Argentina | Movimientos sociales realizan marchas y acampes contra el acuerdo con el FMI

1.691

El reclamo de las bases: «Macri y el FMI trajeron la pobreza al país, que ellos se hagan cargo»

Por Martín Suárez

«Es imposible ser indiferente ante el hambre y el dolor de nuestro pueblo», comentó un militante a una persona que le cuestionaba por qué pusieron «cacerolas» en las inmediaciones del Obelisco. Jorge tiene 25 años y es militante de Nuestra América, una de las organizaciones que instalaron ollas populares y repartieron viandas a quienes se acercaban a reclamar un plato de comida. «Nuestra lucha es estar siempre al lado de los nuestros», lanzó.

En paralelo al ingreso al Congreso del acuerdo con el FMI, miles de personas se movilizaron en diferentes ciudades del país. «Nos preocupa mucho tener un acuerdo que vaya en contra de nuestro pueblo, que tenga en la letra chica ajustes, que no nos explique cuál es la reducción del déficit fiscal, porque sabemos que eso representa menos presupuesto para los sectores más humildes», analiza en diálogo con Tiempo Laura Cibelli, militante del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) integrante de la UTEP. «La situación del país es muy grave y es por eso que estamos convencidos que quienes tienen que pagar, si es que tienen decidido pagar esta deuda fraudulenta que fue hecha para enriquecer a los mismos de siempre, son aquellos quienes la contrajeron; los sectores más poderosos deben hacerse cargo de esto».

Otra de las organizaciones presentes en el obelisco, fue el Frente popular Darío Santillán que, desde muy temprano, montó un potente equipo de sonido en las inmediaciones de Plaza de la República, para que cada uno de los referentes sociales pueda explicar a ‘viva voz’ el objetivo de la jornada. «Hay algo que está claro: la deuda interna en la Argentina es la prioridad y, más allá del acuerdo con el Fondo, ante todo, hay que acordar con el pueblo; hay que discutir las respuestas ante un escenario económico que es muy difícil», cuenta a Tiempo Dina Sánchez, integrante del Frente Popular Darío Santillán. «Teniendo en cuenta el 60% de pibes y pibas pobres que hay en el país, y a quienes el gobierno todavía no dio ninguna respuesta, nosotros proponemos un Salario Básico Universal para que ninguna persona esté por debajo de la indigencia, pero si para el gobierno nacional ésta no es una propuesta, que nos digan cuál, entonces».

La concentración en el Obelisco comenzó pasadas las 10 de la mañana y, alrededor de las 12 del mediodía, algunas de las organizaciones presentes comenzaron a movilizarse hacia la sede del Banco Mundial, ubicada en Bouchard al 500, frente al histórico Luna Park. Una importante columna de 10 mil personas aproximadamente se sumó desde Av. de Mayo y 9 de Julio, para movilizarse hacia el mismo lugar. La decisión de las organizaciones es acampar hasta este viernes en las oficinas de esa entidad internacional.

«Macri y el FMI trajeron la pobreza al país, que ellos se hagan cargo», dijo a este medio Marianela Navarro, integrante del Frente de organizaciones en Lucha Oficial (FOL). La referente social analizó, entre otros puntos, la situación de los jubilados y jubiladas: «A la fecha, están cobrando cerca de $ 30.000 cuando la Canasta Básica Total (se utiliza para medir la pobreza) ya se encuentra en los $ 78.600». En el mismo sentido, sintetizó que el Salario Mínimo Vital y Móvil «hoy se encuentra en $ 32.000; es decir, que ronda el 40% de la línea de pobreza». Además, recordó la situación de trabajadoras y trabajadores de la economía popular, que tienen un ingreso base fijado en el 50% del Salario Mínimo; «es decir, apenas un 20% de la Canasta Básica Total».

Navarro destacó que hay una contradicción enorme entre lo que dice el gobierno nacional y lo que terminó haciendo: «Las propias declaraciones del presidente Alberto Fernández fueron contundentes. Él reconoce que esta deuda es una estafa porque no se invirtió ese dinero en ningún sector del país y la fugaron. La lógica sería que si saben que esta deuda es una estafa, primero la investiguen y después paguen lo que corresponde, pero acá hicieron todo al revés: primero pagan y después vemos».

Consulta popular sobre la deuda

«La deuda con el fondo ¿la paga el pueblo?» es la pregunta que invita a responder la organización Libres del Sur, que durante la jornada comenzó en todo el país una Consulta Popular. El espacio político y social sostiene que no se debe acordar con el Fondo porque esta deuda fue contraída violando la Constitución Nacional, al no pasar por el parlamento. «Se acercó mucha gente a votar y ahora nos vamos para Berazategui, donde se encuentra una de las 10 mil urnas que hoy instalamos en todo el país. La consulta popular es una herramienta importante que demuestra cómo la participación de la sociedad es fundamental para estos temas», cuenta a Tiempo Silvia Saravia, coordinadora nacional del movimiento Barrios de Pie.

