisão, no Supremo Tribunal Federal (STF) pode definir o rumo de mais de 300 processos de demarcação de terras indígenas que estão em aberto no país.

A demarcação de terras indígenas é um direito garantido pela Constituição Federal, que estabelece aos indígenas o chamado «direito originário» sobre as terras ancestrais. Isso quer dizer que eles são considerados, por lei, os primeiros e naturais donos do território, sendo obrigação da União demarcar todas as terras ocupadas originariamente por esses povos.

Se a tese do marco temporal for aceita pelo STF, indígenas poderão ser expulsos de terras ocupadas por eles, caso não se comprove que estivessem lá antes de 1988.

O marco temporal também irá facilitar que áreas que não deveriam ter titularidade, por pertencerem aos indígenas, protegendo física e culturalmente povos originários, possam ser privatizadas e comercializadas. A comercialização responde ao interesse do setor ruralista.

G1

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