El Mercosur y su deuda democrática – Por Tomás Enrique Bittar Navarro, especial para NODAL
Los conceptos vertidos en esta sección no reflejan necesariamente la línea editorial de Nodal. Consideramos importante que se conozcan porque contribuyen a tener una visión integral de la región.Por Tomás Enrique Bittar Navarro *
Es un verdadero desafío poder hablar del desarrollo institucional del Mercosur a los 30 años de la firma del Tratado de Asunción, si alguien me pregunta; de que sirve el Mercosur? Es muy fácil encontrar respuestas echando mano a las cifras del comercio intrazona, el intercambio comercial, la balanza positiva y mil y un aspectos técnicos y jurídicos que me ayudarían a salvar la situación.
Pero en realidad hay más aspectos que podrían ensombrecer cualquier explicación técnica o política, solamente me permito mencionar el primer y mas importante punto; parte del artículo primerodel Tratado de Asunción, “Este Mercado Común implica: La libre circulación de bienes, servicios y factores productivos entre los países, a través, entre otros, de la eliminación de los Derechos Aduaneros y restricciones no arancelarias la circulación de mercaderías y de cualquier otra medida equivalente” y he aquí solo el principio de nuestra deuda.
Y es ahí donde empieza el calvario, podría decir que la naturaleza intergubernamental de esta asociación, sumado a la inflación normativa, la mora en la internalización de las normas y es más, podría mencionar lo dicho por un ex canciller argentino que en oportunidad de un encuentro del CMC dijo, que existe como una tolerancia reciproca al no cumplimiento por parte de los estados parte, pero al final solo son producto de un aspecto fundamental, la deuda democrática del Mercosur, se debería entender que la misma en esta ocasión se limita exclusivamente a los relativo al funcionamiento institucional del mismo.
Dicho esto me gustaría citar al Doctor Alejandro Perotti, que muy acertadamente propuso en una de sus tantas publicaciones que “Aunque la historia haya comprobado que la democracia es condición indispensable para la integración económica, el predominio de las diplomacias nacionales en la conducción de estos procesos, por estar vinculadas a los Poderes Ejecutivos, hacen del cuestionamiento de la legitimidad democrática de la integración un debate universal y permanente.”
Solo la representatividad da legitimidad a los actos de gobierno, la participación, la pluralidad y la transparencia son aspectos indispensables para lograr la tan anhelada integración. Cabe mencionar que en ámbitos, ya sean gubernamentales o académicos están queriendo instalar que el MERCOSUR perdió su identidad, que esta desfigurado por la intervención política y quieren instalar el discurso conservador de “flexibilizar” las actuaciones en bloque.
Respetuosamentedisiento con esa propuesta y creo en mantener nuestra fuerza en bloque, concentrarnos en solucionar la agenda local y eliminar las trabas al comercio intrazona independientemente de lo relacionado al AEC.
El Parlamento del Mercosur es el articulador democrático por naturaleza, los gobiernos en vez de postergar o tratar de inmovilizar su desarrollo institucional, deberían encontrar la manera de iniciar el debate de ampliar las prerrogativas legislativas y co decisión de este órgano y comenzar la fase final del largo PROCESO de integración.
Tenemos una nueva oportunidad, con lo resuelto por el CMC en diciembre pasado mediante la Decisión 09/20, los gobiernos y los actores políticos tienen una nueva oportunidad de iniciar la consideración de actualizar el Mercosur dotándolo con un ámbito legislativo y a su vez pensar en consolidad el equilibrio de poderes con un ámbito jurisdiccional común.
* Parlamentario del MERCOSUR