América Latina y el Caribe supera los 3 millones de casos y se mantiene como el epicentro de la pandemia
Latinoamérica supera los tres millones de casos positivos de coronavirus
Hasta este martes Latinoamérica registraba un total 3.034.542 contagios y 132.776 decesos, debido en gran medida a las cifras del coronavirus en Brasil, México, Perú y Chile que concentran alrededor del 80 por ciento de los casos en la región.
En Brasil, las autoridades sanitarias confirmaron este martes 45.305 contagios de coronavirus en las últimas 24 horas, que se suman a un total de 1.674.655 infectados desde el inicio de la pandemia en el país.
Según el más reciente reporte del Consejo Nacional de Secretarios de Salud (CONASS), fueron registradas otras 1.254 nuevas muertes por la enfermedad. Así, el total de fallecidos alcanza los 66.868.
Perú, por su parte, ocupa la segunda posición en la región por casos confirmados, al registrar un total de 309.278 positivos y 10.952 muertes, según información del Ministerio de Salud.
Chile elevó a 301.019 la cifra de contagios del nuevo coronavirus (COVID-19), de los cuales 6.434 fallecieron.
De acuerdo con el reporte del Ministerio de Salud en 24 horas se reportaron 2.462 nuevos casos y 50 muertes más por el virus.
México alcanzó los 32.014 fallecimientos a consecuencia de la Covid-19, tras registrar 895 nuevos decesos, según informó la Secretaría de Salud este martes.
Asimismo, el país latinoamericano sumó 6.258 casos confirmados de coronavirus en las últimas 24 horas, con lo que la cifra total de contagios desde el inicio de la pandemia se elevó a 268.008.
Colombia, por su parte, registra 124.494 casos positivos de coronavirus y 4.359 fallecidos hasta este martes; mientras que Argentina acumula 83.426 contagios y 1.644 decesos; y Ecuador, en tanto, ya suma 63.245 infectados por covid-19 y 8.120 víctimas fatales, entre muertes confirmadas y «fallecidos probables».
La directora de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Carissa Etienne, informó que la región de América Latina y el Caribe ha desplazado a EE.UU. como el epicentro del coronavirus en el continente.
«Hace dos meses, EE.UU. representaba el 75 por ciento de los casos de la Covid-19 en nuestra región. La semana pasada, EE.UU. reportó menos de la mitad de los casos en la región, mientras que América Latina y el Caribe registraron más del 50 por ciento de los casos», dijo Etienne.
De acuerdo al director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, la pandemia se está acelerando, como muestra el creciente número de casos diarios, aunque se ha estabilizado su letalidad, ya que «muchos países han logrado reducir el número de muertes».
La OMS detalló que los casos de coronavirus superan los 11.9 millones en todo el planeta, mientras que la cifra de muertes asciende a 546.765.
De ese total, América registra 6 millones de contagios y más de 260.000 muertes a causa del virus. Del total de casos en el continente, latinoamérica concentra más de la mitad de las infecciones.
América es seguido por Europa con 2.8 millones de casos y que el martes superó la barrera de los 200.000 fallecidos.
Coronavirus. América Latina desplaza a EU como epicentro de contagios
Empujada sobre todo por Brasil, la pandemia de coronavirus ha ganado fuerza en Latinoamérica en las últimas semanas, mientras que Estados Unidos aporta ahora menos casos en toda la región americana, dijo el martes la Organización Panamericana de la Salud.
“Todos debemos permanecer alertas, pero especialmente en los países que están viendo una aceleración de los casos”, advirtió la directora de la OPS, Carissa Etienne, en una conferencia virtual semanal que organiza el organismo desde Washington.
“Esta es una pandemia de proporciones sorprendentes y no tenemos otra opción más que seguir poniendo toda nuestra energía para controlarla”, sostuvo.
Desde el comienzo de la epidemia hace seis meses, se han registrado 5.9 millones de casos de coronavirus en la región de las Américas y casi 167 mil muertos. En la última semana hubo 737 mil casos, un aumento de casi 20% con respecto a la semana anterior, y 22 mil muertes, 9% más que la anterior.
Sin embargo, se están viendo cambios: Estados Unidos, que hace dos meses representaba 75% de los casos de la región, la semana pasada reportó poco menos de la mitad de los contagios regionales (48.6%), mientras que Latinoamérica y El Caribe reportaron poco más de 50% de los casos, un cuarto de ellos en Brasil, según la OPS.
Brasil, cuyo presidente Jair Bolsonaro reveló el martes que dio positivo en la prueba de Covid-19 después de meses de minimizar la gravedad de la pandemia, representa 27.1% de los casos de todo el continente americano, y 24.3% de las muertes.
Juntos, Estados Unidos y Brasil suman 75.7% de todos los casos, y 72.9% de las muertes reportadas en las Américas.
