Lucía Topolansky, exvicepresidenta: «No nos podemos convertir en el kiosquito chino del Mercosur«
La semana pasada el presidente Luis Lacalle Pou reunió a dirigentes de todos los partidos políticos con representación parlamentaria para anunciar avances con China por un posible Tratado de Libre Comercio (TLC) bilateral.
Sin embargo, mucho se ha hablado sobre la relación del gobierno y la oposición, en temas como el acuerdo en el Puerto de Montevideo con la empresa Katoen Natie, la seguridad pública o el manejo de la pandemia. Desde algunos sectores se ha hecho referencia a una “grieta” que provoca el gobierno con el Frente Amplio (FA).
Entrevistada por el programa En Perspectiva (Radiomundo) la senadora por el Movimiento de Participación Popular (MPP), Lucía Topolansky, se refirió a estos y otros temas. “Me pareció bien que se hiciera esa convocatoria, hubiera querido que sea también para el acuerdo del Puerto, lo de Katoen Natie que no se si no es más trascendente que un posible TLC con China. Ese tipo de políticas que trascienden los períodos de gobierno deben conversarse, anunciarse”, aseguró Topolansky.
La senadora por el MPP se refirió a la “gravedad” y “la extensión en el tiempo” del acuerdo del gobierno y la empresa, que “trasciende seis períodos de gobierno”. Sobre el relacionamiento del FA con el gobierno comentó: “Espero que sea una nueva etapa por la salud del país. Esto no inhibe ni las potestades del Poder Ejecutivo ni del Poder Legislativo, es aparte. Si se termina firmando un TLC tiene que pasar por la autorización de los parlamentos. Cada poder tiene su espacio. Es muy bueno que haya una conversación”.
Topolansky sostuvo que “habría que debatir” si hubo o no diálogo entre gobierno y oposición durante los gobiernos del FA. “En el quinquenio que estuvo Pepe (José Mujica) la oposición participó en todos los organismos del Estado y no participó en más porque no había más organismos. Es más, cambiamos la Carta Orgánica del Banco República (BROU) para que pudiera participar”, comentó.
Además, sostuvo que en el segundo gobierno de Tabaré Vázquez se restringió la participación “en dos organismos, en ASSE y el Codicen porque él lo entendió, nosotros no estábamos de acuerdo”. En ese sentido, recordó que durante las reuniones por los cargos en entes públicos para el FA para este período se había planteado “una participación muy restringida. Tuvimos que pelear para estar en Antel y otra cantidad de cosas”. “Fue bastante caótico el tema de las venias”, acotó.
La senadora señaló que “el país tiene una buena tradición de democracia de partidos, no en vano tiene a dos de los partidos más viejos del mundo” y un partido de 50 años como el FA. “Eso lo tenemos que cuidar y se cuida con el diálogo”, añadió.
Por otro lado, algunos mensajes de los oyentes al programa daban cuenta de que no hubo diálogo del gobierno y la oposición antes de anunciarse la inversión de la empresa UPM en Uruguay, que abarcaba a varios períodos de gobierno. Topolansky dijo que “esa fue una enorme inversión para la producción de celulosa, una técnica que no teníamos en Uruguay y llevó dos períodos de gobierno”. “Gracias a esa inversión que se la heredamos al gobierno de Lacalle hay tres grandes obras en este momento que mueven la aguja del empleo y la economía uruguaya: la planta, el ferrocarril central y el viaducto”.
Sobre si se convocó o no a la oposición de la época comentó: “Se dio la información que se podía dar. No hubo ningún peligro, pero tampoco una cosa exprés como entregar algo como el puerto, porque el puerto es algo hecho. El puerto es lo que generó este país hasta simbólicamente”, comentó. Topolansky sostuvo que el puerto “es la entrada y la salida del país, es demasiado importante para un país pequeño que está en la boca de los grandes ríos”.
“No costaba nada una reunión que puede ser formal o hasta de cortesía. Katoen Natie ya descontó la inversión, esos 450 millones con los 1.000 millones que le subió el valor de las acciones ya lo pagó”, explicó.
En ese sentido, Topolansky dijo que se estudia presentar una denuncia penal por el manejo que el gobierno hizo por el acuerdo con la empresa. “Frente a determinada falta de información hicimos pedidos de informes y pedidos de acceso a la información pública y no obtuvimos las respuestas que necesitábamos. Eso nos empujó a la interpelación y la interpelación no dio las respuestas. Nosotros no pretendíamos que cayera el ministro en la interpelación, sino revisar el acuerdo”, añadió. Otra posibilidad que analizan es la de solicitarle al Poder Ejecutivo que declare nulo el acuerdo.
“Todo tiene que ser estudiado y no se puede en un caso de estos descartar de antemano”, dijo Topolansky, ya que “el tema es demasiado delicado”.
TLC con China
Topolansky cree que “sería muy bueno que el gobierno en el equipo de técnicos que va a estudiar (el TLC con China) pudiera convocar a algún técnico de la oposición como hizo con la seguridad social”. “Ese camino podría ser para el TLC”, sostuvo y comentó que seguramente se plantee esto al canciller Francisco Bustillo en la Comisión de Asuntos Internacionales de Diputados.
“Sería muy bueno que la oposición y el movimiento sindical puedan tener algún técnico. Son equipos técnicos que preparan, visualizan la balanza. Tienen una complejidad los acuerdos”, expresó y puso como ejemplo el TLC con Chile. “Es favorable una postura al TLC, pero no puede ser a costa de romper el Mercosur, ese es el punto crítico”, comentó.
“Exportamos mucho al Mercosur y la mayoría del valor agregado lo exportamos al Mercosur, que tiene otra complejidad que es Paraguay, que no tiene relaciones con China”, agregó.
Por otra parte, la senadora frenteamplista comentó que tiene dudas sobre que llegue de aquí a fin de año a hacerse el informe de prefactibilidad. «No nos podemos convertir en el kiosquito chino en el Mercosur para que vengan a bagayear hacia los otros países porque vamos a ser los asquerosos del barrio. Eso no nos conviene. Los países no se mudan», sostuvo Topolansky.
“Quiero creer que todo esto lo está evaluando el gobierno, más allá de lo que quiera comunicar para mostrar que está haciendo cuestiones en política exterior, que por ahora nuevas no ha habido ninguna. Vamos a ver qué sale de este golpe de timón cuando empiece a verse la punta de la madeja”, aseguró.
