México | Hallan 14 fosas clandestinas en Sonora y misión de la ONU acompaña la búsqueda de desaparecidos
Hallan alrededor de 18 cuerpos cubiertos con cal en fosas clandestinas en Sonora
La ONG Madres Buscadoras de Sonora encontró al menos 18 cuerpos humanos en fosas clandestinas y hogueras ubicadas a unos 30 kilómetros de Hermosillo, en el estado de Sonora, según informó hoy jueves la propia asociación.
A través de sus redes sociales, la organización que conforman abuelas, madres, hermanas, hijas y hermanas de personas desaparecidas, anunciaron que el hallazgo se dio en seguimiento a una denuncia anónima que les informó sobre un posible entierro clandestino utilizado por grupos criminales.
El descubrimiento se dio alrededor del mediodía del miércoles tras una jornada de búsqueda que decenas de mujeres habían iniciado desde la madrugada y que las llevó a recorrer varios kilómetros.
Según explicaron, siguiendo un fétido olor a descomposición, encontraron el sitio con las fosas y la hoguera en la llamada Costa de Hermosillo, una zona agrícola desértica situada entre la capital estatal y la Bahía de Kino, en el mar de Cortés.
En los 14 hoyos se encontraron restos óseos, algunos de ellos calcinados y otros en estado de descomposición.
Los cuerpos estaban cubiertos con cal para evitar que emitieran un olor fétido.
Ceci Patricia Flores Armenta, líder del colectivo Madres Buscadoras de Sonora, notificó del hallazgo a través de un grupo de Whatsapp, ahí señaló que aunque llevan tres años «peinando» el estado de Sonora, siempre es difícil encontrarse con «cementerios clandestinos».
Esperó en este sitio poder encontrar los restos de su hijo Marco Antonio, que desapareció el 2018.
Fiscalía inicia trabajos en la zona
Horas más tarde, la Fiscalía General de Justicia del Estado de Sonora confirmó que personal de servicios periciales llegó a la zona y comenzó trabajos de procesamiento en criminalística.
Agregó que de acuerdo con los protocolos establecidos por parte de un forense, están coordinando la recuperación de las piezas óseas e indicios, a fin de determinar el número de cuerpos de este hallazgo y proceder a realizar las comparativas genéticas de identificación.
La Agencia Ministerial de Investigación Criminal hizo un llamado a las miles de familias sonorenses que buscan a un ser querido víctima de desaparición que acudan a instalaciones de la Fiscalía de Sonora para realizar una prueba genética y acelerar los procesos de identificación de ADN.
La superficie donde fueron encontradas las fosas se ubica en la carretera 20, en un camino de terracería, en el poblado Miguel Alemán.
México acumula desde 1964, según datos de la Comisión Nacional de Búsqueda (CNB), más de 95 mil personas desaparecidas y no localizadas, la gran mayoría desde el inicio de la guerra militar contra el narcotráfico iniciada en 2006.
Recorre comité de ONU fosas clandestinas en México
Por Laura Jiménez
Como parte de sus actividades en su primera visita a México, el Comité de las Naciones Unidas contra la Desaparición Forzada (CED, por sus siglas en inglés) recorrió sitios de inhumación clandestina en dos de los 13 estados a los que acudió ante el panorama de más de 94 mil personas desaparecidas en el país.
Sólo en 2019, la Comisión Nacional de Búsqueda registró 40 mil 180 personas desaparecidas. Hoy, la cifra oficial no sólo se ha duplicado, sino que colectivos y organizaciones señalan la existencia de un número negro de denuncias en estos casos.
Los hallazgos de fosas clandestinas por parte de colectivos de familiares de personas desaparecidas se han convertido en un hecho frecuente y extendido; sin embargo, no es la única problemática en torno al tema.
Los diagnósticos de 12 entidades entregados al CED destacan al menos 10 puntos donde se enfatiza la impunidad, crisis forense, revictimización hacia víctimas indirectas, colusión de fiscalías con el crimen organizado, negligencia de éstas, desplazamiento forzado por amenazas y el asesinato de buscadoras.