En la urna de Plaza Congreso, estuvieron presentes, además, el titular de Libres del Sur, Humberto Tumini; y la Secretaria General de Libres del Sur CABA, Daniela Gasparini. «Creemos que con esta iniciativa vamos a llegar a juntar más de un millón de votos. La votación se extiende hasta éste domingo y esos resultados se los vamos a llevar a diputados y senadores para que escuchen la opinión de la sociedad», agrega Saravia y termina: «Entre martes y miércoles de la semana que viene, vamos a brindar una conferencia de prensa para dar a conocer estos resultados».

Tiempo Argentino


Las claves económicas del acuerdo del Gobierno con el FMI

Por Esteban Lafuente

El acuerdo con el FMI finalmente se selló y está a punto de ingresar al Congreso. Tras meses de idas y vueltas, estancamiento y conversaciones, el Gobierno pondrá a disposición de los legisladores el programa que renegocia el acuerdo stand-by que se firmó en 2018. Metas de déficit, acumulación de reservas y política monetaria, además de un planteo sobre el gasto en subsidios a la energía, son algunos de los puntos clave. La discusión ahora se dará en una cuenta regresiva a medida que se acerca la fecha del 22 de marzo, cuando está acordado un vencimiento de US$2800 millones.

1- Déficit fiscal

“El primer bloque es el fiscal”, dijo Martín Guzmán el mes pasado, al presentar el acuerdo. Como es habitual en los programas del FMI, el foco del programa es equilibrar las cuentas del sector público. En este caso, se estableció una meta de déficit primario del 2,5% del PBI para 2022 (fue 3% en 2021), que cae al 1,9% en 2023 (año de elecciones presidenciales) y al 0,9% en 2024. El esquema dispone alcanzar el equilibrio en las cuentas del Estado en 2025. “Se plantea una reducción gradual del déficit fiscal sobre la base de una economía que se recupera. Se logró que la Argentina pueda llegar a un acuerdo sin que haya una política de ajuste”, celebró Guzmán. .

2- Emisión monetaria

Como parte del sendero de reducción del déficit primario, el Gobierno también se comprometió a frenar ‘la maquinita’ del Banco Central. El acuerdo con el FMI establece un freno la asistencia monetaria al Tesoro, que en 2021 implicó una emisión de pesos por el equivalente al 3,7% del PBI. El Gobierno acordó que este año podrá recurrir a la asistencia monetaria por parte del BCRA por un 1% del PBI y que en 2022 sea del 0,6% del PBI. Según adelantó Guzmán, será “cercano a cero” en 2024. Es una de las pautas más exigentes, según los analistas, teniendo en cuenta que la asistencia monetaria del BCRA resultó en 2021 el principal mecanismo del Tesoro para cubrir sus necesidades de gasto. Con un tope al 1% del PBI, el Gobierno deberá conseguir financiamiento en el mercado de deuda (con aumentos en la tasa de interés) o en organismos multilaterales.

3- Tasas de interés

El FMI insistió en la necesidad de que el país ofrezca tasas de interés reales positivas, es decir, que estos valores se ubiquen por encima de la inflación. De esta forma, buscan estimular el ahorro en pesos y desalentar la demanda de dólares. Hace algunas semanas, el BCRA avanzó en esta dirección. Si bien todavía las tasas están por debajo de la inflación esperada, el organismo dispuso a mediados de febrero un alza de 2,5 puntos porcentuales a las tasas de interés. Así, los plazos fijos en pesos a 30 días rinden un 41,5% anual, lo cual representa un rendimiento del 50,4% efectivo. Fue la segunda suba en las tasas de interés de 2022.

4- Las reservas del Banco Central

Es otra de las metas explícitas del acuerdo alcanzado con el FMI. La pauta para 2022 es que las reservas del BCRA crezcan en US$5000 millones. Para eso, se contemplarán préstamos de organismos multilaterales y se utilizarán los fondos que el FMI desembolsará trimestralmente. Además del dinero para cancelar vencimientos, se reintegrarán los DEG equivalentes a algo más de US$4000 millones que el país utilizó para asumir los compromisos de los meses anteriores.

5- Dólar y brecha

El acuerdo establece que continuará el ritmo de devaluaciones diarias y descarta un salto discreto en el tipo de cambio, aunque el FMI remarcó en la necesidad de introducir políticas para evitar el atraso cambiario. El comunicado emitido por el organismo se refiere a “políticas para mantener un tipo de cambio efectivo real competitivo en el contexto del régimen de paridad móvil’ (‘crawling peg’). En el Gobierno habían insistido en que no habría un salto devaluatorio. El fortalecimiento de las reservas busca propiciar la estabilidad cambiaria. En ese sentido se ubica la intención de ampliar el swap con China por alrededor de US$3000 que anunció el presidente Alberto Fernández en la apertura de sesiones. Al mismo tiempo, el BCRA en los últimos meses avanzó en una aceleración del ritmo devaluatorio para intentar evitar la pérdida de competitividad, pero ese ritmo aún sigue por debajo de la inflación.

