Organizaciones sociales le pidieron a Fernández celeridad en la entrega de alimentos
Por Gimena Fuertes
Las organizaciones sociales llegaron hasta Olivos para llevarle el reclamo al presidente Alberto Fernández de mayor celeridad en la entrega de alimentos para los comedores populares. Se fueron con la promesa en la mano. “Nadie se salva solo y no me voy a olvidar de ninguna persona en ningún barrio necesitado de la Argentina”, aseguró el Presidente.
El vínculo entre las organizaciones territoriales y el gobierno nacional se había tensado luego de la denuncia por la compra de alimentos a empresas cartelizadas en medio de la emergencia social y sanitaria. Fue una forma de pedir ser tenidos en cuenta a la hora del reparto de los recursos en los barrios populares, que había quedado hegemonizado por los intendentes. Fue el propio Daniel Arroyo, ministro de Desarrollo que recibió las esquirlas del conflicto, quien volvió a tender los puentes.
Este jueves por la noche Fernández y los dirigentes y dirigentas de las organizaciones se prodigaron elogios. El presidente reconoció el trabajo de los movimientos sociales, quienes a su vez, destacaron la forma en la cual el gobierno enfrenta la pandemia.
Dina Snchez, referenta nacional del Frente Popular Darío Santillán y de la UTEP expresó la preocupación de que lleguen los alimentos para los miles de comedores populares que están dando respuesta en los barrios donde creció exponencialmente la demanda alimentaria y se refirió al aumento de los femicidios y la violencia machista. La ayuda debe llegar más rápido, no puede haber trabas burocráticas cuando hablamos de la comida, los movimientos populares somos parte dela solución y estamos poniendo el cuerpo para salir de ésta”, señaló al salir de Olivos.
En tanto, Juan Carlos Alderete de la CCC, sostuvo que coinciden “totalmente con las medias y decisiones que ha tomado el gobierno para el pueblo más vulnerable”. “También propusimos cómo volver al trabajo en la pequeña obra pública sin amontonarnos”, contó. Es que las cooperativas de las organizaciones barriales formarán parte del plan de pequeña obra pública cuando se comience a flexibilizar la cuarentena para ese sector, según había adelantado el ministerio de Obra Pública de la Nación.
Por su parte, Jakie Flores advirtió que “la violencia de género es una emergencia dentro de la emergencia sanitaria”. “Nos están arrebatando la vida, porque el violento tiene que quedarse en su casa”, relató y sostuvo: “hemos sido escuchadas”.
En tanto, Nicolás Cacopresi del MTE, sostuvo que “hay cinco millones de personas en la economía informal, más 3 millones de monotibutistas, y ése es el saldo de la Argentina que se paró”, caracterizó. “Nos preocupa la situación de los alimentos, nos dijeron que las compras ya fueron realizadas. En este Estado de excepción hay que resolver de manera más rápida”, pidió.
Junto al presidente, escucharon también estuvo Arroyo, el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; el secretario general, Julio Vitobello; el secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Béliz; el secretario de Relaciones Políticas y Parlamentarias de Jefatura de Gabinete, Fernando Navarro; y el secretario de Economía Social, Emilio Pérsico.
Además de Sánchez, Flores y Alderete, estuvieron Gildo Onorato del Movimiento Evita, Juan Grabois (MTE), Gringo Castro (Ctep), Rafael Krejzler (MPD La Dignidad) y Daniel Menéndez (Somos-Barrios de Pie), entre otros.
“Tenemos la oportunidad de hacer un sistema más justo y ustedes son actores centrales porque tienen respeto en sus comunidades”, dijo Fernández al cierre del encuentro.