El comité acudió a Chihuahua, Nuevo León, Coahuila, Tamaulipas, Morelos, Guanajuato, Sinaloa, Nayarit, la capital del país, Estado de México, Guerrero, Jalisco y Veracruz.
Durante el primer día de la segunda intervención de la sexta Brigada Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas en Morelos, el CED presenció los trabajos de los colectivos de la Red de Enlaces Nacionales (REN), conformada por 160 grupos de 27 estados.
En la primera intervención, la brigada localizó 11 puntos de inhumación clandestina, el más grande después de los hallazgos en las fosas localizadas en Tetelcingo y Jojutla.
“En la zona de la mina, en el municipio de Yecapixtla, en tres de los cuatro puntos que tenemos marcados como cuadrantes de búsqueda tuvimos hallazgos. Tenemos información que nos hace proyectar que esta es una fosa masiva”.
“Estamos aquí con el fin de agotar este terreno de búsqueda, y ponemos todos los esfuerzos para poder dar cierre a estos puntos de trabajo”, explicó al comité de la ONU Montse Castillo, integrante de la REN.
Otro sitio que visitó el organismo internacional fue el Gran Canal de Ecatepec, donde participó en la reactivación de la búsqueda y rastreo de humanos, con la coordinación de la Comisión de Búsqueda de Personas del Estado de México, fiscalía local y la Conagua, ya que en el lugar se han localizado restos de personas reportadas como desaparecidas.
Datos de la REN destacan que las mayores víctimas de la desaparición son hombres, entre 19 y 30 años, y las regiones son Veracruz, Tamaulipas, Coahuila, Nuevo León, Aguascalientes, San Luis Potosí, Durango y Zacatecas, donde los agresores, en su mayoría, son agentes del Estado adscritos a las corporaciones de seguridad municipal.
Los años en los que las desapariciones se volvieron más frecuentes fueron 2010, 2014 y 2016. Desde 2013, el comité de la ONU solicitó visitar el país tras los altos índices de víctimas por desaparición, pero fue rechazado. El 30 de agosto de este año, el gobierno aceptó, por lo que México es el primer país en tener la presencia del organismo internacional en esta materia.
“Todos los temas son importantes, pero el forense es principal, pues nosotros, como familiares, somos investigadores y buscadoras. La vida nos colocó aquí y hemos adquirido esa profesión. En la zona norte de Veracruz tenemos trabajos en el predio La Gallera, donde encontramos puro fragmento de hueso quemado. Eso para nosotros es preocupante, ya que es difícil la identificación; estamos rebasados de restos y de cuerpos.
“Veracruz es una fosa. Notamos la existencia de ‘cocinas’ [campos de exterminio], que es muy duro y una realidad que no podemos esconder.
“Tenemos guardadas cenizas y restos muy carbonizados y tenemos la esperanza de que podemos ser favorecidos más adelante y que eso pueda servir para darle identidad a todas esas personas que quedaron en ese lugar y en otros estados.
“Para nosotros, la llegada de la ONU es esperanzador y es un aliento para seguir”, refiere una integrante de un colectivo en Veracruz que participó en la reunión con el comité.
Juan José López, uno de los cuatro visitadores y uno de los 10 integrantes del comité, agradeció a los colectivos por la documentación, ya que ayudan al CED y a la Convención Internacional para la protección de todas las personas contra las desapariciones forzadas a articular mecanismos efectivos para que estos hechos no se repitan.
“Examinaremos con atención para que podamos realizar recomendaciones adecuadas y avanzar en la solución de este problema, porque los derechos de las víctimas es el principal objetivo que tiene el comité en el desarrollo y la aplicación para el mejor cumplimiento y desarrollo, y para hacer posible que al final tengan la dicha de poder encontrar a sus familiares”.
El CED presentará sus observaciones preliminares al gobierno de México y dará a conocer un informe público en marzo del próximo año, para compartir todas sus conclusiones y recomendaciones.