6- Inflación

El programa establece que uno de sus objetivos es la baja de la inflación, pero no introduce metas o pautas fijas. Guzmán insiste en que se trata de un proceso “multicausal” con “múltiples factores que lo explican” y que deben ser atacados “en simultáneo”. Al momento de presentar el principio de entendimiento, el ministro ratificó que continuará la apuesta del Gobierno por los “acuerdos de precios” que impulsa y gestiona el secretario de Comercio Roberto Feletti. En el Gobierno insisten en que sirven para “ordenar y alinear expectativas”.

7- Cronograma de pagos

El acuerdo alcanzado comprende inicialmente un plazo de dos años y medio (30 meses), en el cual el FMI realizará desembolsos (y reintegrará los compromisos previos ya cancelados) a la Argentina para que pueda enfrentar los vencimientos del cronograma original. Es decir, el FMI girará al país fondos equivalentes a los US$45.000 millones tomados en el acuerdo stand-by de 2018, para que se cancelen los pagos pendientes (entre 2022 y 2024). Este esquema incluye 10 revisiones trimestrales, tras las cuales el FMI concretará cada desembolso. Luego, se definió un programa de desembolsos en un plazo de 10 años (como es habitual en los acuerdos de facilidades extendidas) para que la Argentina devuelva los fondos. Es decir, se usará dinero del propio FMI que empezará a pagarse dentro de cuatro años y medio: se iniciarán los pagos en 2026 para terminar en 2034.

8- Tarifas

“Acordamos que una estrategia para reducir los subsidios a la energía de forma progresiva será muy importante”, escribió en su momento en Twitter Gita Gopinath, subdirectora gerenta del FMI, sobre un punto clave del acuerdo. La referencia explícita marca que en ese rubro estuvo focalizada la mayor exigencia del organismo, en cuanto a la reducción y reorientación del gasto. En 2021, los subsidios a la energía representaron un monto equivalente al 2,3% del PBI (alrededor de US$11.003 millones), y crecieron en términos reales, merced al atraso tarifario. Para este año, el Gobierno había autorizado un aumento promedio del 20% en las tarifas de luz y gas y apuesta por un esquema de segmentación que, según analistas y las propias estimaciones oficiales no alcanzaban para reducir los subsidios (de hecho, crecerán). La situación se complejizó por la suba en el precio de la energía y el petróleo derivada de la invasión de Rusia en Ucrania.Por eso, finalmente, el Gobierno anunció cómo será el esquema de segmentación para el bienio 2022-2023, que contempla tres niveles: a) usuarios que dejarán de ser beneficiarios de subsidio al consumo energético en función de su plena capacidad de pago (según dijo el Presidente en la apertura de sesiones ordinarias sería “el 10% de mayor capacidad económica”); b) usuarios beneficiarios de la tarifa social, para quienes el incremento total en su factura para cada año calendario será equivalente al 40% del CVS del año anterior, que en 2021 fue de 53,4%, lo que daría un aumento del 21,36% para este año, c) para el resto de los usuarios el incremento total en la factura para cada año calendario será equivalente al 80% del CVS correspondiente al año anterior (equivaldría a un aumento de 42,72% en las tarifas).

9- Jubilaciones

El Gobierno niega que el acuerdo imponga reformas al sistema jubilatorio o la fórmula de ajuste de jubilaciones, pensiones y asignaciones. “Quiero ser muy claro ante esta Asamblea Legislativa: no habrá una reforma previsional”, enfatizó en su discurso de apertura de sesiones del Congreso el Presidente, e insistió en que “la edad jubilatoria no será alterada”. En este sentido, sin embargo, sí insistió en que se propiciará que aquellos trabajadores que deseen continuar con su trabajo más allá de la edad de jubilación (60 años para las mujeres, 65 para los hombres) podrán hacerlo sin que el empleador los obligue al retiro. Sin embargo, desde el Gobierno ya adelantaron que el compromiso es revistar los regímenes especiales, como el que rige para embajadores o funcionarios del poder judicial, que se encuentran entre los haberes jubilatorios más altos del país. Según estimaciones privadas, ese rubro no llega ni al 0,1% del PBI.

10- Sin reforma laboral

El acuerdo no incluye una reforma laboral ni se mencionan modificaciones al régimen vigente. Así lo había indicado el presidente Alberto Fernández en el inicio de sesiones ordinarias del Congreso. “Quiero ser claro: no habrá una reforma laboral. Los derechos de los que trabajan no pueden ser alterados en su perjuicio. La justicia social jamás puede ser objeto de una negociación”, dijo el Presidente durante su exposición.

La Nación

Más notas sobre el tema