Las mujeres de la ciencia argentina, protagonistas en la pandemia

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La presidenta del Conicet, Ana Franchi; la directora técnico científica de ANLIS-Malbrán, Claudia Perandones; las virólogas Andrea Gamarnik y Mariana Viegas, junto a la secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti, son algunas de las mujeres científicas que se destacaron por su rol institucional y de investigación en la lucha frente a la actual pandemia por coronavirus.

En el marco de la celebración del Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, que se recuerda cada año el 11 de febrero, estas cinco mujeres son sólo una pequeña muestra de la importante tarea que cumplieron y cumplen las científicas, ya sea con sus investigaciones o bien como protagonistas en la toma de decisiones.

Carla Vizzotti

Carla Vizzotti, actual secretaria de Acceso a la Salud y persona clave en las decisiones que se tomaron desde la cartera sanitaria frente a la pandemia, es médica y especialista en enfermedades infecciosas; fundó la Sociedad Argentina de Vacunología y Epidemiología (SAVE) de la que fue presidenta hasta que asumió su cargo en el Ministerio.

Su anterior paso por un cargo público fue como responsable de la Dirección Nacional de Control de Enfermedades Inmunoprevenibles (Dinacei) del Ministerio de Salud entre 2007 y 2016), período en el cual se amplió el calendario nacional de vacunación colocando al país entre los países con un mejor calendario del mundo.

Ana Franchi

Ana Franchi es doctora en química, cofundadora de la Red Argentina de Género, Ciencia y Tecnología (RAGCyT) y actual presidenta de Conicet, organismo al cual pertenecen la mayoría de las y los investigadores que realizaron descubrimientos y aportes clave frente al coronavirus.

Portadora de un vasto currículum profesional que incluye más de 160 publicaciones en revistas científicas y la dirección de doce tesis doctorales, Franchi dedicó su producción a la investigación en salud reproductiva, más específicamente al estudio de la fisiopatología del embarazo y el parto.

«Esta pandemia demostró más que nunca que la ciencia tiene que estar al servicio de que la humanidad viva mejor. Un ejemplo es lo que está sucediendo con las vacunas, el avance científico está pero después…¿quién se beneficia con ese avance?, ahí está el punto de la discusión», expresó Franchi a Télam.

Andrea Gamarnik

Los aportes de Andrea Gamarnik frente a la pandemia son múltiples -como lo han sido históricamente a toda la ciencia-: jefa del Laboratorio de Virología Molecular de la Fundación Instituto Leloir (FIL), una de las responsables de la Unidad Coronavirus -creada por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación (Mincyt) junto al Conicet y la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (Agencia I+D+i)- la viróloga pasa largas horas en su laboratorio donde, entre muchas otras cosas, desarrollaron los test serológicos argentinos Covid-AR.

La producción de estos test, capaces de detectar los anticuerpos generados por el organismo al entrar en contacto con el virus, ya han superado un millón de determinaciones y se utilizan en todo el país con diversas finalidades: control de la transmisión en barrios, cuidado del personal de salud, vigilancia en personal de geriátricos, selección de donantes de plasma para terapias y seguimiento de la respuesta inmune de los vacunados, entre otras.

«El desarrollo de los kits serológicos fue una experiencia inédita que trazó una nueva forma de trabajo colaborativo. Nos permitió establecer un nexo entre los laboratorios de investigación del Conicet, profesionales de la salud en cientos de hospitales del país, autoridades de salud, entes regulatorios y procesos productivos, hasta llegar a la utilización de los kits en la población. El éxito de este proyecto debe servir de aprendizaje para extrapolarlo a otras problemáticas de enfermedades infecciosas locales», puntualizó Gamarnik, con la mirada puesta en el mañana.

Claudia Perandones

Claudia Perandones se recibió con diploma de honor en la Facultad de Medicina de la UBA, y su formación como genetista incluyó lugares de excelencia en Inglaterra y Estados Unidos, además de haber recibido el premio Houssay al investigador del 2011.

Desde el comienzo de la pandemia, el rol de ANLIS-Malbrán -cuya directora científico técnica es Perandones- fue clave: fue allí donde se pudieron diagnosticar los primeros casos de coronavirus porque además de contar con el equipamiento, tenían a los profesionales con la suficiente «expertise».

Desde marzo de 2020 el Malbrán transfirió tecnología y capacitó a laboratorios de todo el país que hoy integran la red que permitió la descentralización de los diagnósticos.

Pero además, el Malbrán logró secuenciar el genoma del virus y en los últimos meses, adquirió un equipamiento para realizar secuenciación genómica en mayor escala, tarea clave para realizar vigilancia sobre las variantes que circulan en el país; también asesoran al gobierno en la producción nacional de insumos y en el desarrollo de estrategias.

Mariana Viegas

Mariana Viegas es viróloga, investigadora de Conicet y responsable del Laboratorio de Virología del Hospital de Niños Dr. Ricardo Gutiérrez y una de las impulsoras del Proyecto Argentino Interinstitucional de Secuenciación Genómica de SARS-CoV-2 (Proyecto PAIS) creado por el ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación que nuclea a laboratorios públicos y privados y otros organismos para realizar vigilancia genómica.

En abril el grupo ya había logrado secuenciar el virus de 26 muestras de pacientes; actualmente el Proyecto País se encuentra -al igual que el Malbrán- haciendo vigilancia nacional para detectar las cuatro variantes del coronavirus (Reino Unido, Sudáfrica, Amazonas y Río de Janeiro) que preocupan a la comunidad científica y a los Gobiernos.

Télam


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