Las organizaciones apoyan la cuarentena pero advierten por la violencia institucional
En el marco de las reuniones que la ministra Sabina Frederic viene realizando con diferentes actores sociales, se reunió con representantes de las organizaciones sociales Barrios de Pie / Libres del Sur y Frente de Organizaciones en Lucha (FOL), tal como ya había hecho con otras en anteriores encuentros. «Hay un punto de consenso en todas las organizaciones sociales, independientemente de la posición que tengan respecto al Gobierno. Todas coinciden en la necesidad de mantener la cuarentena, contra el discurso de la derecha de que aboga por la circulación económica», dijo a Página/12 el secretario de Articulación Federal de la Seguridad, Gabriel Fuks. «Claro que está la preocupación de que lleguen los alimentos y los recursos. Ahí sí aparecen matices, algunas posiciones más duras, otras que ven que el pago del Ingreso Familiar de Emergencia la semana próxima dará una inyección fuerte», agregó. Los casos de violencia institucional que se vienen registrando en medio del aislamiento, fundamentalmente en las barriadas más humildes, estuvieron entre las preocupaciones centrales que llevaron las organizaciones. También se planteó la necesidad de flexibilizar la circulación para la atención en comedores.
La ministra de Seguridad destacó en un comunicado que “para esta gestión es muy importante, y más en esta circunstancia particular, tener el punto de vista de estas organizaciones, pues tienen un trabajo de militancia y compromiso en los barrios. Es un intercambio muy significativo, porque nos ayuda a contrastar con otras visiones más institucionales acerca de los problemas que están padeciendo los sectores más vulnerados”.
Durante el encuentro se conversó sobre la situación de los vecinos de los barrios populares y el vínculo con las fuerzas de seguridad, haciendo hincapié en la detección y denuncia de posibles casos de violencia institucional. Además, los dirigentes sociales plantearon las dificultades que existen para acceder al reconocimiento del Certificado Único Habilitante para Circulación que emite el Estado Nacional y expresaron sus preocupaciones sobre el acceso y la distribución de alimentos en los territorios.
Entre otros ejemplos de lo que se está viviendo en los barrios, la coordinadora nacional de Barrios de Pie / Libres del Sur Silvia Saravia relató a este diario que el miércoles por la noche hubo un desalojo en San Martín, donde la policía bonaerense y el municipio tiró abajo unas casillas muy precarias. «Lo denunciamosen la reunión y nos dijeron que iban a hacer un seguimiento», expresó.
Para Saravia, «es valioso que desde la mayor instancia de decisión del Estado se nos convoque para conocer nuestra perspectiva, valoramos la actitud de escucha y la preocupación por lo que estamos pasando. Sobre todo por los impedimentos de fuerzas de seguridad provinciales y locales para que lleguen los alimentos, lo cual, además genera problemas entre vecinos». La dirigente ponderó también la implementación del protocolo para los uniformados y la línea que puso el ministerios para denuncias de abusos policiales y represión estatal. «Todos los actores que tenemos inserción territorial y todos los niveles institucionales debemos trabajar juntos, dejando de lado diferencias en una situación tan excepcional como ésta», aseguró.
«Las organizaciones sociales trajron varias preocupaciones, entre ellas las dificultades en comedores y merenderos para el desplazamiento de las personas y la mercadería, situaciones de violencia con policías provinciales que trasladamos a los ministros de Seguridad a través del Consejo de Seguridad», enumeró Fuks a este diario. El funcionario dijo que tomaron nota de pedidos puntuales de casos de violencia de género, del alerta por la llegada de la covid-19 a los barrios y el reclamo de que, antes que los equipos de salud, llegan las fuerzas policiales.
“Recibimos demandas de problemas concretos y también debatimos temas políticos más generales. Tenemos oído para eso y capacidad para responder a las situaciones puntuales planteadas, especialmente en aquellos casos donde se afecten derechos, donde haya violencia institucional y sobre todo en los que el rol de las organizaciones de transformarse en un vínculo con el territorio pueda verse afectado”, señaló Fuks.
Además de la ministra Frederic y el secretario Fuks, estuvieron presentes en el encuentro la subsecretaria de Programación Federal y Articulación Legislativa, Silvia La Ruffa, y el subsecretario de Control y Transparencia Institucional, Esteban Rosa Alves.