Etienne, quien destacó que cada día los científicos están aún aprendiendo sobre cómo se contagia la enfermedad, dijo que la región está aún experimentando la primera ola de la pandemia y los casos seguirán en ascenso.
“Esta ola está desplazándose ahora hacia el interior de cada país, afectando áreas que no habían tenido muchos casos anteriormente”, expresó la funcionaria. “Es preocupante”, aseguró y entre las razones mencionó el cansancio de la población por las medidas de distanciamiento social y prevención y la falta de capacidad de los sistemas sanitarios en las áreas rurales.
La funcionaria admitió que los gobiernos sienten presión por abrir la economía y por el cansancio de la población, pero dijo que en los próximos meses deberán seguir implementándose medidas en todos los países, incluso en aquellos que registren una disminución de los casos.
“Todos podemos ayudar a superar esta crisis», dijo Etienne. “Todos tienen un rol”, señaló tras explicar que esto va desde el nivel individual poniéndose máscaras y manteniendo distancia, hasta el nivel de los gobiernos implementando políticas de prevención y control.
Mencionó también que existen desafíos, entre ellos, cuidar la salud del personal médico y sanitario, que ha sido severamente afectada por la epidemia, continuar atendiendo otras enfermedades e implementando campañas de vacunación.
A nivel global, más de 11.6 millones de personas se han enfermado y más de 539 mil han muerto de coronavirus según el Centro de Ciencias e Ingeniería de Sistemas de la Universidad Johns Hopkins, que basa sus datos en los informes de los gobiernos y las autoridades de salud de cada país.
En la mayoría de la gente este virus provoca síntomas leves o moderados que desaparecen en dos a tres semanas, pero en algunas personas, sobre todo los adultos mayores y quienes padecen trastornos de salud subyacentes, puede causar enfermedades más graves e incluso la muerte.
Algunos países latinoamericanos salen del… ¿confinamiento?
Por Ivet González
La mayoría de los países de América Latina se acercan en este mes de julio a su punto más alto de contagios por covid-19, aun así algunos de ellos ya enfrentan los retos de la desescalada, eso sí en una manera muy propia de la región más desigual del planeta.
Y justo por las profundas brechas económicas que afectan a las poblaciones del área, las cuarentenas y otras medidas de aislamiento y distanciamiento resultan insostenibles para amplios segmentos de la población de los 33 países latinoamericanos y caribeños, donde habitan 629 millones de personas.
“Para mi comunidad fue imposible estar confinada por completo ya que existe un grado muy alto de pobreza: había que salir a trabajar para llevar el sustento a la familia… se vive al día”, contó a IPS la herbolaria Lucía Pérez, desde la ciudad de San Cristóbal de las Casas, en el sureño estado mexicano de Chiapas.
“En América Latina, las personas que han estado en cuarentena por dos incluso tres meses, es porque tienen las condiciones de hacerlo pero la inmensa mayoría de nuestras poblaciones no puede sostener un nivel de confinamiento por tan largo tiempo”: José Moya.
Con medidas de protección, Pérez tampoco se mantuvo aislada porque apoya a las personas que solicitan sus servicios. “La información debería ser más amplia y con más opciones de prevención. Una de ellas y muy importante sería recurrir a las plantas medicinales que están al alcance de todos”, defendió quien es una de las autoras de un manual colectivo de medicina natural para prevenir la covid.
“El confinamiento no ha sido homogéneo en toda nuestra población”, dijo a IPS en La Habana el epidemiólogo peruano José Moya, representante en Cuba de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y con una trayectoria de trabajo en el continente.
“En América Latina, las personas que han estado en cuarentena por dos incluso tres meses, es porque tienen las condiciones de hacerlo pero la inmensa mayoría de nuestras poblaciones no puede sostener un nivel de confinamiento por tan largo tiempo”, indicó el especialista, que también representa a la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El alto porcentaje del trabajo informal y familias que viven al día, de personas que no acceden a agua y saneamiento, de ausencia de neveras para guardar alimentos, las condiciones de hacinamiento y limitada cobertura del comercio electrónico y servicios por esa vía, obstaculizan el confinamiento recomendado.
Con el informe “La crisis de la covid-19 y el empleo informal”, la Organización Internacional del Trabajo calculó que son informales 158 millones de los 292 millones de personas empleadas en América Latina. Otros estudios revelan que 65 millones de habitantes carecen de agua y jabón, y 55 millones de los hogares son precarios.
“Todos estos elementos han provocado un nivel de transmisión sostenido, que lamentablemente ha condicionado situaciones tan extremas como el colapso de los servicios de salud en varios de nuestros países”, continuó Moya, sobre la pandemia que hasta el 6 de julio acumulaba en la región 2 881 971 casos y 126 942 muertes.
En su mapa mundial de seguimiento de la covid, la Universidad Johns Hopkins, colocaba este martes 7 a Brasil como el segundo país en contagios, solo detrás de Estados Unidos, y a Perú y Chile, en quinto y sexto lugar, después de India y Rusia.
