Nicaragua | Falleció Paul Oquist, secretario de Políticas Públicas y asesor de Daniel Ortega
El secretario de Políticas Públicas del régimen de Daniel Ortega, Paul Oquist Kelly, falleció a las 11:00 p.m. del lunes, pero la familia informó de su deceso la madrugada de este martes, detalló la primera dama y vicepresidenta, Rosario Murillo, en su comunicación diaria de la tarde.
Murillo confirmó que la esposa de Oquist está enferma, pero no dijo cual es el mal que la aqueja ni por qué razón de salud murió su esposo. Oquist será incinerado y en los próximos días se harán sus honras fúnebres, agregó la primera dama.
«El comandante Chávez le llamaba el gringo bueno. Sin duda las sanciones que le impusieron son ejemplo de su inquebrantable», manifestó Murillo en su discurso.
Por la mañana, el Gobierno confirmó la muerte de Oquist a través de una nota de prensa firmada por Daniel Ortega y su esposa Murillo, publicada por los medios oficialistas.
«Celebramos la vida de Paul, agradecidos al Señor, porque nos permitió contar con su inteligencia especial, con su visión fraternal, con su propuesta de justicia y derechos para nuestro pueblo y para los pueblos del mundo; con ese insuperable dominio de las relaciones internacionales, de los organismos, que conocía tan bien, y con los que nos relacionaba de manera profunda y extraordinaria», expresa la nota de prensa.
Minutos antes de la confirmación del Gobierno, el presidente de la Asamblea Nacional, Gustavo Porras, durante la apertura de la sesión parlamentaria de este martes, se refirió a Oquist como «un hermano, un compañero», y lo reconoció como «una de las personas más importantes y prominentes de este país, un verdadero nicaragüense, más nicaragüense que muchos que nacieron en este país».
Según la información extraoficial, falleció en el Hospital Militar, donde llevaba varios días internado.
Oquist, de origen estadounidense, era uno de los más de 20 funcionarios de Ortega sancionados por el Gobierno de Estado Unidos, durante la administración de Donald Trump.
Edwin Castro, jefe de la bancada del Frente Sandinista en la Asamblea, dijo que «ha pasado a otro plano de vida un hombre que amó Nicaragua por encima de todas las cosas». Agregó que «Paul dedicó su vida al desarrollo de Nicaragua, dedicó su energía a llevar la verdad internacionalmente de los cambios, de los avances de esta Patria».
En los últimos años, Paul Oquist se había convertido en un operador internacional del régimen Ortega-Murillo, buscando incidir para que le quitaran las sanciones a los funcionarios y familiares de Ortega.
En octubre del año pasado, cuando se conoció la sanción hacia él, la Oficina de Control de Bienes Extranjeros (OFAC por sus siglas en inglés) del Departamento del Tesoro del país norteamericano, reveló Oquist estaba involucrado en actos de falsa narrativa y obstrucción a la democracia de Nicaragua.
«Representa al Gobierno de Nicaragua a nivel internacional en una variedad de roles y juega un papel principal en la difusión de desinformación para encubrir los crímenes del régimen y las fechorías de horribles abusos a los derechos humanos. En numerosas entrevistas con medios internacionales de habla inglesa y en reuniones con representantes extranjeros, Oquist ha difundido las falsas narrativas y la propaganda del régimen de Ortega. Además, Oquist ha defendido el caso de Ortega a nivel internacional con un flujo incesante de mentiras para ocultar o justificar el abuso del régimen», manifiesta la Resolución de la sanción.
Castro solicitó a los parlamentarios aplaudir durante un minuto a Oquist. «Gracias Paul por tu cariño a Nicaragua», finalizó el jefe de los sandinistas.
Las consecuencias de las sanciones
Seis días después de haber sido sancionado, el régimen orteguista empezó a quitarle al asesor poderes y a cancelar su nombramiento en algunas entidades estatales, como había hecho con otros sancionados por el Departamento del Tesoro.
Lo retiró de la junta directiva de la Empresa Nicaragüense de Petróleo (Petronic); dejando sin efecto el Acuerdo Presidencial No.46-2007 , publicado en La Gaceta, diario oficial No. 21 de 30 del enero de 2007. Asimismo canceló su nombramiento como miembro de la junta directiva de la Empresa Nicaragüense de Minas (Eniminas); contenido en el Acuerdo Presidencial No. 121-2017, publicado en La Gaceta, diario oficial No. 161 del 24 de agosto de 2017.
«Duro golpe para orteguismo»
Oquist era considerado la mano derecha de Ortega y el ideólogo de los proyectos sociales y políticos del régimen, entre ellos el proyecto del Canal Interoceánico que nunca se concretó. El general en retiro y exdiputado ante Parlamento Centroamericano (Parlacen), Hugo Torres, dijo que “la muerte de Oquist es un golpe duro para el régimen orteguista”.
“Era el colaborador más cercano para la articulación de las políticas nacionales y en gran medida internacionales del régimen. La persona más calificada que tenía Ortega en su círculo inmediato era Paul Oquist. Por ejemplo, el tema de la farsa del Canal Interoceánico, Paul Oquist anduvo en Europa, en varios países de América, el Parlacen, propagandizando el supuesto proyecto del Canal, diciendo una zarta de mentiras, pero sin que se le sonrojara la cara, y él lo hacía de manera consciente, porque no era ningún ignorante, muy preparado”, dijo Torres.