Cuáles son los países de América Latina que aplican una tercera dosis contra el Covid-19
Coronavirus y el lujo ‘anticovid’: los países de Latinoamérica que ya aplican una tercera dosis vacunal
Por Ronald Ángel
Aunque muchos países del mundo apenas han comenzado su proceso de vacunación contra el coronavirus y en América Latina y el Caribe unos cuantos recién avanzan en la primera y segunda dosis, hay tres naciones de la región que ya comenzaron a administrar una tercera inyección de refuerzo contra el virus que causa el covid-19 y una cuarta anunció que la aplicará a personas con inmunodeficiencia.
La tercera dosis ya se aplica en República Dominicana, Chile y Uruguay, para, según dijeron sus autoridades, tener una protección extra contra las nuevas variantes, como la Delta, que la Organización Mundial de la Salud (OMS) catalogó como una «variante de preocupación», porque es más contagiosa que cepas previas y puede causar unos síntomas más graves.
República Dominicana fue el primer país de la región en comenzar a aplicar una tercera dosis contra el coronavirus, con un cronograma que inició el pasado 1 de julio, reseña un despacho de RT.
En una conferencia celebrada el 30 de junio, en la que estuvo presente el presidente dominicano, Luis Abinader, las autoridades nacionales, junto con las sociedades médicas del país, señalaron que la motivación para aplicar una tercera dosis es el surgimiento de nuevas mutaciones del coronavirus «ocho veces más contagiosas».
El mandatario dijo que «hay un consenso internacional en relación con que se necesita una dosis de refuerzo». En esa rueda de prensa se precisó que la tercera dosis se aplicaría al mes de que una persona tuviese la pauta completa con la vacuna de Sinovac y tres meses después de haberlo hecho con el fármaco de AstraZeneca.
La campaña estuvo dirigida primero al personal de salud y las personas que tienen una comorbilidad, pero luego las autoridades extendieron el llamado al resto de la población para vacunarse con esta dosis de refuerzo. La diferencia con las primeras dos inyecciones, es que esta es voluntaria.
De acuerdo con los datos del Plan Nacional de Vacunación, hasta el pasado 15 de agosto, es decir, en mes y medio de haberse iniciado el cronograma, han recibido la dosis de refuerzo 521.505 personas, incluyendo a Abinader.
Estas están sumadas entre las 10.656.985 dosis que se han aplicado en el país caribeño, donde 4.462.896 personas (alrededor del 60 % de su población) han completado su proceso de inmunización con las dos dosis que se establecieron al inicio del Plan Nacional de Vacunación.
Coronavirus en Chile: «Este refuerzo nos protegerá mejor»
En Chile, por su parte, la aplicación de la tercera dosis de la vacuna contra el coronavirus arrancó el pasado miércoles 11 de agosto.
Una semana antes, el presidente chileno, Sebastián Piñera, hizo el anuncio de este plan que, dijo, en una primera etapa se aplicaría como un refuerzo a personas mayores de 55 años que ya tienen dos componentes de Sinovac.
«Este refuerzo nos protegerá mejor, incluyendo la variante Delta, y nos dará mayores libertades y oportunidades», manifestó entonces.
Según los datos del Ministerio de Salud chileno, en este país suramericano se ha inmunizado con pauta completa al 83,37 % de la población objetivo. En concreto, se han administrado 25.711.744 dosis, de las cuales 13.548.311 corresponden a personas con única y primera dosis, y 12.673.225 que ya completaron su proceso de inmunización.
En cuanto al refuerzo, solo el lunes 16 de agosto se administraron 151.518 dosis, que se suman a las 258.535 que se habían aplicado hasta el día anterior, lo que da un total de 410.053.
Uruguay: «Es posible ofrecer una nueva dosis»
Uruguay es el tercer país que se suma en la región a vacunar con una tercera dosis de refuerzo contra el coronavirus a su población, con una campaña que inició el lunes 16 de agosto.
El plan uruguayo es aplicar la dosis de refuerzo con la vacuna de Pfizer a los inmunizados con CoronaVac, de Sinovac, y que hayan transcurrido como mínimo 90 días desde que recibieron la segunda inyección.
El pasado 28 de julio, la encargada de la Unidad de Inmunizaciones de la División de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública, Graciela Pérez Sartori, dijo que «con las vacunas disponibles, es posible ofrecer a los uruguayos que lo deseen una nueva dosis».
El Monitor de Datos de Vacunación covid-19 de Uruguay, con apenas un día de iniciada la aplicación de la tercera dosis, ya registra más de 47.000 vacunados con el refuerzo.
En total, en el país 2.413.655 personas han recibido dos dosis de las vacunas contra el coronavirus, lo que corresponde al 68,12 % de la población.
Ecuador a personas con inmunodeficiencia
En Ecuador, por su parte, la ministra de Salud, Ximena Garzón, anunció este martes que personas con inmunodeficiencia recibirán una tercera dosis de la vacuna contra el coronavirus, después de tres meses de la aplicación de la segunda dosis.
«Como ya ha sido evaluado en otros países, las personas que tengan un trastorno de inmunodeficiencia sí recibirán una tercera dosis, en su momento oportuno indicaremos los requisitos y estas serán colocadas tres meses después de la segunda dosis», dijo la funcionaria.
Hasta ahora, en este país, de poco más de 17.750.000 habitantes, se han aplicado 14.742.430 dosis de vacunas contra el coronavirus y 4.785.653 personas han completado su proceso de inmunización con dos dosis.
Coronavirus y la OMS
La posición de la OMS es que se postergue la aplicación de una tercera dosis de las vacunas contra el coronavirus hasta finales de septiembre, «a fin de que todos los países puedan vacunar al menos al 10 % de su población», según dijo el titular de la organización, Tedros Adhanom Ghebreyesus, a principios de agosto.
«Hasta el momento se han administrado más de 4000 millones de dosis de vacunas en todo el mundo. Más del 80 % de las vacunas se han distribuido en países de ingreso alto y mediano alto, a pesar de que representan menos de la mitad de la población mundial», destacó.
Detalló que los países de ingreso alto ya han administrado casi 100 dosis por cada 100 personas; mientras que los de ingreso bajo solo han podido administrar 1,5 dosis por cada 100 personas, debido a la falta de suministro.
El titular de la OMS señaló que entiende la preocupación de todos los gobiernos por proteger a sus poblaciones de la variante Delta del coronavirus, pero indicó que no es aceptable «que los países que ya han utilizado la mayor parte del suministro mundial de vacunas utilicen aún más, mientras las personas más vulnerables del mundo siguen estando desprotegidas».