En caso de mantenerse las condiciones actuales, la OPS pronostica que Chile y Colombia sufrirán el pico de casos hasta la mitad de este mes de julio; México, El Salvador, Guatemala, Honduras, Panamá, Argentina, Bolivia, Brasil y Perú lo vivirán en agosto; mientras Costa Rica lo padecerá en octubre.
Nicaragua es hasta ahora el único país sin tomar medidas de aislamiento. Y Venezuela, realiza una cuarentena siete por siete, de una semana más flexible y otra de confinamiento muy estricto, como la iniciada el lunes 6, mientras Argentina, Buenos Aires y su área metropolitana debieron regresar a una rígida cuarentena el 1 de julio después que un intento de desescalada disparó los contagios.
A pesar del duro panorama general, Costa Rica, Panamá, Honduras, Cuba, República Dominicana, Haití, Uruguay, Ecuador, Paraguay, Perú, varias regiones mexicanas y algunas ciudades brasileñas implementan medidas de desescalada, con lo que afrontan los retos sanitarios y económicos de la recuperación de la epidemia.
“Para esta etapa es fundamental mantener un sistema de vigilancia epidemiológica y vincular esa información con otros datos de carácter social, geográficos y económicos para que sea efectiva”, precisó Moya, quien recomienda el aislamiento voluntario a los segmentos con posibilidades de hacerlo y mayores vulnerabilidades.
“Habrá que seguir manteniendo en lo posible el teletrabajo”, continuó el epidemiólogo. “Todos los protocolos de prevención en los centros laborales, la vía y el transporte público también son fundamentales”, sostuvo. Llamó a priorizar las medidas en las residencias de adultos mayores y a vigilar los pueblos rurales e indígenas.
Moya llamó a seguir evitando los contagios a la espera de encontrar cuadros de medicamentos más efectivos, algo que se ha ido logrando mundialmente, y los 130 estudios para una vacuna preventiva. “No podemos disminuir la información que llega a la población: ahora es fundamental el rol de los comunicadores”, concluyó.
Música a todo volumen en los barrios y escapadas a las playas, marcaron el fin de semana en La Habana, que desde el viernes 3 de julio comenzó la primera fase de la recuperación de la pandemia, una etapa en la que ya se encontraban desde junio el resto de las 15 provincias del país de 11,2 millones de habitantes.
“Ahora hay que tomar más medidas porque siguen saliendo casos en La Habana, las personas se confían más y protegen menos”, dijo a IPS la contadora Beatriz Lomas.
“Yo he trabajado toda la pandemia porque los bancos no cerraron ni soy vulnerable: uso la mascarilla, me lavo las manos y mantengo la distancia entre las personas”, compartió.
Desde Montevideo, la educadora Lilian Celiberti compartió que en su país, donde no hubo un fuerte impacto sanitario, la reapertura de comercios, restaurantes y cafeterías desde junio alivia a los segmentos más vulnerables económicamente en la pandemia y a los que más difícil les resultó el confinamiento voluntario.
“Los pequeños negocios y trabajadores informales fueron muy afectados sobre todo el sector gastronómico y de comercios callejeros, que cerraron por más de dos meses. También los trabajadores con seguros que no cubren el 100 por ciento de la pérdida del empleo y los de la cultura, que siguen esperando porque abran teatros y demás”, reveló.
Para la coordinadora del colectivo feminista Cotidiano Mujer, dedicado a la comunicación y los derechos humanos, es una deuda en la pospandemia mejorar la información, “que se ha basado en la contabilización de muertos e infectados pero carece de un análisis de fondo para cambiar estilos de vida”.
Los rebrotes de covid y el inevitable crecimiento de la pobreza y el desempleo marcan el desconfinamiento o la flexibilización de las restricciones en América Latina.
“Estamos en un momento un poco complicado porque están creciendo el número de casos en ciertas zonas”, reveló la consultora de políticas Carmen Lía Meoño, desde San José de Costa Rica, donde también se viven las tensiones por los rebrotes asociados a las primeras medidas de desescalada.
“Nosotros teníamos un 20 por ciento de la población en pobreza extrema, que no bajaba, claramente ahora eso está aumentando, al igual que el desempleo… el sector informal está muy golpeado. Y su mayor ingreso del país es el turismo, que está cerrado”, enumeró, quien además subrayó la vulnerabilidad de los migrantes.
La antropóloga social mexicana Laura Estela Mendoza, resumió a IPS, también desde San Cristóbal de las Casas, un sentir en su país que, con sus matices, se repite en la región. “Mucha gente tampoco cree en el virus… Han pasado tantas cosas en el país, que la gente no confía en el Estado mexicano. La cuarentena comenzó siendo algo de 15 días y ya llevamos desde abril con mucho desempleo, por lo que las personas no han podido seguir confinadas”, afirmó.