UNDAV: La experiencia de los intercambios internacionales en tiempo de pandemia
Intercambios internacionales en tiempo de pandemia
Por Equipo del Departamento de Cooperación Internacional
El primer cuatrimestre de 2020 fue especial para la Universidad Nacional de Avellaneda (UNDAV) por ser el que más movilidades internacionales tuvo en simultáneo en estos diez años. Justo en el momento en que los primeros y las primeras estudiantes comenzaban a llegar a la Argentina y se instalaban en sus hogares, el COVID-19 irrumpió con crudeza obligándolos a quedarse en sus casas. Pero, lejos de que esta situación impidiera realizar con éxito los intercambios, la Universidad no sólo garantizó los estudios de quienes estaban en el país, sino que también permitió a quienes volvieron o no pudieron llegar realizar el intercambio desde su país de origen. Sin planificarlo, la UNDAV se había anticipado a lo que hoy forma parte de la agenda del sistema educativo: los intercambios internacionales virtuales. El camino no fue fácil y requirió de trabajo articulado y de gran acompañamiento.
Fueron diversos los casos que se presentaron y de variada naturaleza. El más común fue el de aquellos/as estudiantes que llegaron al país entre fines de febrero (en su mayoría estudiantes de la Universitá La Sapienza, de Italia). Se instalaron en sus hogares, pudieron conocer las instalaciones de la Universidad y, a los pocos días, con el aislamiento obligatorio, debieron quedarse en casa. Pero, además, existieron los casos de los y las estudiantes de la Universidad de Guadalajara, México, quienes llegaron al país durante el aislamiento, con lo cual se vieron obligados a ir desde el Aeropuerto directo hacia sus hospedajes.
“Mi experiencia ha sido buena pese a no poder siquiera conocer la Universidad. Pude conocer y aprender sobre Buenos Aires gracias a las docentes que crearon una forma muy divertida de recorrer el conurbano y los barrios que lo conforman”, explicó Nathalí, estudiante de Turismo de México. Y se le sumó su compatriota estudiante de Arquitectura, Isaac: “Pese a todo, le tomé mucho cariño a la ciudad y a sus áreas verdes. Fue una experiencia que nos permitió aprender a cómo salir adelante en situaciones inesperadas”.
Otra experiencia fue la de Miriam, quien había llegado a la Argentina, como sus compañeros, pero que por la situación decidió regresar a Italia. “Por desgracia, nada se dio como había planeado, pero afortunadamente puedo decir que no me arrepiento de haber optado por continuar el intercambio, ya que pese a las dificultades he podido mejorar la lengua y conocer realidades sudamericanas que hasta ahora conocía poco; estoy agradecida a la UNDAV y deseo poder volver pronto y vivir la experiencia que no he podido tener plenamente”, analizó.
El caso de Alondra, de Guadalajara, es un tanto especial: no pudo abordar su avión y, sin embargo, la UNDAV le dio la posibilidad de cursar desde México. “Estaba todo listo, tenía los pasajes en mano y las maletas empacadas cuando supe que Argentina había cerrado sus fronteras. Había perdido la esperanza hasta que la UNDAV me ofreció la posibilidad de seguir el intercambio en línea, una oportunidad totalmente inesperada para mí, algo por lo que estoy muy agradecida”, expresó la estudiante de la Maestría en Educación Física y Deportes.
Por último, es destacable también la situación de Yésica y Diana, dos estudiantes del Colegio Mayor de Antioquia, Colombia, cuyo intercambio consiste en una práctica preprofesional en el equipo del Trayecto Formativo de Trabajo Social Comunitario, y que tampoco pudieron asistir personalmente a la UNDAV: “Teníamos un plan perfecto: conocer lugares, tener una cercanía con los barrios, las villas y dejar huellas en nuestro paso, y luego supimos que no iba a ser posible. Pero le dimos la bienvenida a la virtualidad y al reto de cómo hacer de TSC un acercamiento al territorio desde la interfaz de la Internet y, la verdad, ha sido maravilloso, nos ha permitido sentir la riqueza de los procesos de una manera diferente”, manifestaron.
Para el segundo cuatrimestre la UNDAV participará de diversos programas de intercambio virtual. Esta experiencia facilitará no sólo la recepción sino también que estudiantes de la UNDAV puedan cursar materias en universidades de diferentes países de Latinoamérica.
Fuente-Universidad Nacional de Avellaneda