La CISS propone un nuevo modelo de seguridad social para la maternidad
Solo 13 de 19 países en el Caribe garantizan acceso universal a servicios de salud materna. Esto según el estudio “Maternidad y seguridad social en el Caribe”, realizado por la Conferencia Interamericana de Seguridad Social.
La nota técnica de autoría de Lourdes Jiménez, investigadora de la CISS, también emite recomendaciones de política pública para garantizar que la maternidad efectivamente sea de acceso universal, independientemente de la condición laboral de las personas.
De acuerdo con el documento, solo el 20% cumple con los estándares mínimos sugeridos de protección en materia de licencia de maternidad: 14 semanas y una remuneración de al menos 66.6% del sueldo que percibía la trabajadora.
Respecto a las licencias de paternidad están disponibles en 31.5% de los casos analizados. Por último, en 52.6% de los casos analizados se prevé la provisión pública de servicios de cuidados de primera infancia.
Derivado de ello, la Conferencia diseñó un modelo de seguridad social de maternidad que promueve una deconstrucción de los roles de género en el cuidado y la crianza de la infancia. Se trata de una política pública familiar con enfoque de género y de derechos que busca proteger a las mujeres del riesgo social de la maternidad y compensar con medidas efectivas los costos diferenciales que asumen en el momento de ser madres. La corresponsabilidad y la igualdad suponen amplios beneficios para las familias, la sociedad y la economía.
“Proponemos reformas que incluyen hacer universal el acceso a los servicios de salud reproductiva y materna, ampliar la duración y el porcentaje de remuneración de la licencia de maternidad, garantizar licencias de paternidad y discutir la viabilidad y pronta implementación de licencias parentales”.
Además, sugerimos la provisión estatal de bienes indispensables para el bebé y servicios de cuidados de la primera infancia con rectoría estatal que asegure acceso, calidad y oferta suficiente.
Por último, el modelo de protección de las mujeres frente al riesgo social de la maternidad promovido por esta Conferencia es de universalidad, es decir, que su goce y disfrute no se condicione a la situación laboral de las personas”, señaló Jiménez Brito.
La CISS asegura que la maternidad requiere un diseño institucional trasversal que implique a todas las áreas del Estado desde un verdadero enfoque de género y de derechos orientado a la universalidad; por ello, en transferencias, se requiere de licencias familiares remuneradas de maternidad, de paternidad y parentales; kit de bienvenida con artículos indispensables para el recién nacido y asignaciones monetarias por hijo hasta el año de edad; en servicios, acceso a salud pública con enfoque de género: reproductiva, prenatal y postnatal y acceso a servicios de cuidados infantiles de calidad y asequibles.
En lo que respecta a propuestas de reformas en el área de licencias familiares, se busca aumentar el número de semanas de licencia de maternidad a 18, con una tasa de remuneración del 100% del sueldo que recibía la trabajadora, eliminar todo tipo de barreras que impidan que la trabajadora acceda a su derecho a la licencia de maternidad, como requisitos de antigüedad laboral y mínimos de cotización y finalmente, sancionar una ley que garantice una licencia de paternidad de cuatro semanas de duración remunerada al 100%.
En transferencias monetarias y en especie directas, se propone que los gobiernos del Caribe incluyan en un modelo de seguridad social de la maternidad la entrega de un paquete de maternidad que contenga ropa y artículos indispensables para el cuidado del bebé, así como una prestación monetaria no retributiva mensual desde el nacimiento hasta el primer año de vida del niño o la niña.
Para acceso a servicios de salud reproductiva, se pretende el acceso de las mujeres y hombres tanto a información como a servicios de planificación familiar, modelo de atención prenatal con un mínimo de ocho contactos a lo largo del embarazo, sancionar a quienes ejerzan alguna forma de violencia obstétrica y establecer la reparación del daño, y promover un cambio de paradigma en la atención de la parturienta: trato digno y humano, y atención sanitaria posnatal, con dos contactos o visitas posnatales de las puérperas con intervención de los profesionales de salud mental para un adecuado diagnóstico y eventual tratamiento de los transtornos de este tipo.
Finalmente, en servicios de cuidados infantiles, se propone que el modelo de cuidado de primera infancia debe ser una prestación universal que forme parte de un programa de seguridad social accesible para todos los niños y niñas, independientemente de la condición laboral de sus padres; prestar servicio desde el momento en el que finalicen los esquemas de licencias familiares vigentes en cada país; ser de calidad, es decir, procurar que sea un servicio de cuidados profesionales, y brindar un servicio en un horario extendido, de al menos nueve horas diarias que permita a los padres conciliar sus actividades laborales en forma efectiva.
Conferencia Interamericana de Seguridad Social