Plan Cóndor | El Poder Judicial italiano condena a cadena perpetua a exmilitares chilenos
Italia: Confirman condena a cadena perpetua para exmilitares chilenos del Plan Cóndor
El proceso en Italia arrancó en 1999 con la denuncia de algunos familiares de desaparecidos, un año después de que se ordenara la detención de Augusto Pinochet tras la investigación del juez español Baltasar Garzón. Respecto del proceso, la Fiscalía de Roma ya envió órdenes de arresto al gobierno chileno para Rafael Ahumada Valderrama, Orlando Moreno Vásquez y Manuel Vásquez Chauan, quienes fueron condenados por el homicidio y la desaparición de los cuerpos de los ciudadanos italianos Omar Venturelli y Juan José Montiglio.
La Justicia de Italia ratificó la condena a cadena perpetua para tres exmilitares chilenos a los que se juzgaba en rebeldía por su implicación en la desaparición de italianos en el Plan Cóndor, la represión en América Latina en las décadas de 1970 y 1980, indicaron este jueves a Efe fuentes cercanas al juicio.
El coronel Rafael Ahumada Valderrama, el suboficial Orlando Moreno Vásquez y el brigadier Manuel Vásquez Chauan fueron sentenciados a cadena perpetua por el Tribunal de Apelación de Roma en julio de 2019, una condena confirmada después de que su abogada no presentara recurso ante el Tribunal Supremo.
La máxima Corte tiene previsto celebrar el próximo 8 de julio la audiencia en la que se esperaba el veredicto final sobre los 24 jerarcas y militares de Bolivia, Chile, Uruguay y Perú condenados en primera instancia en 2019, incluidos los tres exmilitares chilenos.
Cuando el Supremo envió las actas a las partes del juicio, estas se percataron de que por alguna razón desconocida, la abogada de los tres, Valentina Perrone, no presentó el recurso, lo que consolidaba la sentencia emitida por Apelación, según las fuentes.
La Fiscalía de Roma ya envió órdenes de arresto al gobierno chileno para Ahumada Valderrama, Moreno Vásquez y Vásquez Chauan, condenados por el homicidio y la desaparición de los cuerpos de los ciudadanos italianos Omar Venturelli y Juan José Montiglio, añadieron.
El próximo 8 de julio el Supremo debe pronunciarse sobre las otras condenas a cadena perpetua emitidas en julio de 2019 por el Tribunal de Apelación de Roma, en segunda instancia, contra un total de 24 jerarcas y militares de Bolivia, Chile, Uruguay y Perú.
Ahora deberá manifestarse sobre 19, ya que, además de los tres condenados, otros dos fallecieron en este tiempo: el que fuera ministro del Interior durante la dictadura de Bolivia, Luis Arce Gómez, y el uruguayo José Horacio «Nino» Gavazzo Pereira.
El veredicto final es especialmente importante para el único de los acusados que actualmente reside en Italia, el exmilitar uruguayo Jorge Néstor Troccoli, de 69 años, quien escapó de la justicia de su país en 2007. En primer grado resultó absuelto, y condenado en segundo.
El proceso en Italia arrancó en 1999 con la denuncia de algunos familiares de desaparecidos, un año después de que se ordenara la detención de Augusto Pinochet tras la investigación del juez español Baltasar Garzón.
En estas más de dos décadas la justicia intentó depurar responsabilidades por la desaparición de ciudadanos latinoamericanos con orígenes italianos, opositores políticos y activistas de izquierdas que desaparecieron en las sombras de la conocida Operación Cóndor.
Investigación delató importante participación de chilenos
Italia emitió en el juicio de Apelación 24 condenas a cadena perpetua, todas menos una, la de Troccoli, en contumacia, pues los acusados, muchos de avanzada edad, están en sus países, condenados o en libertad y no se apersonaron en Roma.
Además de los tres condenados en firme y los dos fallecidos ya mencionados, otro tres son de Perú: el expresidente Francisco Morales Bermúdez y los exmilitares Germán Ruiz Figueroa y Martín Martínez Garay.
Los chilenos, además de los tres condenados en firme, son siete: Hernán Jerónimo Ramírez Ramírez, Pedro Octavio Espinoza Bravo, Daniel Aguirre Mora y Carlos Luco Astroza.
El grupo más numeroso es el de los uruguayos, donde hay 13 condenados: Además de Troccoli figuran los represores José Ricardo Arab Fernández, Juan Carlos Larcebeau Aguirregaray, Pedro Antonio Mato Narbondo, Luis Alfredo Maurente Mata, Ricardo José Medina Blanco, Ernesto Abelino Ramas Pereira, José Sande Lima, Jorge Alberto Silveira Quesada, Ernesto Soca, Gilberto Vázquez Bissio y Juan Carlos Blanco.
Veredicto final sobre el Plan Cóndor se conocerá el 8 de julio, estaban incluidos Arce Gómez y García Meza
El veredicto final sobre el Plan Cóndor, que incluyó a los extintos Luis Arce Gómez y Luis García Meza, se conocerá el 8 de julio. En el proceso se hallan también exmilitares de Chile, Uruguay y Perú que en 2019 fueron condenados por la desaparición de italianos en el marco del Plan Cóndor activado en la represión en América Latina entre 1970 y 1980.
La Corte Suprema de Italia leerá el fallo definitivo en el proceso activado por el Estado italiano en atención al pedido de los familiares de las personas desaparecidas o de descendientes de italianos en los países donde se ejecutó el Plan Cóndor.
“Esta sentencia sale después de más de 20 años en que Italia decidió realizar acciones al respecto”, se informó.
La Corte emitió en 2019 la sentencia en la cual no figuró el nombre de García Meza debido a que falleció en abril de 2018.
El 2019 fue el tiempo de apelaciones por parte de los sentenciados y el 8 de julio se leerá el fallo definitivo. García Meza y Arce Gómez no estarán en el fallo porque fallecieron.
El 8 de julio de 2019, la justicia italiana condenó a cadena perpetua a 24 represores sudamericanos, la mayoría en ausencia, por la desaparición y muerte de 23 opositores de origen italiano.
En la lista de acusados estaban el exministro del Interior de Bolivia Luis Arce Gómez, el expresidente de Perú, Francisco Morales Bermúdez, el exministro de Relaciones Exteriores de Uruguay, Juan Carlos Blanco. Todos fueron condenados por homicidio voluntario con agravantes.
Tras una larga investigación, el fiscal italiano Giancarlo Capaldo abrió juicio contra un grupo de 34 exoficiales y civiles, agentes de la Policía y de los servicios secretos de Chile, Uruguay, Bolivia y Perú, varios de ellos ya murieron.
